Si, la Samsung S95C QD-OLED (y muy probablemente la Samsung S93C) llevan un disipador térmico integrado, hecho enteramente en grafito y que ocupa la totalidad de la superficie trasera del televisor. Técnicamente, como veremos, está pegado al panel y tras éste es donde va la chapa metálica donde se atornillan el resto de dispositivos, circuitos, placas base y demás.
Realmente siempre se ha sabido, dado que fue la propia Samsung Displays la que anunció la llegada del disipador térmico de grafito a sus nuevas QD-OLED 2.0, junto a otras mejoras como una mayor vida útil, eficiencia, menor consumo y mayor brillo. Gracias a un usuario de la comunidad de AVPasión, hoy podemos publicaros las fotografías del panel y su disipador, al menos confirmado totalmente en una S95C QD-OLED.
El secreto mejor guardado de la Samsung S95C QD-OLED es un disipador de grafito para evitar quemados
Incluir un disipador de calor es una idea genial por varios motivos. Originalmente concebido por Panasonic allá por el 2019, con su exitosa serie GZ2000. A los japoneses se les ocurrió atajar el principal problema del OLED para aumentar en brillo: el calor. Se les ocurrió añadir un disipador trasero (una gruesa plancha de cobre) entre el panel y la electrónica trasera, permitiendo así que el calor generado por los píxeles del OLED se disipara antes…con múltiples ventajas.
Para empezar, esa serie de paneles consiguió llegar a los 1000 nits al 10%, todo un hito (y más si recordamos que esa serie de televisores se lanzaron hace ya tres años y medio). Además, la rápida disipación del calor hace que las retenciones y los quemados sean prácticamente inexistentes, ya que el subpíxel no se degrada tanto al expulsar el calor fuera del propio panel.
Por si fuera poco, además, trae consigo una tercera ventaja: los subpíxeles se ven sometidos a una menor corriente eléctrica, por lo que al generar el calor y éste disiparse rápidamente, su vida útil aumenta considerablemente. Si tocamos un panel con disipador, inmediatamente veremos que éste está más frío (el panel, no el disipador) síntoma de que la TV es capaz de expulsar todo el calor generado de forma impecable y, como indicamos, repercutiendo positivamente en la vida útil del producto.
Eso si, aunque el disipador tiene todas las ventajas citadas anteriormente, lo cierto es que el panel adquiere un grosor de más del doble -al menos en las primeras versiones-, ya que tiene que albergar la «plancha» que actúa de disipación entre el panel y el chasis. En la foto de ejemplo, también hay que tener en cuenta que Panasonic monta unos altavoces especiales, que no es el caso de Samsung.
La idea de Samung: un disipador más delgado y barato hecho de grafito
Los thermal pads que usó Samsung en 2022 (de grafito) vuelven a ser la clave. Se trata de una composición gomosa como la encontrada en informática, pero formados por finas láminas de grafito incrustadas en resina de silicio. La resina de silicona tiene una alta humectación superficial, lo que significa que se adhiere fácilmente a las superficies con las que entra en contacto. Y aguanta temperaturas de hasta 150 °C antes de quemarse.
El año pasado Samsung utilizó dichas láminas de grafito, con una particularidad: tienen conductividad térmica en una sola dirección. Por lo tanto, si la orientación de las láminas colocadas dentro de la resina es perpendicular al panel, conducirán el calor lejos del panel hacia el mismo punto en la parte posterior de los propios Thermal Pads, que al ser unidireccionales impedirán que ese calor «vuelva a entrar» hacia el panel.
Sin embargo, los thermal pads no eran capaces de «distribuir» el calor por todo el panel, disipándolo como si hace un disipador térmico real de aluminio, por lo que aunque ayudan, no son una buena idea para mitigar los puntos críticos en el panel: áreas localizadas con alta generación de calor. Pero este año es diferente.
Aunque técnicamente sigue siendo inferior a una plancha del mismo material o similares (aluminio, cobre, etc.), este año Samsung ha mejorado dicho disipador, ya que ahora al menos en la Samsung S95C viene cubriendo la totalidad del panel y con un grosor mayor que los thermal pads del año pasado, por lo que unido a la excelente conductividad del grafito (uno de los materiales con más conductividad de calor del mundo) lo hacen ideal para hacer el que el panel sufra menos retenciones y quemados.
Como podéis ver en la fotografía superior, el panel viene ya montado de forma que está totalmente pegado a la lámina de grafito y ésta, a su vez, al chasis metálico donde finalmente se atornillan las placas T-CON y demás circuitería necesaria para el correcto funcionamiento del televisor. En caso de un cambio de panel, dicho mix viene ya de fábrica, por lo que es altamente probable que la Samsung S93C también cuente con el mismo disipador, al menos en 77 pulgadas que es la versión que seguro que usa el panel 2.0.