Hoy os vamos a hablar de por qué es el mejor momento histórico para comprarse un televisor OLED de gama alta. Y lo es por 3 razones que iremos viendo a lo largo del artículo. No solo es un buen año para cambiar una gama OLED más antigua de hace 3-4 años, si no que especialmente estamos en un punto dulce para saltar a esta tecnología si aún no lo hemos hecho. Concretamente, además, en este 2023 si que merece la pena completamente hacerse con una gama
3 razones por las que es el año perfecto para comprar un televisor OLED de gama alta alta
En este artículo vamos a cubrir ambas tecnologías, la nueva QD-OLED y por otro lado las nuevas OLED Meta. En ambos casos vamos a orientar esta noticia/tutorial a la gama flagship ya que en este 2023, por fin, no solo tienen un cambio estético si no que suponen una auténtica revolución en varios aspectos como la calidad de imagen, el filtro antireflejos y por último incorporan mecanismos para evitar retenciones y quemados. Así que sin más, vamos allá.
1. Aumento notable en la calidad de imagen y el brillo
Aquí vamos a diferenciar entre los modelos que montan la nueva tecnología QD-OLED con los que montan los paneles WOLED Meta. De los primeros, que incorporan el nuevo panel QD-OLED 2.0, solo tenemos dos representantes: la Sony A95L y la Samsung S95C.
Estos dos televisores tienen el nuevo emisor azul que incorpora la tecnología QD-OLED en 2023, por lo que al igual que ocurre con las nuevas WOLED, encontramos un aumento significativo de brillo hasta llegar a los 1400 nits al 10% y más de 260 a pantalla completa -siempre en los modos de image más cercanos al cine-, manteniendo la pureza del color incluso en contenido extremadamente brillante como es el HDR.
Por otro lado tenemos los exponentes de la tecnología WOLED con el nuevo panel META, a saber: la LG OLED G3, la Panasonic MZ2000 y la Philips OLED908+. Las tres incorporan dicho panel, que consiste en aumentar exponencialmente su nivel de brillo hasta unos 1500 nits y 230 a pantalla completa (en los modos más cercanos a la norma) gracias a esa capa de microlentes existente entre el encapsulado y la pantalla en si. Además, LG ha conseguido mejorar los colores y hacer que prácticamente no haya diferencia con los de las QD-OLED en contenido HDR y Dolby Vision. Realmente impresionante.
Este es el motivo más importante por el que saltar a un OLED premium de 2023. El salto en brillo, sea cual sea la tecnología elegida, es impresionante. Además, es totalmente complementaria con las otras dos que vamos a ver que, como veréis, van de la mano con la calidad de imagen.
2. Mejora en el filtro antirreflejos
Otra enorme ventaja de las OLED de 2023 es el salto cualitativo que han dado en el tema de los reflejos. Aunque parezca algo nimio, no lo es en absoluto para aquellos que quieren disfrutar de un televisor OLED en un entorno iluminado.
Como vimos en las primeras impresiones de la Philips OLED908+, tanto esta como las demás OLED META van a incorporar un nuevo filtro antirreflejos de primer nivel, con el que se consigue reducir hasta un 50% más los reflejos directos e indirectos en el panel, como una especie de «agujero negro«.
Hablamos de Vanta Black, un nuevo revestimiento que, como informan desde FlatPanelsHD, tiene mucho que ofrecer. Según indican en el citado medio, LG ha confirmado que contará con esta tecnología en su LG OLED G3. Además, la Panasonic MZ2000 y la Philips OLED 908+ también estrenarán este revestimiento que ofrece unas mejoras notables en los reflejos.
«El revestimiento Super Anti Reflecting del G3 reduce el reflejo en aproximadamente un 25 % con respecto al del C2. Esta reducción del reflejo ayuda en el contraste y la nitidez, así como en la capacidad de ver más en imágenes oscuras cuando hay luz ambiental», un dijo el portavoz de LG Electronics a FlatpanelsHD.
Por su parte, los televisores QD-OLED ya contaban con un excelente filtro antirreflejos, aunque con algunos problemas derivado de no usar un polarizador, como el hecho de que el negro pueda «levantarse» en entornos muy iluminados. Pero aún así, está a la altura del nuevo Vanta Black de 2023, por lo que tanto la S95C como la A95L son muy buenas candidatas para ver de día.
3. Disipador térmico para evitar retenciones y quemados
El tercer motivo por el que deberías optar por un televisor OLED de gama alta de nueva generación es por los quemados. Todos los modelos aquí descritos van a contar, de una forma u otra, con un disipador térmico que irá montado pegado al panel.
En concreto, si tocamos un panel con disipador, inmediatamente veremos que éste está más frío (el panel, no el disipador) síntoma de que la TV es capaz de expulsar todo el calor generado de forma impecable y, como indicamos, repercutiendo positivamente en la vida útil del producto. Técnicamente, la plancha trasera actúa como un heatpipe gigante, que retiene todo el calor y poco a poco lo va expulsando por detrás.
Este disipador (aunque en el caso de la Samsung usará una especie de goma térmica) actuará como puente térmico, expulsando todo el calor que generan los nuevos televisores OLED que, como hemos explicado antes, alcanzarán cotas de brillo -y calor- mucho mayores, por lo que es necesario ponerles un mecanismo como este. Además, en el caso de los paneles META, se ha demostrado que el uso del deuterio que compone el panel, es notablemente más resistente a quemados y retenciones.
Así pues, estos son los 3 motivos que nos inclinan a pensar que es el mejor momento de la década para comprarse un nuevo televisor OLED. Si, sabemos que actualmente los precios son prohibitivos pero cuando empiece la época de rebajas -el Black Friday suele ser una buena fecha- será el mejor momento de hacerse con una de estas super OLED.