Los amplificadores «todo en uno» se han convertido en dispositivos tremendamente populares en los últimos años. Puede que los usuarios más audiófilos sigan prefiriendo sistemas con componentes separados, pero la gran mayoría de usuarios buscan simplicidad. El nuevo amplificador de streaming Audiolab Omnia ha sido diseñado para satisfacer a este tipo de usuarios, esos que buscan un equipo compacto que pueda hacer prácticamente de todo manteniendo un alto nivel de calidad de sonido.
Para conseguirlo el Audiolab Omnia podríamos decir que combina la amplificación del Audiolab 6000A, uno de los amplificadores mejor valorados de la marca, con un reproductor de CDs, una muy buena conectividad, capacidad para reproducir desde servicios de streaming gracias al uso de DTS Play-Fi e incluso con un amplificador para auriculares. Todo ello metido en un dispositivo relativamente compacto y de moderno diseño.
Omnia significa «Todo» en latín, así que Audiolab deja muy claras sus intenciones en este producto. He tenido ocasión de probar el Audiolab Omnia durante unas semanas y en este análisis os cuento cómo funciona y qué me ha parecido. ¿Realmente lo hace «Todo» como su nombre indica? Y lo más importante, ¿es mejor o peor que sus rivales directos, como el NAD C700 o el Cambridge Audio Evo 75? Si estás buscando un dispositivo de este tipo, no te lo puedes perder.
Pero antes de nada, darle las gracias a Sarte-Audio, distribuidor oficial de Audiolab en España, por la cesión del producto para su análisis y la confianza depositada en AVPasion.
Diseño robusto, elegante y con toques modernos
El Audiolab Omnia luce un diseño que combina lo clásico con lo moderno. Tiene toques del estilo más «retro» de Audiolab, como el botón de encendido situado en la parte derecha, pero también luce detalles modernos, como la llamativa pantalla de 4.3 pulgadas que tenemos en el centro. Entre la pantalla y el botón de encendido tenemos otros controles físicos, en forma de botones de pequeño tamaño.
Más concretamente, tenemos el botón de cambio de entrada, el de play/pause, un botón para abrir y cerrar la bandeja del CD y dos botones para el control de volumen, eliminando así el habitual dial que solemos ver en la mayoría de equipos HiFi. La bandeja del CD se sitúa a la izquierda de la pantalla y tiene un diseño muy discreto, además de un mecanismo realmente silencioso.
Volviendo a la pantalla, esta nos muestra bastante información. Podemos ver desde el menú de configuración hasta la carátula y los detalles de la pista que estamos reproduciendo, pasando por unos medidores VU en tiempo real que nos permiten realizar un seguimiento de los picos dinámicos de la música.
El diseño, la construcción y el acabado son realmente buenos para el precio que tiene el dispositivo. El equipo pesa más de 9 kilos, lo cual demuestra que estamos ante un dispositivo robusto y bien construido. Quizás no sea tan atractivo como el Cambridge Audio Evo 75, pero a mí personalmente me ha gustado su diseño. Creo que puede quedar realmente bien colocado, por ejemplo, en un aparador junto con los altavoces que elijamos.
Y poco más que decir del diseño del dispositivo de Audiolab. Tiene un tamaño que podríamos considerar como estándar en el mundo HiFi. En la parte superior tenemos unos agujeros de ventilación, rematados con el nombre de la marca grabado en el metal. Y en la parte trasera tenemos prácticamente todas las conexiones que ofrece el dispositivo, de las que ahora hablaremos, así como las dos antenas WiFi y la antena Bluetooth.
¿Qué ofrece el Audiolab Omnia a nivel técnico?
Lo cierto es que el Audiolab Omnia tiene prácticamente de todo. Va a ser difícil encontrar algo que no pueda hacer este dispositivo. Y lo cierto es que es bastante sorprendente que Audiolab haya conseguido meter tantas funcionalidades en un equipo que es relativamente compacto.
En primer lugar, el Audiolab Omnia es un amplificador estéreo. A diferencia de muchos de sus rivales, que utilizan amplificación de Clase D, Audiolab ha optado por amplificación de Clase AB. El Omnia ofrece una potencia de 50 vatios por canal a 8 ohmios y 75 vatios por canal a 4 ohmios. Si bien no es el amplificador más potente que he probado, debería ser suficiente para mover la gran mayoría de altavoces que escogeríamos para acompañar a este integrado.
Pero la parte de amplificación no serviría de nada si el dispositivo no pudiera recibir contenido de diversas fuentes. Y la verdad es que el Audiolab Omnia está muy bien equipado en este aspecto. Por ejemplo, cuenta con cinco entradas digitales: dos coaxiales, dos ópticas y una USB. Tanto las coaxiales como las ópticas pueden trabajar con contenido de hasta 192 kHz, mientras que mediante el puerto USB obtendremos la la capacidad de manejar PCM y DSD 512 de hasta 768 kHz. Por otro lado, todas las entradas digitales ofrecen decodificación MQA completa.
Siguiendo con el apartado digital, el Audiolab Omnia también tiene conectividad Bluetooth 5.0 (con aptX HD, aptX Low Latency y compatibilidad con códecs AAC) y es compatible con los servicios de streaming de música. Esta última funcionalidad se basa en la plataforma DTS Play-Fi y nos proporciona acceso a prácticamente cualquier fuente online que tengamos. Pero luego hablaremos de este sistema. Por último, cuenta con una unidad de CD que nos permitirá reproducir nuestra colección de discos físicos.
De todas estas entradas digitales se encarga un DAC ESS9038 Q2M SABRE con tecnología de 32 bits de la estadounidense ESS Technology. Un componente muy apreciado por la firma británica y con el que ya tienen bastante experiencia.
Y si todas las posibilidades digitales que ofrece el dispositivo no son suficientes, el Audiolab Omnia también cuenta con tres entradas analógicas y una etapa de fono de imán móvil (MM) para que podamos conectar nuestro tocadiscos.
Además de todo lo comentado, en el panel trasero del Omnia también nos encontramos con una entrada Ethernet, pre-outs estéreo RCA para poder conectar un amplificador externo si así lo deseamos y un par de conectores para altavoces que parecen de buena calidad. Y no nos podemos olvidar del amplificador de auriculares con topología de realimentación de corriente que incluye el Omnia, que nos ofrece una toma de auriculares de 6.35 mm situada en la parte frontal del dispositivo.
Audiolab Omnia: características técnicas
Audiolab Omnia | Características |
---|---|
Tipo de dispositivo | Amplificador streamer con lector de CD |
Amplificación | Clase AB |
Potencia | 2x50W (8ohm) / 2x75W (4ohm) |
DAC | ESS9038 Q2M SABRE de 32 bits |
Entradas | Tres entradas analógicas RCA Entrada Phono (MM) Dos entradas digitales coaxiales Dos entradas digitales ópticas Una entrada USB tipo B para PC Una entrada USB tipo A para HDD 12V Trigger |
Salidas | Pre-Amplificador Dos tomas para altavoces Auriculares 6.35 mm 12V Trigger |
Conectividad inalámbrica | WiFi Bluetooth 5.0 (compatible con aptX/aptX LL) |
Sistema | DTS Play-Fi |
Dimensiones | 440 x156 x 327 mm |
Peso | 9.1 kg |
Otros | Pantalla de 4.3 pulgadas Reproductor de CD incorporado Amplificador de auriculares integrado Certificado MQA Full decoder Roon Tested |
Disponibilidad | Disponible |
Precio | 1.799 euros |
DTS Play-Fi para aprovechar el streaming al máximo
Audiolab ha decidido utilizar la plataforma DTS Play-Fi para dotar al Omnia de las funcionalidades de streaming de música. Utilizar este sistema tiene algunas ventajas, como ser parte de un sistema multisala más amplio, ya que se trata de una plataforma abierta a otros fabricantes. Es decir, no es una plataforma propia. Otra ventaja es que ofrece acceso a una gran cantidad de servicios de streaming de forma nativa, ofreciéndolos todos en una misma aplicación.
Pero también tiene sus inconvenientes, como no poder controlar el funcionamiento de la plataforma o revisar los fallos que pueda tener. Por desgracia, en mi caso particular, el funcionamiento de la plataforma durante la prueba no ha sido del todo bueno. Y es extraño, ya que la aplicación tiene buena puntuación en las tiendas de aplicaciones, así que podría ser un tema de incompatibilidad con mi red o mis dispositivos.
La cuestión es que, durante la prueba, los tiempos de acceso, tanto para el contenido de streaming como para el contenido que tengo en mi red (en un NAS por ejemplo), han sido lentos en comparación con otros sistemas utilizados por la competencia. Pero quizás lo más molesto de todo hayan sido los cortes. Incluso con el Audiolab Omnia conectado por cable, cada dos por tres se cortaba la conexión de DTS Play-Fi con el amplificador.
Cuando comencé a probar el amplificador la plataforma DTS Play-Fi perdía la conexión y, de vez en cuando, paraba la música sin motivo. Cuando volvías a coger el móvil o la tableta para ver qué había pasado, dabas al Play y a veces continuaba y otras te «tiraba» al menú principal, con lo cual tenías que volver a empezar. Esto pasaba tanto reproduciendo desde Tidal (que es el servicio que suelo utilizar para música en streaming) como reproduciendo archivos Flac desde la colección que tengo almacenada en mi NAS. Y hablando del NAS, en algunas de estas «desconexiones» al volver no encontraba el servidor, tenía que volver a empezar el proceso para localizarlo.
Durante las semanas que tuve el Audiolab Omnia realicé diversas pruebas. En ellas descubrí algunas configuraciones que mejoraban el problema, como por ejemplo desactivar el ahorro de energía de la aplicación (en un móvil Android). También descubrí que los cortes comentados pasaban especialmente cuando ponía algo de música y bloqueaba la pantalla del móvil. En estos casos, a la segunda o tercera canción como máximo, el amplificador perdía la conexión con Play-Fi y la música se paraba. Si dejaba el móvil sin bloquear, esto no ocurría tan a menudo. Alguna vez pasaba sí, pero era mucho menos frecuente. Así que no puedo descartar que fuera un problema de incompatibilidad de algunas funciones de mi móvil con el sistema DTS Play-Fi.
Además de los cortes, la aplicación de Play-Fi no es la más intuitiva. Por ejemplo, para poder reproducir archivos HD y aprovechar las capacidades del Audiolab Omnia, tenía que activar una opción antes de seleccionar el amplificador que estaba un poco escondida (Modo de escucha crítica lo llama Play-Fi). De hecho, tuve que buscar en el página web de Play-Fi para saber cuál era.
En definitiva, se puede usar sí, pero la experiencia, en mi caso, no ha sido demasiado satisfactoria. Como os decía, puede que haya sido un tema personal, ya que, en general, la aplicación no tiene malas valoraciones y sé de usuarios a los que les funciona correctamente. Es cierto que no es la mejor del mercado, pero si funciona bien nos permite acceder cómodamente a nuestra biblioteca digital.
Calidad de sonido: musicalidad Audiolab heredada del amplificador 6000A
Cuando fabricas un dispositivo «todo en uno» y quieres mantener la calidad en todos sus apartados no puedes dejar de lado ningún detalle. Es decir, un dispositivo de este tipo debe de sonar bien tanto con fuentes digitales como con fuentes analógicas. Y la verdad es que Audiolab ha hecho un trabajo impresionante en este aspecto, ya que el Audiolab suena notablemente consistente con cualquier fuente, incluso con DTS Play-Fi.
El Audiolab Omnia ofrece la misma curva tonal y capacidad dinámica del amplificador integrado Audiolab 6000A. Tenemos unos graves rápidos y bien controlados, así como unos agudos brillantes. Pero donde destaca realmente el Omnia es en la reproducción del rango medio, muy detallado y equilibrado. A pesar de ofrecer un sonido bastante neutro, en el rango medio sí he notado algo más de calidez. Pero de ninguna forma ha supuesto algo malo o que afecte a la calidad de sonido.
En definitiva, el Audiolab Omnia ofrece un rango de frecuencias unificado, con un extremo inferior profundo y rápido y una parte superior nítida y con buen ataque. El rango medio es, como decía, bastante detallado. Por otro lado, el Omnia no tiene ningún problema con las grabaciones más dinámicas, siendo capaz de mostrar desde las variaciones más sutiles hasta los grandes cambios dinámicos.
Conclusiones y precio
El Audiolab Omnia es un producto magnífico, con una relación calidad-precio difícil de igualar. Cuenta con un diseño bonito (al menos en mi opinión), una construcción robusta y de calidad, un apartado de conectividad muy completo y un rendimiento sónico realmente bueno. Además, equipa un reproductor de CDs muy interesante, ya que ofrece bastante calidad tanto a nivel sonoro como a nivel de transporte.
En la parte del streaming, mi experiencia con el sistema Play-Fi no ha sido buena. He tenido fallos que, aunque puedan no parecer demasiado importantes, afectan directamente a la experiencia de usuario. Pero, como os decía, no todo el mundo sufre estos fallos, ya que de ser así la aplicación tendría muy malas valoraciones, algo que no he visto. Quizás no sea la mejor plataforma del mercado, pero debemos tener en cuenta que el Audiolab Omnia tiene más funcionalidades que la mayoría de sus rivales. Incluso que algunos que son bastante más caros.
Así que estamos ante un dispositivo muy completo y que ofrece un gran rendimiento. En mi opinión, si Play-Fi mejorara en algunos aspectos el Audiolab Omnia sería el rival a batir en su rango de precios.
El Audiolab Omnia lo podemos encontrar en tiendas especializadas con un precio de 1.799 euros. Lo tenemos disponible en dos colores: negro y plata.