En verano del pasado año tuve ocasión de probar la JBL Bar 1000, una barra de sonido Dolby Atmos de gama alta con 7.1.4 canales y una potencia total de 880W. Una barra de sonido que nos dejó muy buenas impresiones y que ofrecía un añadido que no tenían otros modelos: unos altavoces traseros totalmente inalámbricos. Un concepto original, con sus pros y sus contras. Aún así, como decía, la barra me pareció realmente buena. Pero JBL quería subir un poco el nivel y lanzó para ello la JBL Bar 1300, un modelo con más altavoces y más potencia.
Y como no podía ser de otra forma, teníamos que probarla. La JBL Bar 1300 es el actual tope de gama del fabricante, contando con 11.1.4 canales y un total de 1170 W de potencia. Por supuesto mantiene la apuesta por los altavoces traseros totalmente inalámbricos, que en este modelo son un poco más grandes. Y también incorpora un subwoofer inalámbrico de 10 pulgadas. Todo ello en una unidad que, como es lógico, es un poco más grande que el modelo inferior, y que mantiene (y mejora en algunos casos) todas las características vista en la Bar 1000.
Ahora echaremos un vistazo a todo lo que ofrece la JBL Bar 1300, que ya os adelanto que es mucho. Pero antes de nada quería dar las gracias a JBL España y su agencia de comunicación por la cesión del producto para su análisis y la confianza depositada en AVPasión. Y también decir que, como siempre aunque no lo recordemos en todos los análisis, esta review se basa en la experiencia que yo personalmente he tenido con el dispositivo. Así que, como siempre hacemos en AVPasión, contaremos tanto lo bueno como lo malo. ¡Empezamos!
Altavoces traseros que van y vienen
La JBL Bar 1300 tiene un diseño muy similar al de su hermana «pequeña», la Bar 1000. En realidad, son prácticamente idénticas. La mayoría del cuerpo de la barra está cubierto por una parrilla metálica que cubre los altavoces, mientras que seguimos teniendo algunas zonas que son de plástico negro (muy pocas en realidad, ya que cuantos más altavoces menos plástico). El negro es liso, sin brillos, algo lógico ya que la barra la colocaremos justo debajo del televisor. La zona central es donde más parte plástica tenemos, teniendo aquí el logotipo de la marca y los poco botones físicos que incluye la barra.
En cuanto a medidas, la Bar 1300 de JBL mide 137.6 cm de largo si tienes los altavoces traseros unidos a la unidad principal y 100 cm de largo si no los tiene. La altura son 6 cm, así que no vamos a necesitar un gran espacio bajo el televisor. Bien hecho JBL. Y otra cosa bien hecha, la barra no tienen ningún tipo de luz en la parte superior. Cuenta con una gran pantalla LED, colocada en la parte frontal, bajo la malla metálica. En ella podemos ver desde el volumen hasta el tipo de sonido que está recibiendo la barra.
En la parte trasera, justo en el centro, tenemos los conectores. La JBL Bar 1300 está equipada con tres entradas HDMI (compatibles con Dolby Vision) y una salida HDMI compatible con eARC. También cuenta con Ethernet, una óptica por si no tenemos HDMI en el televisor, un puerto USB-A que puede cargar y conectividad tanto WiFi 802.11ax como Bluetooth.
Más allá de la barra principal tenemos los dos altavoces traseros totalmente inalámbricos. Como ya vimos en la Bar 1000, los altavoces traseros utilizan una batería para poder colocarlos en cualquier parte sin necesidad de que estén conectados a la corriente. Aunque en la página web el fabricante indica una autonomía máxima de 12 horas, la realidad no es tan optimista. Si estamos viendo una película o serie, que usan bastante estos canales, la autonomía rondará las 4 horas máximo.
No es mucho, pero al menos cada altavoz cuenta con un puerto USB-C que podemos utilizar para conectar un cargador cualquiera y alimentarlos de forma indefinida en su posición trasera. Porque la otra opción para cargarlos es acoplarlos a los laterales de la barra, lo cual es muy cómodo. Sin embargo, tendremos que tener en cuenta el espacio necesario para ponerlos. Por ejemplo, en mi caso, la barra sin los altavoces traseros cabía perfectamente entre las patas del televisor, pero no tenía suficiente espacio para acoplar los altavoces surround.
Por otro lado, JBL ha querido darles un mayor uso a estos altavoces, más allá de ser solo altavoces de sonido envolvente. Así que ha implementado un sistema con el que podremos utilizar uno o los dos altavoces inalámbricos como altavoces Bluetooth independientes, simplemente emparejándolos con un móvil o una tableta. Podemos usar uno solo o bien combinar los dos para conseguir sonido estéreo. Muy buena idea.
Una última cosa, JBL suministra también unas piezas magnéticas que se colocan en la barra principal cuando desconectamos los altavoces de los laterales de la misma. Tapan a la perfección los «feos» conectores y quedan realmente bien. Si no nos dicen que ahí se conecta algo no nos daremos cuenta. Lo mismo ocurre con los altavoces traseros, también cuentan con sus respectivas tapas. Así que el fabricante ha pensado en todo.
El otro compañero de la barra de sonido principal es el subwoofer inalámbrico. La JBL Bar 1300 viene con un subwoofer de gran tamaño para lo que suele ser habitual en este tipo de dispositivos. Tiene un diseño más alto que ancho, con esquinas redondeadas, y con un acabado en negro mate. Cuenta con unas dimensiones de 30.5 x 44 x 30.5 cm (An x Al x P), con un peso de 10 kg.
El subwoofer equipa un driver de 10 pulgadas y cuenta con una potencia de 300 W. Tiene salida Bass Reflex en la parte trasera, mientras que el altavoz está orientado hacia abajo. Para que no haya problemas de bola de graves o similares, el subwoofer cuenta con cuatro patas de gran tamaño que levantan el dispositivo unos centímetros del suelo. Necesita su cable de alimentación, pero se conecta de forma inalámbrica a la barra.
Más altavoces y más potencia
Echemos un vistazo rápido a las características más técnicas de la JBL Bar 1300. Lo primero de todo, el sistema de 7.1.4 canales de la JBL Bar 1000 se amplia para llegar hasta los 11.1.4 canales en la Bar 1300. También se amplia la potencia total del sistema, pasando de los 880 W de la Bar 1000 a los 1170 W de la Bar 1300. Estos se reparten entre los 650 W de la unidad principal, los 110 W de cada altavoz surround y los 300 W del subwoofer.
La unidad principal equipa 6 unidades de tipo racetrack de 46×90 mm, 3 altavoces de agudos de 20 mm y 4 drivers de rango completo de 70 mm para el sonido ascendente. Los altavoces traseros están equipados con un driver de 46×90 mm, altavoces de agudos de 20 mm, drivers de rango completo de 70 mm y 2 radiadores pasivos rectangulares redondeados de 48×69 mm. Todo el conjunto ofrece una respuesta en frecuencia de 33 Hz a 20 kH.
En cuanto a formatos, la JBL Bar 1300 es compatible con todos los formatos actuales de audio HD, incluyendo Dolby Atmos y DTS:X. Y no solo eso, también hace uso de las soluciones de mezcla ascendente como DTS Neural:X y Dolby Surround, algo muy común en los receptores AV pero muy poco habitual en las barras de sonido. Para los que no estéis familiarizados con ello, este tipo de tecnología permite aprovechar los altavoces de altura con todos los formatos de sonido.
Para controlar los ajustes y la configuración de la barra de sonido tenemos disponible la aplicación JBL One. En la pantalla principal de la aplicación veremos los dispositivos disponibles. Una vez dentro del dispositivo en cuestión, lo primero que veremos es en qué entrada se encuentra y un control de volumen. También tenemos acceso directo a la aplicación de música que hayamos configurado, una opción especial para transformar el móvil en un mando a distancia, un pequeño ecualizador e incluso el control de volumen individual de los altavoces traseros.
Otras opciones disponibles con la sincronización de sonido (por si notamos un desfase con algún contenido) o los propios ajustes del dispositivo, como pueden ser la conexión al WiFi, cambiar el nombre del producto o configurar los diferentes asistentes de voz. Y por supuesto no falta la opción para actualizar el firmware de la barra de sonido.
Pero quizás lo más interesante que nos ofrece la aplicación JBL One en la Bar 1300 es el sistema de calibración de sala. JBL ha incluido micrófonos en los altavoces surround para conseguir una verdadera triangulación del sonido en la calibración. El sistema es súper sencillo. Simplemente tendremos que poner los altavoces traseros en la posición central de escucha y luego colocarlos en sus respectivas posiciones más amplias, que presumiblemente serán las posiciones permanentes donde estará.
Tras unos minutos de sonido potente, ya estará listo. Lo único que no me ha gustado de este sistema es que, una vez realizada la calibración, no he localizado una manera rápida de activar o desactivar este ajuste para hacer pruebas y comprobar resultados con y sin calibración activada. Una vez hecha para quitarle tendremos que resetear el ecualizador para eliminarla.
JBL Bar 1300: Especificaciones técnicas
| JBL Bar 1300 | Características |
|---|---|
| Sistema de sonido | 11.1.4 canales |
| Salida de potencia total del sistema | 1170 W |
| Salida de potencia de la barra de sonido | 650 W |
| Salida de potencia de los altavoces traseros | 2×110 W |
| Salida de potencia del subwoofer | 300 W |
| Drivers de la barra de sonido | 6 unidades de tipo racetrack (46×90 mm) + 3 altavoces de agudos de 0.75 pulgadas (20 mm) + 4 unidades de rango completo con salida superior de 2.75 pulgadas (70 mm) |
| Drivers de los altavoces envolventes | Unidad de tipo racetrack (46×90 mm) + altavoz de agudos de 0.75 pulgadas (20 mm) + una unidad de salida superior de 2.75 pulgadas (70 mm) + 2 radiadores pasivos rectangulares redondeados de 48×69 mm |
| Driver del subwoofer | 10 pulgadas |
| Conectividad | 3 x entrada HDMI 1 x salida HDMI eARC 1 x entrada óptica 1 x entrada USB |
| Conectividad inalámbrica | WiFi 802.11ax, Bluetooth 5.0 |
| Medidas | 1000 x 60 x 139 mm (barra de sonido sin altavoces desmontables) 1376 x 60 x 139 mm (barra de sonido con altavoces desmontables acoplados) 202 x 60 x 139 mm (cada uno de los altavoces desmontables) 305 x 440,4 x 305 mm (subwoofer) |
| Control | Mando a distancia y app JBL One |
| Disponibilidad | Disponible |
| Precio | 1.499 euros |
Calidad de sonido
Tengo la costumbre de empezar las pruebas de las barras de sonido o equipos Dolby Atmos con la demo Amaze en Dolby Atmos. Me gusta mucho esta demo y como la uso siempre me da una idea inicial de qué rendimiento puedo esperar del sistema que voy a probar. Y la primera impresión de la JBL Bar 1300 no pudo ser mejor. Los sonidos de la jungla sonaban por toda la sala, el subwoofer consiguió hacer vibrar el sillón en el trueno y el efecto de la lluvia cayendo sobre mi cabeza estaba muy bien conseguido. Empezábamos bien.
Pasando al cine y las series, la Bar 1300 demostró una vez más que estamos ante un sistema de gama alta. Los altavoces traseros ofrecen un gran sonido envolvente, mientras que el efecto Atmos se nota que ha mejorado respecto a la Bar 1000 que probé hace algunos meses. Volviendo a los altavoces traseros, quizás el único pero que se les puede poner es que a la hora de escuchar la televisión en estéreo, con por ejemplo las noticas o algún otro programa de la TDT, la barra hace un «upscaling» y lanza sonido por todos los altavoces.
Esto, que está genial para las pistas 5.1 por ejemplo, no me ha acabado de convencer en programas estéreo. Por ejemplo, viendo el telediario escuchaba las voces de los presentadores por los altavoces traseros, lo cual daba una sensación bastante extraña. En la aplicación no tenemos ningún «botón» que apague este procesado, así que la única forma de evitarlo es, o apagar los altavoces traseros, o bajarles el volumen al máximo o colocarlos en la parte frontal conectados a la barra.
Sin embargo, este efecto sí me gustó al reproducir música en estéreo. Era muy interesante estar sentado en el sillón y escuchar que la música sonaba por toda la sala, como envolviéndote, a pesar de saber que el efecto no era real. Además la Bar 1300 ofrece una gran calidad de sonido en música, tanto desde la unidad principal como desde los altavoces traseros. Es algo poco habitual en este tipo de dispositivos y la verdad es que se agradece.
Algo que también me ha gustado mucho es que JBL permite cambiar el volumen de los diferentes altavoces. Bueno, no es exactamente un control de volumen, es más bien un ajuste de nivel. Por ejemplo, el subwoofer tiene 5 niveles de volumen, mientras que los altavoces envolventes y los canales Atmos cuentan con tres niveles distintos. Hubiera preferido controles deslizantes de volumen independientes para cada uno de ellos, además de un control de volumen maestro, pero bueno, algo es algo.
Ajustando bien los niveles de cada altavoz, la JBL Bar 1300 ofrece una gran cantidad de potencia, un sonido sólido y ajustado, y un nivel de inmersión muy potente y realista. Puede que tengamos que ir haciendo pequeños ajustes según el contenido que veamos, ya que, como sabéis, no todas las bandas sonoras están montadas de igual forma, pero al menos tenemos la opción de poder hacerlo.
Por último, aunque ya lo he nombrado antes, me ha sorprendido el rendimiento de los altavoces surround como altavoces Bluetooth independientes. Suenan sólidos y agradables, con muy buena potencia, lo cual los hace ideales para ser utilizados en salas más pequeñas. Además podemos combinar los dos y crear un verdadero sistema estéreo que, además, mejora mucho a la reproducción con un solo altavoz. Una gran idea de JBL, sin duda.
Conclusiones y precio
La JBL Bar 1300 es una magnífica barra de sonido. Incluso si no tuviéramos los altavoces traseros con batería, que fuera con cable, sería una barra de sonido que compite de tú a tú con los modelos de Samsung y LG, gracias a su magnífica calidad de sonido. Es potente, sin dejar de ser musical, y ofrece un verdadero sonido envolvente y un efecto de altura muy conseguido al contar con altavoces de disparo ascendente tanto en el unidad principal como en los altavoces traseros.
Lo de los altavoces desmontables, como decía al principio, tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Si tenemos un espacio reducido o en el que no podemos, por el motivo que sea, dejar unos altavoces traseros fijos, pueden ser una gran opción. Podemos dejarlos conectados a la barra y cuando vayamos a ver una película o serie los colocamos en la parte trasera del sofá. Nos llevará un par de minutos y tendremos un sonido surround completo. Pero si tienes espacio y puedes dejarlos fijos, pierden un poco su «ventaja» respecto a otros modelos.
Con todo lo comentado, la JBL Bar 1300 me ha gustado mucho y creo que es una barra de sonido muy a tener en cuenta si buscas un modelo de gama alta. Eso sí, su precio es elevado. La JBL Bar 1300 tiene un precio oficial de 1.499,99 euros, lo cual es bastante alto.
