Sony es uno de los fabricantes más importantes cuando hablamos de auriculares con cancelación de ruido. El fabricante japonés lleva varias años ofreciéndonos algunos de los mejores auriculares que podemos encontrar en el mercado, tanto en formato de diadema como los llamados True Wireless. Entre ellos destacan los Sony WH-1000XM3 y los Sony WF-1000XM3, dos de los modelos de más éxito del fabricante. Los primeros, el modelo de diadema, ya fueron renovados, llegando al mercado los Sony WH-1000XM4. Y ahora le ha tocado el turno al modelo True Wireless, que ha sido renovado con la llegada de los Sony WF-1000XM4.
Con el modelo lanzado en 2019 Sony puso el listón muy alto. Sin embargo, todo producto puede ser mejorado. Este año, Sony ha escuchado el feedback de los usuarios y ha solucionado los defectos que tenía el modelo anterior. Así que los Sony WF-1000XM4 llegan con nuevo diseño, tanto para los auriculares como para el estuche, uno de los mejores sistemas de cancelación de ruido, un sonido tremendo y sí, un precio algo más elevado.
Hemos tenido ocasión de probar los Sony WF-1000XM4 durante 15 días aproximadamente y en este artículo os contamos cómo funcionan y qué nos han parecido los que probablemente se conviertan en el nuevo rey de los auriculares True Wireless.
Diseño: reducen su tamaño y ganan comodidad
Cuando probamos el Sony WH-1000XM4 nos fue muy difícil diferenciarlo a nivel estético de su predecesor, el Sony WH-1000XM3. Sony optó por mantener un diseño que funcionaba y los cambios eran prácticamente inapreciables.
Sin embargo, con los nuevos Sony WF-1000XM4 ha pasado todo lo contrario. Algunas de las mayores críticas que se le hicieron a los Sony WF-1000XM3 estaban relacionadas con su diseño. Especialmente con el tamaño, tanto de los auriculares como del estuche de carga. Así que los ingenieros de Sony volvieron a la mesa de dibujo para buscar un diseño más cómodo para el usuario. Y lo han conseguido.
No nos engañemos, los Sony WF-1000XM4 siguen siendo grandes, pero no tanto como antes. Según Sony, el nuevo modelo ocupa un 10% menos de volumen. Además, también ha cambiado el propio diseño del auricular, siendo ahora más redondeado y asentándose mejor dentro del oído.
Los auriculares están hechos de plástico, pero de un plástico de muy alta calidad. Se nota enseguida que estamos ante unos auriculares de gama alta. Nuestro modelo de pruebas tenía un bonito acabado en color negro, con detalles en color cobre muy elegantes. También están disponibles en lo que Sony llama color plata, que viene a ser un blanco marfil.
En la parte exterior de cada uno de los auriculares tenemos un sensor táctil que nos permite realizar varias funciones. Con el que tenemos en la unidad izquierda podemos activar y desactivar la cancelación de ruido y controlar las llamadas. Por su parte, con el auricular derecho podremos reproducir/pausar la música, pasar a la canción siguiente o anterior e iniciar el asistente de voz.
Por otro lado, los auriculares también cuentan con un sensor de posición, pines de carga y tres micrófonos. Y también con otra de las novedades a nivel de diseño, las almohadillas o fundas que van al oído. Este año Sony ha decidido utilizar un material muy poco habitual para las almohadillas de un auricular: el poliuretano.
¿Por qué usar este material? Según el fabricante, para mejorar la comodidad. Y lo cierto es que no les falta razón. Los Sony WF-1000XM4 llegan con tres tamaños de almohadilla: S, M y L. Lo ideal es que, tengamos el tamaño que tengamos de cuerpo, las probemos todas, así sabremos seguro cuál es la que mejor se adapta a nuestro oído. ¿No lo tienes claro? No hay problema, la aplicación Headphones Connect de Sony te ayudará a averiguarlo.
Para hacerlo tendremos que ir al tutorial que aparece al instalar los auriculares por primera vez. Si os lo habéis saltado, no hay problema, podéis encontrar esta función en la parte de ajustes de la aplicación. El asistente que aparece nos instará a colocarnos correctamente los auriculares y después nos dará una opción llamada «Determina las almohadillas óptimas».
¿Cómo sabe la aplicación que las almohadillas que nos hemos puesto son óptimas? Pues lo que hace es medir la hermeticidad de las almohadillas mediante la emisión de un sonido. Para hacerlo solo tenemos que pulsar en «Probar las condiciones de uso» y esperar. Una vez realizada la prueba la propia aplicación nos dirá si las almohadillas que hemos elegido son las correctas.
Yo he probado tanto la talla M como la L y ambas han entrado perfectamente. Una buena forma de colocarse bien los auriculares es «aplastar» un poco las almohadillas con los dedos y aprovechar que han reducido su tamaño para introducirlas en los oídos. Una vez dentro, esperaremos unos 20 segundos para que la espuma se expanda y entonces hacemos un poco de presión contra el oído para encajarla perfectamente.
Si las hemos encajado bien notaremos que las almohadillas son muy cómodas, no se caen aunque hagamos movimientos bruscos y sellan muy bien. Y esto es importante, ya que los Sony WF-1000XM4 cuentan con certificación IPX4, es decir, son resistentes al sudor, así que podremos utilizarlos para hacer ejercicio.
Y si los auriculares han mejorado mucho su diseño, también lo ha hecho el estuche de carga. Este se ha reducido respecto al modelo anterior nada menos que un 40%. Y es que el estuche de carga de los Sony WF-1000XM3 era excesivamente grande.
A pesar de la reducción de tamaño, no vamos a perder autonomía. Pero de esto hablaremos dentro de un rato. Volviendo al estuche, este es mucho más ligero que el del modelo anterior, aunque sigue siendo más pasado que el de, por ejemplo, los AirPods Pro.
El estuche también está hecho de plástico, pero nuevamente es un plástico de mucha calidad. La tapa tiene un cierre magnético que evita aperturas indeseadas. Y el imán que tenemos dentro para los auriculares es realmente potente, tanto que a veces cuesta un poco sacar los auriculares del estuche.
Para acabar con el diseño del estuche, comentar que cuenta con una luz en la parte frontal que nos indica el nivel de carga. El estuche se carga mediante un conector USB-C y cuenta con carga rápida y carga inalámbrica.
En definitiva, podemos decir que Sony ha acertado completamente con el rediseño de sus famosos auriculares True Wireless. Los Sony WF-1000XM4 son más compactos, más cómodos y más discretos que son predecesores. Y todo ello sin perder prestaciones, como ahora veremos.
Características: cargados de funciones de todo tipo
Antes de hablar sobre la calidad de audio y la cancelación de ruido, vamos a echar un vistazo a las características más importantes de los Sony WF-1000XM4. La verdad es que estos auriculares cuentan con tantas funciones distintas que pueden llegar a abrumar al principio.
Lo primero que debemos saber es que los Sony WF-1000XM4 se pueden usar tanto con iOS como con Android. Son compatibles con Google Fast Pair y también con los tres asistentes de voz principales del mercado (Google, Siri y Alexa). Se conectan al móvil (o cualquier otro dispositivo) mediante Bluetooth 5.2, así que antes del primer uso tendremos que emparejarlos con nuestro dispositivo. Teóricamente cuando los sacas de la caja se quedan preparados para el emparejamiento, pero en mi caso tuve que forzarlo. ¿Cómo lo hice? Simplemente te pones los dos auriculares y aprietas las dos zonas táctiles de forma simultánea durante unos 6-7 segundos. Con este movimiento los auriculares se ponen en modo emparejamiento y ya aparecen en el menú Bluetooth del móvil.
Una vez conectados, o antes incluso, os recomendamos descargar la aplicación Headphones Connect de Sony. Mediante esta aplicación podréis tener el control total de los auriculares, pudiendo desde ver la carga de los auriculares y el estuche hasta cambiar el tipo de sonido, pasando por actualizar el firmware de los auriculares.
Como hemos comentado antes, los auriculares vienen con unos gestos por defecto. Sin embargo, la aplicación nos permite modificarlos. O al menos parcialmente, ya que podremos cambiar el tipo de control pero no la acción que hace cada gesto. Es decir, por ejemplo, podemos decirle que en el auricular derecho, en lugar de tener los controles de reproducción tengamos los de control de volumen. Con esto haríamos que dando un toque en el auricular derecho se aumentara el volumen, en lugar de pausar la reproducción.
Otra opción que tenemos en la aplicación es el «Control de sonido adaptativo». Esta función detecta qué estamos haciendo en cada momento (andar, correr, estar quieto o ir en transporte público) y adapta tanto el sonido como la cancelación de ruido a esta situación. Por ejemplo, si vamos andando, la cancelación de ruido se hace mucho más permisiva para que podamos escuchar los coches que pasan cerca.
Además, si activamos esta función, la aplicación es capaz de aprender a reconocer los lugares que más visitamos y guardar la configuración perfecta para cada uno de ellos. Así pues, sabrá cuando estamos en la oficina, en casa o en el gimnasio, adaptando la configuración del auricular en consecuencia.
Los cuatro modos que incluye el sistema son configurables, pero a mí personalmente es una función que no me ha gustado demasiado. Yo prefiero activar y desactivar la cancelación de audio de forma manual, ya que con el sistema automático he tenido la sensación de no saber cuándo estaba cancelando, cuando no o a qué nivel.
Otra de las funciones que encontramos dentro de la aplicación es «Reducción auto. de viento». Esta función, como su propio nombre indica, detecta cuando el viento es más fuerte y hace todo lo posible por cancelarlo. Eso sí, en la misma función se avisa de que si la llevamos activada los auriculares consumirán más batería de lo habitual.
Y también dentro de las opciones de la aplicación nos encontramos con la opción Speak to Chat, que ha sido traducida en la app como «Hablar por chat». Con esta función activada los auriculares detectan cuando empezamos a hablar y pausan automáticamente la música para que podamos mantener una conversación. Una vez vuelven a detectar que no estamos hablando, reanudan la música de forma automática.
Lo cierto es que funciona increíblemente bien, quizás demasiado. Y es que los micrófonos tienen una sensibilidad bastante alta, así que con solo tararear una canción la música se parará. Por suerte, podemos configurar a nuestro gusto la sensibilidad de esta función e incluso el tiempo que tarda en volver a activar la música.
Nos falta hablaros de otras dos funciones (ya os avisamos de que eran muchas). La primera es la parte de Ecualizador que nos ofrece la aplicación. Tenemos varios modos de ecualización predefinidos, pero también podemos configurar nuestros propios ajustes, ya que cuenta con dos memorias para ello. Todo un acierto por parte de Sony.
Por último, tenemos la función 360 Reality Audio. Esta ofrece la posibilidad de reproducir audio espacial en los auriculares, aunque para ello vamos a necesitar una aplicación compatible (como por ejemplo Tidal). Además, para conseguir un mejor resultado, la aplicación necesita hacer un análisis de nuestras orejas, lo cual le permitirá posicionar mejor el sonido.
Calidad de sonido: sensacional
Luego os hablaremos del precio, pero seguro que ya estáis imaginando que no son unos auriculares precisamente económicos. El diseño es muy bueno y las funciones son muy amplias, pero es cuando te los pones y empiezas a escuchar la música con ellos cuando empiezas a entender porque tienen ese precio.
Los Sony WF-1000XM4 están equipados con una unidad de diafragma de 6 mm, con un aumento del 20% en el volumen del imán. Esto, combinado con el nuevo procesador V1 integrado, se traduce en un sonido más rico que el que ofrecía el modelo anterior, que ya era realmente bueno.
Para poder disfrutar al máximo de la alta calidad de sonido que tienen los auriculares, los Sony WF-1000XM4 cuentan con soporte para LDAC, aunque no son compatibles con aptX HD. Aún así, el formato de Sony nos ofrece hasta 24 bits/96kHz a velocidades de hasta 990 kbps, siempre y cuando tengamos una fuente y un servicio compatibles. Yo he probado a cambiar la forma de transmisión de mi móvil a LDAC y he utilizado Tidal en su versión Master para transmitir algunas pistas y el sonido es realmente alucinante.
Si tengo que ponerle un «pero» es que esperaba algo más de volumen máximo. Si estás en casa es suficiente, pero cuando los he utilizado por la calle he echado en falta algo más de potencia. ¿Me estaré quedando sordo? Quién sabe.
Y hablando de calidad de audio, los Sony WF-1000XM4 también están equipados con DSEE Extreme, un sistema que, utilizando la inteligencia artificial, mejora los archivos digitales de música comprimida en tiempo real para reproducirlos como si fueran archivos de alta resolución. Según Sony, esta tecnología es capaz de reconocer dinámicamente los instrumentos, los géneros y elementos individuales de cada canción como voces o interludios, restaurar frecuencias perdidas en la compresión y crear una experiencia de escucha más completa.
Personalmente debo decir que he notado alguna mejoría en canciones que estaban en muy mala calidad, pero tampoco ha sido un cambio drástico. En cualquier caso, los Sony WF-1000XM4 ofrecen una calidad de audio sublime. La música suena rica y audaz, el bajo está siempre presente sin volverse dominante y el rango medio es muy detallado en todo momento.
Cancelación de ruido: el rey sigue siendo el rey
Sin duda el mejor acompañante de la magnífica calidad de sonido que ofrecen los Sony WF-1000XM4 es su sistema de cancelación de ruido. Sony lleva varios años siendo el rey en este sector y sus nuevos modelos son todavía mejores.
Los responsables de esta mejoría son dos. Por un lado las nuevas almohadillas, que hacen un excelente trabajo de cancelación de ruido pasiva. Solo con ponernos los auriculares ya notaremos que parte del ruido ha desaparecido. Por otro lado, el nuevo chip V1, que ha mejorado al chip QN1e del modelo anterior.
Tan pronto como activas la cancelación de ruido, los sonidos del mundo que te rodean desaparecen. Los ruidos de motores, los ventiladores, las sirenas, los gritos, el traqueteo de un teclado e incluso tu propio chasquido de dedos, todo desaparece. Si nunca has utilizado unos auriculares con cancelación de ruido seguramente te encuentres hasta extraño, pero con el tiempo te darás cuenta de que no has podido vivir sin ellos. Bueno, quizás sea una exageración, ya que no ha todo el mundo le gusta esa sensación de «vacío» que crean este tipo de auriculares. Pero si buscas aislarte del mundo, pocos modelos (muy pocos) lo harán mejor que estos.
Autonomía: mejorando lo presente
Los Sony WF-1000XM4 son bastante más pequeños que sus predecesores, lo cual no suele ser una buena señal para la autonomía. Sin embargo, no sabemos cómo lo ha hecho, pero Sony ha conseguido reducir el tamaño de los auriculares y el estuche mejorando la autonomía de los mismos.
Sony declara una autonomía para los WF-1000XM4 de 8 horas en los auriculares y otras 16 horas en el estuche. Tendríamos así una autonomía total de 24 horas. Pues bien, estos datos se acercan mucho a la realidad. Según nuestras pruebas, es fácil superar las 7 horas de autonomía en los auriculares con el sistema de cancelación de ruido siempre activado. Y en cuanto al estuche, no hemos podido comprobar exactamente las horas disponibles, pero estamos seguros de que se acercan mucho a lo que dice el fabricante.
Y hablando del estuche, vale la pena señalar que cuenta con función de carga rápida. Esta nos permitirá conseguir hasta una hora de autonomía con solo cinco minutos de carga. Por otro lado, está equipado con carga inalámbrica, compatible con cualquier base Qi.
Sony WF-1000XM4: conclusiones
Los Sony WF-1000XM4 son, seguramente, los mejores auriculares True Wireless con cancelación activa de ruido que puedes encontrar ahora mismo en el mercado. Tienen mucha competencia, como los famosos AirPods Pro u otras propuesta de fabricantes como Bose, pero el modelo de Sony los supera a todos. Quizás no en todos los apartados, pero sí en su conjunto.
Estamos ante unos auriculares grandes, pero con un diseño realmente atractivo. Tienen una cantidad de funciones tremenda, un sonido espectacular y posiblemente la mejor cancelación de ruido del mercado.
¿Puntos negativos? Lo cierto es que no muchos. Siguen sin ser los más cómodos que he probado, esperaba algo más de potencia máxima y son caros. Y es que los Sony WF-1000XM4 ya están a la venta en España con un precio oficial de 280 euros. Es un precio alto, pero si buscas lo mejor y puedes pagarlo no te arrepentirás.