Durante la pasada edición del Consumer Electronic Show, LG aprovechó el marco perfecto que ofrece esta feria de tecnología para mostrar su próxima generación de televisores de cara a 2022. Y el LG OLED G2 es su principal caballo de batalla.
En la presentación de sus nuevas apuestas, el fabricante nos sorprendió al mostrar un modelo de 92 pulgadas, además de la nueva tecnología OLED-EX que incorporarán sus televisores más adelante. Aunque de momento, la nueva generación de Smart TV OLED premium del fabricante coreano, los LG G2 y C2, se quedan con un panel EVO como la LG G1.
Aunque hay una gran diferencia entre la LG G2 y la LG C2 más allá de su diseño: Brightness Booster, la tecnología que implementa el modelo más vitaminado y que ayudará a ofrecer un nivel de nits superior, además de una protección contra posibles quemados.
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Cómo funciona la tecnología Brightness Booster del televisor LG OLED G2
Para empezar, decir que Brightness Booster es sencillamente un disipador de calor situado en la parte trasera del televisor y que ayuda a enfriar el sistema para ofrecer un mejor rendimiento.
No es la primera vez que vemos una tecnología de estas características. Por ejemplo, Panasonic la implementó en la familia de televisores OLED HZ2000 y HZ2000 de 2021 y 2020 respectivamente. Otro modelo que apuesta por usar un disipador de calor es la Sony OLED A90J. Y ahora le toca el turno a LG.
Según LG, gracias a su tecnología Brightness Booster el televisor LG OLED G2 ofrecerá picos de luz un 20% superiores que los conseguidos por las LG C2 con paneles Evo. Por si no lo sabías, el calor es el peor enemigo del OLED ya que acelera la degradación del panel.
Con un sistema de disipación más eficiente, el brillo se puede usar de forma más segura y en niveles más altos sin peligro de que los píxeles se desgasten. Para que te hagas a la idea, las primeras pruebas apuntan a picos de 900-1000 nits, cuando la C2 no superaría los 800 nits.
En el caso de Panasonic y Sony nos encontramos con una plancha de cobre situada entre el panel y la electrónica trasera, haciendo que el calor que generan los píxeles del OLED se disipan antes. Al pasar más corriente sin que el sistema se dañe, se consigue un nivel de brillo superior.
Curiosamente, si tocamos una pantalla con disipador, notaremos que el panel está más frío dejando claro que la TV puede expulsar el calor sin problema. Una especie de “heatpipe” gigante que retiene el calor y poco a poco lo expulsa por la parte trasera.
Pero hay otra ventaja que marca la diferencia: las retenciones y quemados no harán acto de presencia gracias a la rápida disipación del calor. Por último, los subpíxeles se ven sometidos a una menor corriente eléctrica, por lo que la vida útil aumenta de forma considerable, haciendo que la vida útil de tu televisor se alargue.
De esta manera, aunque LG no ha detallado como funcionará este sistema, podemos esperar un mecanismo muy semejante al de sus rivales japoneses, lo que garantiza que la LG G2 OLED será un modelo potente, con un gran nivel de brillo y muy resistente a las retenciones y quemados.