La tecnología de microlentes en televisores OLED ha supuesto un antes y un después con la llegada de los paneles META de LG en su gama G3. Con ello ha conseguido un incremento de brillo enorme, con una subida de más de casi un 50% extra en términos absolutos de brillo, una auténtica revolución. Y no solo tienen ventaja en ese campo, si no que tiene múltiples beneficios como explicamos en este portal.
Algunos usuarios me han preguntado en los últimos meses que si el próximo movimiento de Samsung Displays podría ser añadir precisamente dicha tecnología de microlentes -también conocida como MLA- a sus paneles QD-OLED de 2024 (aunque sus modelos de 2023 ronden un brillo similar al de la LG OLED G3). Y es algo realmente complicado si entendemos las diferencias entre las WOLED y las QD-OLED.
Por qué es improbable que veamos el brillo de la tecnología META de LG en televisores QD-OLED de 2024
Para entender este «no» que os acabo de decir hay que explicar primero, de forma resumida, las diferencias estructurales entre los paneles WOLED (los fabricados por LG Displays) y los QD-OLED (fabricados por Samsung Displays). La diferencia más importante como hemos explicado muchas veces radica en que la primera tecnología utiliza un subpíxel blanco para emitir el brillo y éste pasa por un filtro rojo, verde y azul para generar el color.
En el caso de las QD-OLED, se usa un subpíxel azul para emitir luz que, tras incidir en los Quantum Dot, se genera el rojo y el verde -el azul se mantiene desde el emisor, al ser ya de este color- para generar así el color RGB (primarios), sin necesidad de ningún subpíxel blanco, manteniendo así un volumen de color mucho mayor al no diluirse el color con el brillo aportado por el subpíxel blanco.
Para evitar este problema y otros como un menor brillo, LG decidió este año utilizar los llamados MLA, una capa de miles de millones de lentes microscópicas que se superpone entre los subpíxeles blancos que os comentábamos antes y el cristal final del televisor, digámosle su capa más externa, lo que vemos cuando nos sentamos delante. De esa forma se consigue que la luz emitida desde atrás por dichos subpíxeles, tras cientos de rebotes en las microlentes, no se pierda por el camino y llegue hasta el final, aumentando así el brillo.
Las QD-OLED no contarán con microlentes y este es el principal motivo: no ganarían nada
Hasta aquí es más o menos lo que todos habíamos leído ya en AVPasión más de una vez. Y ahora la pregunta del millón: ¿si las QD-OLED actuales emiten un brillo similar –o incluso más– a la mejor WOLED con microlentes…por qué Samsung no añade una capa de microlentes para aumentar más el brillo? porque, básicamente, no se puede. O mejor dicho: si se puede pero no se ganaría nada con ello.
Y es que las LG OLED (WOLED) son lo que se denominan botom emission, es decir, la luz se emite por los subpíxeles (blancos) desde atrás hasta adelante -pasando por dicha capa de microlentes-, mientras que las QD-OLED son top emission, es decir, la emisión de la luz mediante los subpíxeles (azules) NO se hace desde la parte de atrás, si no que se hace ya en la capa más externa del televisor donde están los Quantum Dots -por eso, entre otras ventajas, tienen tan buena unifomidad comparada con las LG OLED-.
Lógicamente, si añadimos una capa de microlentes bajo la matriz QD-OLED de los subpíxeles donde ya han generado el brillo (no se puede poner encima al no tener ya espacio), no ganaremos nada. Vendría a ser algo así como poner un film transparente sobre el televisor: ninguna ganancia. En el caso de LG sería algo similar a poner una lupa gigante encima de un televisor tapado con un paño: tendríamos un aumento de brillo. Por ello, la forma para aumentar aún más la luz en los televisores QD-OLED tendrá que venir por otro lado.