Los móviles plegables son uno de los grandes avances en el segmento de los teléfonos en los últimos tiempos. Pero, antes de lanzarte a por uno, conviene que estés al tanto de sus pros y contras, pues no son perfectos. En este artículo, te explicamos las principales inquietudes que suelen surgir y también compartimos algunos de sus beneficios inesperados.
Las pantallas plegables son más frágiles
Las pantallas plegables, aparte de mostrar una línea en el pliegue que para muchos es molesta, también son más propensas a los arañazos y las grietas. Introducir más partes móviles implica un diseño más delicado, y la protección no es comparable al cristal Gorilla Glass más reciente. Un roce con la llave puede dejar huella en un plegable mucho antes que en un móvil convencional.
Además, por muy cuidadoso que se sea, algunos plegables sufren daños por pequeñas partículas como arena que se quedan atrapadas al cerrar la pantalla. Aunque las nuevas generaciones son más resistentes, no son invencibles. Especialmente en el mercado de segunda mano, hay que extremar la precaución. Por lo tanto, es importante tener claro esto antes de hacerse con un teléfono de pantalla plegable.
Por ahora, son teléfonos más gruesos
Un plegable -especialmente los de tipo libro- es más voluminoso de lo que acostumbras a llevar en el bolsillo. Puede parecer que llevas dos móviles a la vez, y no vas muy desencaminado. Un dispositivo que se transforma en tableta necesita espacio para albergar esa pantalla grande.
Los fabricantes se esfuerzan por hacer plegables más delgados, tanto reduciendo el hardware como la separación de las pantallas cerradas. Pero si priorizas este apartado del diseño, dos pantallas siempre serán más gruesas que una. Aunque cada vez se logran mejores resultados de diseño, todavía no se ha llegado a la perfección que muchos demandan.
Las cámaras no son de las mejores del mercado
Por el precio que pagas, es lógico pensar que un plegable es el buque insignia de una marca, y por este motivo ofrece las mejores prestaciones. Pero no siempre es así. Si bien los terminales de este tipo no han sacrificado mucho en cuanto a procesadores o RAM, casi todos tienen cámaras peores que sus equivalentes convencionales.
Los fabricantes tienen poco espacio para maniobrar en los móviles normales, y cuando hay que añadir bisagras, la cosa se complica. Además, hay que considerar cuánto volumen se está dispuesto a añadir a un dispositivo ya de por sí voluminoso. Por ejemplo, el Pixel Fold tiene una cámara principal de 48MP, un teleobjetivo de 10,8MP y un gran angular de 10.8MP. En cambio, el Pixel 8 Pro tiene una cámara principal de 50MP, un teleobjetivo de 48MP y un gran angular de 48MP. Todo queda bastante claro.
Sí, sustituyen a un tablet… pero con límites
No todo son inconvenientes. La pantalla interior de un plegable tipo libro no es mucho más pequeña que la de una tableta. Sí, esa pulgada extra mejora la experiencia, pero la pantalla del plegable sigue siendo mucho más grande que la de tu móvil convencional. Y, esto, da más espacio para mostrar fotos o ver películas en grupo. Un plegable es mucho más portátil que una tableta y esto puede llegar a ser un factor definitivo de compra.
Software, no todo está adaptado a los plegables
Los plegables tipo libro sufren de un problema que afecta desde hace tiempo a las tabletas y a los dispositivos Android que no utilizan una pantalla estándar del tamaño de un móvil. Nos referimos a la falta de adaptación de las aplicaciones. Aunque la mayoría de las apps de Google se ajustan bien a una pantalla más grande, algunas simplemente no lo hacen. Esto incluye opciones muy populares, como las redes sociales oficiales y las de streaming de vídeo. Puedes usarlas simultáneamente en un móvil desplegado, pero espera ver franjas negras verticales al lanzar una sola aplicación en una pantalla más grande.
Por cierto, los plegables tipo libro también han experimentado diversas formas de aprovechar su espacio adicional. La mayoría introduce docks. Algunos tienen ventanas flotantes. En general, son buenas opciones añadidas, pero con sus manías.
En resumen, los móviles plegables son una apuesta tecnológica innovadora, pero no exenta de pros y contras. Antes de lanzarte a por uno, te recomendamos que analices tus necesidades y prioridades, teniendo en cuenta tanto las limitaciones actuales como el potencial de futuras mejoras.