Actualmente, es posible duplicar la pantalla del móvil en el televisor. Esto se debe a que los smartphones se han convertido en dispositivos multifuncionales que brindan una amplia gama de posibilidades de entretenimiento y productividad. Si no tienes conexión WiFi por cualquier motivo, es posible conseguir esto sin muchos problemas y te vamos a mostrar cómo.
La opción habitual hoy en día es la de conseguir esto mediante opciones inalámbricas, como la tecnología Cast (que es la propia que existen en los Chromecast e, incluso, existen otros desarrollos como Miracast posibilitan enviar imagen y sonido sin cables hasta la tele). Pero, en ocasiones, no se tiene esta opción disponible -o simplemente no funciona bien- por lo que hay que recurrir a la conectividad física.
USB tipo C, la clave para duplicar la pantalla del móvil en la TV
La llegada de esta interfaz de conexión ha supuesto una mejora muy sustancial respecto a las opciones que existían hasta la fecha a la hora de utilizar cables para conseguir lo que estamos diciendo. Los motivos para ello son varios, pero dos son los más importantes: el primero es que la tasa de envío de información es muy alta, lo que posibilita utilizar resoluciones altas y ofrecer compatibilidad con algo que es crucial: HDMI.
La otra buena noticia de la llegada de USB tipo C es que es muy sencilla de utilizar, ya que es un puerto que no da problemas y es capaz de ser utilizado para una gran cantidad de tareas a la vez (por ejemplo, cargar el teléfono a la vez que se saca imagen y, todo ello, con una efectividad fantástica). Por suerte, la práctica totalidad de los fabricantes de smartphones le dan uso… incluyendo Apple -en este caso de forma obligada por la UE, pero que seguro que aprovecha las bondades de esta conexión en sus futuros iPhone como ya ha hecho con los portátiles o iPad, por poner un ejemplo-.
La forma más sencilla y efectiva de realizar el envío
La forma más recomendable de conectar tu móvil a la tele es utilizando un cable USB tipo C a HDMI (o, en su defecto, un hub que ofrezca esta combinación). Todos los televisores actuales cuentan con puertos HDMI, lo que te permite transmitir contenido desde tu teléfono directamente a la pantalla grande. Solo necesitas el adaptador adecuado para tu dispositivo y, una vez conectado, podrás ver tus fotos o vídeos o jugar de forma automática.
Por cierto, si el cable ofrece un mínimo de calidad, te permitirá cargar la batería del terminal a la vez que lo utilizas para enviar contenidos. Y, esto es muy importante, se evitan los saltos que ocurren al dar uso a tecnología inalámbrica debido a problemas de estabilidad o a una latencia muy alta -y que impiden una comunicación adecuada-. Es decir, que se obtiene generalmente una calidad mejor con el cable que sin él… pero, claro, la atadura que esto conlleva es un lastre para algunos.
Te dejamos un par de opciones de compra para poder completar el proceso (un cable y un hub):
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Así conectas por cable el teléfono al televisor
En primer lugar, es importante verificar que tanto tu dispositivo móvil como tu televisor ofrecen la compatibilidad necesaria (USB tipo C el primero y HDMI el segundo). La mayoría de los teléfonos inteligentes modernos vienen equipados con un puerto HDMI, que puede ser microUSB, USB Tipo C o microHDMI, mientras que la mayoría de los televisores actuales tienen al menos un puerto HDMI. Hecho esto, asegúrate de tener un cable HDMI adecuado para conectar ambos dispositivos.
Una vez que tienes el cable correcto, el proceso de conexión es muy sencillo. Enchufa un extremo del cable USB al puerto correspondiente en tu teléfono móvil (es el propio de carga) y, el otro extremo, al puerto HDMI del televisor. Asegúrate de que los enchufes estén firmemente conectados para garantizar una transmisión estable de la señal. Utiliza ahora el mando a distancia del televisor y selecciona la fuente de entrada correcta. Esto puede variar según el modelo de tu televisor.
Una vez seleccionada la fuente HDMI, dirígete a los ajustes de tu dispositivo móvil. Dependiendo del sistema operativo, es posible que encuentres la opción «Mirroring» o «Screen Mirroring» en el menú de configuración. Selecciona esta opción para activarla… y así de sencillo es todo.
Una opción adicional que debes no olvidar: MHL
Mobile High-Definition Link es una tecnología que surgió en 2010. Esta conexión permite una transferencia de vídeo de alta calidad, sin comprimir, con una resolución de 1080p, y un sonido envolvente de hasta 192 kHz y 7.1 canales. Pero su versatilidad va más allá, ya que la conexión MHL está disponible para todo tipo de equipos compatibles.
Es importante destacar que, si deseas aprovechar todas las ventajas de la conexión MHL, es necesario que tu televisor integre de serie la conectividad. Aunque cada vez más televisores están equipados con esta función, es recomendable verificar las especificaciones antes de realizar la conexión. Es una opción confiable y eficiente, pero algo anticuada, para conectar tu dispositivo móvil a una pantalla más grande (especialmente si tu terminal no cuenta con USB tipo C). Te dejamos un cable para comprar en el caso de que te interese esta posibilidad:
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