La historia del villano de Batman, Oz Cobb, mejor conocido como El Pingüino, ha llegado a su fin … por ahora. El Pingüino se enfrenta, como todos los proyectos que forman parte de un universo más grande, a las expectativas que lo rodean a medida que se acerca su final.
Rara vez una serie o película basada en personajes de cómic consigue alejarse del infame «fan service» y llevar su historia por un camino inesperado. En una serie que relata el ascenso al poder del personaje que le da nombre esto se hace todavía más difícil, ya que la audiencia tiene una idea, aunque sea general, de hacia dónde se dirige la narrativa.
El Pingüino episodio final: una profecía autocumplida (OJO Spoilers de la serie)
En su episodio final, aunque no hay ningún giro completamente inesperado, El Pingüino encuentra un pequeño espacio de maniobra, y consigue sacar lo máximo de cada momento que nos lleva a su inevitable final, antes de ceder al «fan service». Al fin y al cabo, la miniserie es una secuela directa de The Batman, y a su vez The Batman 2 será una continuación de la serie, por lo que la serie acaba con un par de migajas que la conectan con la saga.
El viaje de Oz, por su parte, es todo lo sorprendente que puede ser gracias a la valentía de los guionistas a la hora de diseñar a un villano con V mayúscula. El Pingüino no se va por la vía fácil, la del arco de redención, en la que entendemos que, a pesar de todo lo malo que ha hecho el personaje, en el fondo es bueno y no tiene malas intenciones. En absoluto. Oz Cobb es un hombre podrido hasta la médula, que destruye todo a su paso para conseguir lo que quiere. De alguna manera, El Pingüino funciona como un cuento gótico del Sueño Americano en su peor versión.
Cada decisión que Oz toma es siempre la opción más perversa y beneficiosa para sí mismo. Resulta que esta historia de origen del Pingüino de Gotham no es solo una narración de los sucesos que le llevan a su posición de poder, sino el retrato de un hombre convirtiéndose en una caricatura de sí mismo.
Pero es que la serie, no contenta con un solo villano multidimensional y matizado, tiene dos. Porque tan interesante como la historia de Oz, eternamente intentando hacerse respetar por los demás, es la de Sofia Gigante. Sofia, que acaba siendo la villana más compasiva de los dos, tiene su propio arco trágico. En este episodio final, vemos por fin la confrontación final entre los dos personajes, que acaba siendo todo lo que anticipábamos y algo completamente distinto a la vez.
La historia de Oz y Sofia tiene la esencia de una profecía autocumplida, en la que vemos a los personajes avanzando lentamente hacia el final que tienen escrito, sin poder hacer nada para desviarse de ese camino. Cuando El Pingüino inevitablemente aparezca en todas las listas de las mejores series de televisión de 2024, que nadie se equivoque, será en gran parte gracias al excelente trabajo de Colin Farrell y Cristin Milioti.
El Pingüino tampoco se olvida de sus personajes secundarios en este acto final. A lo largo de los ocho episodios, el elenco ha ido mutando alrededor de Oz y Sofia — el contexto violento de la serie ha supuesto la muerte de muchos personajes. Sin embargo, tanto Vic, el fiel ayudante de Oz, como Francis, su madre, han estado ahí desde el principio. Francis es como una nube que cubre la narrativa entera de Oz, y tiene un papel clave en el final; y Vic tiene un viaje emocional propio que también tiene la oportunidad de culminar a su manera en este episodio.
El futuro de ‘El Pingüino’: ¿dónde veremos a Oz?
Por el momento, no existe ninguna confirmación de que haya planes de hacer de El Pingüino más que una miniserie. Sin embargo, todo apunta a que el personaje y el pequeño cosmos que se ha creado a su alrededor serán una pieza clave de la ‘Batman Epic Crime Saga‘ de Matt Reeves, director de The Batman.
¡OJO, SPOILERS del final de El Pingüino!
Cuando parece que todo está llegando a su fin para Oz, El Pingüino consigue imponerse sobre su enemiga. Sofia, a quien ya solo le interesa matar a Oz y abandonar Gotham, ofrece todo su negocio a quien le traiga a Oz. Desgraciadamente, parece que el discurso populista de Oz en episodios anteriores ha calado, y la mano derecha de las triadas le tiende una trampa a su propio jefe y a Sofia.
Oz se lleva a Sofia a un descampado donde ella — y la audiencia — piensa que va a ser ejecutada, pero Oz hace algo mucho peor. La entrega a la policía, ofreciendo a Gotham un chivo expiatorio para la ola de crimen reciente y limpiándose las manos en el acto; y Sofia acaba de nuevo en Arkham. A pesar de lo trágico de la situación, podemos consolarnos en que este definitivamente no será el final de Sofia Gigante, que recibe en prisión una carta de nada más y nada menos que Selina Kyle (Catwoman), su medio-hermana. ¿Veremos a Sofia en The Batman 2?
Así pues, Oz ha conseguido eliminar a los Falcone y a los Maroni del campo de juego. El Pingüino, al que vemos al fin vestido elegantemente con su traje y sombrero de copa de los cómics, ha conseguido hacerse con el control de Gotham, y tiene también un pie metido en el gobierno corrupto de la ciudad. Para asegurarse de que no tiene ninguna debilidad que sus enemigos puedan explotar, asesina a sangre fría a Victor en la escena más desgarradora del episodio. Su posición no podría ser mejor, pero la victoria sabe a poco, ya que le falta lo que más quiere: la validación de su madre.
El destino de Francis es, quizás, el peor de todos. Un derrame la deja en estado vegetativo, pero Oz se niega a dejarla morir; le compra el piso de lujo con vistas de la ciudad que le había prometido y la deja conectada. Lo último que vemos es la Batseñal en el cielo de Gotham, el primer indicio de la presencia del caballero oscuro en la serie.
Aún no sabemos cuándo ni cómo, pero con toda seguridad volveremos a ver al Pingüino más pronto que tarde, ahora como un jefe de la mafia y no como un secuaz.
Todos los episodios de El Pingüino están ya disponibles en la plataforma de Max.