La disciplina atlética de la escalada ha evolucionado significativamente, desde sus humildes inicios (no hace tanto tiempo desde que se practica como hobby) hasta convertirse en uno de los deportes olímpicos con más seguidores. La escalada deportiva, que se originó entre las décadas de 1970 y 1980 en los Estados Unidos, surgió como una forma de practicar el alpinismo en entornos controlados.
La escalada deportiva comenzó como una alternativa segura al alpinismo tradicional, permitiendo a los escaladores entrenar y competir en rutas artificiales y paredes de roca preparadas. A medida que la técnica y la seguridad mejoraron, el deporte atrajo a más entusiastas y se desarrollaron competiciones oficiales. En los años 90, la Federación Internacional de Escalada Deportiva (IFSC) fue fundada, regulando las competiciones y promoviendo el deporte a nivel global.
A lo largo de los años ha ido ganando popularidad y reconocimiento, estableciéndose primero como un deporte; más tarde, creando todo un reglamento y una regulación, y finalmente entrando en el circuito de competiciones internacionales que atraen no sólo a los mejores escaladores del mundo, si no también a toda una afición. La inclusión de la escalada deportiva en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 marcó un hito histórico para el deporte, consolidando su estatus como deporte de pleno derecho en el estadio más grande del mundo.
La disciplina olímpica combinada incluye tres pruebas diferentes (velocidad, bloques y dificultad); los atletas deben destacar en las tres para hacerse con la puntuación más alta y poder llevarse así la medalla a casa. Uno de los nombres que resuena en la escalada deportiva es, sin duda alguna, el de Alberto Ginés. El joven español se hizo con el oro en Tokio 2020, convirtiéndose en el primer campeón olímpico de escalada deportiva de la historia. Con tan solo 18 años, su victoria no solo fue un triunfo personal, sino un logro monumental que situó la escalada española en el mapa.
Tres años más tarde, en los Juegos Olímpicos de París 2024, Ginés está más que decidido a defender su título. Para entrar en el mood, entender el funcionamiento de este modernísimo deporte, y poder apoyar al cacereño como se merece, hoy os traemos un documental que trata precisamente la preparación física y mental a la que se enfrentan los escaladores antes de la competición olímpica.
‘El muro. Escalada por el oro’
Sinopsis
‘El Muro: Escalada por el Oro’ es un documental deportivo dirigido por Nick Hardie, que sigue el día a día de cuatro escaladoras de élite mientras se preparan para la primera competición olímpica de escalada en Tokio 2020. Las protagonistas enfrentan retos tanto físicos como mentales durante un larguísimo período de dos años, en el que se incluye la pandemia que paró el mundo y pospuso los Juegos (y, por tanto, todo el calendario deportivo de los próximos cuatro años). Entremos a conocer a las protagonistas de esta historia.
Las escaladoras cuentan su propia historia en ‘El muro’
Janja Garnbret – Eslovenia
Janja Garnbret es todo un prodigio de la escalada. Con 13 títulos mundiales, es considerada una de las mejores escaladoras de todos los tiempos. Sin embargo, durante la temporada de 2019, experimentó varias caídas inesperadas que pusieron a prueba su confianza y minaron su seguridad en sí misma. A lo largo de ‘El muro’, la veremos batallar contra la sombra de la caída, que le persigue en el campo de entrenamiento y a lo largo de la competición. Garnbret acabó haciéndose con el oro en una ajustadísima primera competición olímpica.
Shauna Coxsey – Gran Bretaña
Shauna Coxsey, la escaladora británica más exitosa de la historia de su país, es bien conocida en el panorama por su fortaleza y resiliencia. Tras recuperarse de varias lesiones graves, se clasificó para los Juegos Olímpicos de Tokio, en busca de un título que, lamentablemente, se le escapó. A lo largo del documental la veremos someterse a varias operaciones y largas horas de rehabilitación: Shauna utilizó el tiempo adicional provocado por la pandemia para prepararse aún más físicamente, y enfrentar el desafío olímpico con una mentalidad más que renovada.
Miho Nonaka – Japón
Miho Nonaka, campeona de la Copa del Mundo de Búlder (es así como se conoce a la disciplina de bloques) en 2018, llevaba encima las esperanzas de toda una nación a la que defendía en los Juegos Olímpicos de Tokio. Como nativa de la capital, la presión que recayó sobre sus hombros fue más grande aún: además de enfrentarse a más de una lesión de hombro, Miho tuvo que enfrentar el estrés adicional de competir en su país natal y defender el orgullo nacional. Finalmente se haría con la medalla de plata y con el cariño de todos los espectadores.
Brooke Raboutou – Estados Unidos
Brooke Raboutou, la joven promesa estadounidense, es una de las competidoras más jóvenes en calificar para los Juegos Olímpicos: proveniente de una familia de campeones de escalada, Brooke combina su preparación olímpica con su vida como estudiante universitaria. La presión de continuar con el legado familiar y de la atención mediática no han sido fáciles, pero su talento y determinación la han mantenido firme en su camino hacia Tokio, competencia en la que se hizo con un diploma olímpico tras quedar en quinto lugar.
‘El Muro: Escalada por el Oro’ no es sólo un documental sobre escalada, sino también una profunda exploración de la fortaleza humana, la resiliencia y la pasión por el deporte. En los Estados Unidos, lugar de producción de la cinta, este documental se puede ver a través de Apple TV, Amazon, Google Play y Redbox.