Las barras de sonido son una solución sencilla, fácil de instalar y generalmente mucho más económica que un sistema de cine en casa compuesto por receptor y altavoces. De ahí que hayan ganado mucha popularidad entre los usuarios que buscan mejorar el sonido de su televisor, pero sin complicarse en exceso. Sin embargo, estas ofrecen algunos inconvenientes respecto a un receptor AV. Generalmente estos inconvenientes están relacionados con la compatibilidad de formatos y con la conectividad. Y si nos centramos en la segunda, seguro que os habréis fijado que, sorprendentemente, no todas las barras de sonido cuentan con puertos HDMI.
Aunque pueda parecer algo «del pasado», no creáis que todos los modelos actuales cuentan con puerto HDMI. Muchas de las barras de sonido más sencillas o asequibles de la actualidad no cuentan con puerto HDMI para su conexión al televisor. Y otras muy conocidas tampoco, como por ejemplo la Sonos Ray, por mencionar alguna, que solo cuenta con puerto óptico. Otras, sin embargo, puede que ofrezcan ambos modos de conexión: óptico y HDMI.
Así que no es nada raro plantearse cómo es mejor conectar la barra de sonido al televisor. Es totalmente normal que os surjan algunas dudas, como por ejemplo si deberíais buscar sí o sí una barra de sonido que cuente con HDMI, descartando radicalmente las que no lo incluyan. O si será mejor conectarla por óptico que por HDMI, si tenéis una barra de sonido que ofrezca ambas opciones. Vamos a intentar aclararlo.
HDMI u Óptico, ¿qué puerto uso para conectar la barra de sonido?
La respuesta rápida, corta y «al pie» es: el HDMI. Pero claro, para ello se deben cumplir algunos requisitos. El primero y principal, tanto el televisor como la barra de sonido deben tener puertos HDMI. Y más concretamente, el televisor debe tener un puerto HDMI compatible con ARC o eARC, algo muy habitual actualmente pero no tanto hace algunos años. Así que si tienes una tele muy vieja, tendrás que comprobar que su puerto HDMI es compatible con ARC, porque si no lo es no podrás enviar el sonido desde la tele a la barra de sonido.
La conexión a través de cable óptico lleva muchísimos años en el mercado, así que es mucho más probable que la tenga tu televisor, aunque sea muy antiguo. Así que si tu tele o tu barra de sonido no tienen HDMI, tendrás que recurrir a ella para poder conectar ambos equipos.
¿Es mucho peor usar una conexión óptica en lugar del HDMI?
Quizás te estés preguntando qué te pierdes si conectas tu barra de sonido usando una conexión óptica en lugar de un puerto HDMI. Lo primero que debes saber es que la salida Óptica de nuestro televisor (y de cualquier otros dispositivo) tiene ciertas limitaciones en lo que se refiere a formatos compatibles. Esto se debe que este tipo de conectores, como os decíamos, llevan con nosotros muchísimos años y se diseñaron para los formatos que había entonces en el mercado.
Así pues, si utilizamos una salida óptica para unir el televisor con una barra de sonido solo podremos reproducir los formatos Dolby Digital, DTS y PCM (también LPCM). Esta conexión no soporta los conocidos como formatos de sonido HD, como el True HD, el DTS HD y por supuesto el Dolby Atmos.
Entonces, ¿por qué muchas barras de sonido actuales siguen utilizando la conectividad óptica en lugar del HDMI? Es muy simple. Las barras de sonido más sencillas no cuentan con soporte para los formatos como el Dolby Atmos o los DTS HD y THD. Suelen ser barras de sonido con sistemas con 2.1 canales o similares, así que ni son compatibles ni pueden reproducir esos formatos correctamente. Es cierto que tenemos en el mercado barras de sonido con solo dos altavoces y compatibles con Atmos, pero esas seguro que llevan conectividad HDMI.
Para acabar podríamos intentar contestar a la pregunta de si entonces debemos descartar cualquier barra de sonido que no tenga HDMI. Y la respuesta sería No necesariamente. Es cierto que hoy en día las plataformas ya tienen mucho contenido en Dolby Atmos pero una barra de sonido con 2.1 o 3.1 canales no va a aprovechar ese formato, por mucho lo que ponga en la ficha técnica o en los carteles publicitarios. Así que muchas veces es mejor optar por un buen sonido estéreo que por una barra de sonido compatible con Atmos que no saque provecho del formato.