Las nuevas Hyper OLED Llegarán más pronto de lo que todos creemos. El otro día os trajimos una noticia de recopilación de todo el aluvión tecnológico que estaba por llegar al mundo OLED, pero se nos escapó una de las más interesantes que, además, merecía artículo propio.
Hablamos de la tecnología de Hyperfluorescencia de emisión de la luz para las nuevas generaciones de televisores OLED. La gracia de esta tecnología es que combina dos materiales emisores diferentes y uno de ellos es un viejo conocido: TADF y fluorescencia de primera generación. A esta combinación se la ha llamado Hyperfluorescencia (o tecnología de emisión de cuarta generación).
Hyper OLED: emisión de luz mediante Hyperfluorescencia, el futuro del OLED ya está aquí
El otro día, como decíamos, ya os hablábamos de varias mejoras en la eficiencia y brillo de las OLED: que si TADF, los nuevos PHOLED, eLEAP, etc. Hoy sin embargo, asistimos a un cambio en el componente mismo encargado de la emisión de la luz en los diodos orgánicos de las OLED, hasta el momento basados en la fosforescencia (conocida como segunda generación de emisión de luz).
Cualquier artículo que hayamos hecho o incluso mejoras sobre éste como TADF (conocida como tercera generación de emisión de luz), se basaban en dicho principio. Hasta el momento, dicha emisión basados en la fosforescencia en las OLED, incluso las nuevas de tercera generación como TADF, presentaban una eficiencia cuántica interna de casi el 100%, lo que significa que no puede ser más eficiente ya. Se llegó al tope…¿no? pues no, llega hora la cuarta generación de emisión de luz: la hyperfluorescencia.
Como explica Kyulux en una publicación reciente, el fosforescente sufre de un amplio espectro de emisión de luz. Para lograr una buena gama de colores (para la cual es mejor una emisión de espectro tan estrecho como sea posible), los fabricantes de pantallas tienen que filtrar dicha emisión de luz. Esto da como resultado una reducción del brillo y la eficiencia.
La tecnología de emisión de cuarta generación de Kyulux, llamada hiperfluorescencia, ofrece un espectro de emisión estrecho y, al mismo tiempo, mantiene un IQE de casi el 100%. Ello significa que la eficiencia total del sistema de los OLED basados en HF puede ser mayor que la de los OLED PHOLED.
Un espectro estrecho se traduce en una mayor pureza del color, lo que significa que se puede hacer una pantalla con una gama de colores más amplia. Con emisores de amplio espectro, lograr la misma pureza de color significaría eliminar (filtrar) parte de la emisión, lo que reducirá la eficiencia. Con los emisores hyperfluorescentes, ya no es necesario ese filtro y, por lo tanto, se puede utilizar toda la energía emitida.
El espectro estrecho también significa que para la misma energía, el brillo máximo del dispositivo OLED es mayor. Esta es otra ventaja: para el estándar HDR, por ejemplo, se podría alcanzar el mismo brillo máximo con un consumo energético menor, lo que extenderá la vida útil de la pantalla y aumentará la eficiencia. Algo que a todos los europeos nos aliviará saber.
Según una simulación realizada en Kyulux, un OLED HF verde de alta emisión consigue un brillo máximo un 60 % más alto en comparación con un OLED de fosforescencia actual, lo que se traduciría en una eficiencia cuántica externa (EQE) un 10% más alta. Además, los emisores de HF también están libres de metales raros, por lo que es más barato fabricarlos.
La semana pasada, Kyulux anunció que está en camino de comercializar sus primeros sistemas emisores AMOLED en 2023 y la compañía ahora está trabajando en estrecha colaboración con los fabricantes de OLED. Esta podría ser una gran noticia para la industria y ver, en un futuro no muy lejano, un aumento muy considerable de brillo, vida útil y menor consumo energético en los televisores OLED de próximas generaciones.