El pasado martes 25 de marzo Netflix anunció que ofrece contenido HDR10+ en streaming para dispositivos compatibles con el codec AV1, lo que mejora la experiencia de visualización en equipos certificados HDR10+ y que anteriormente solo recibían contenido HDR10. Sin ninguna duda, es una gran noticia para los consumidores: los metadatos dinámicos incluidos en el contenido HDR10+ mejoran la experiencia de visionado y la precisión de la imagen al visualizarse en estos dispositivos.
La tendencia es inmejorable para Samsung y sus aliados: el HDR10+ está en su mejor momento porque hace unos pocos meses Disney+ y Apple TV+ también empezaron a ofrecer materiales a sus abonados con este formato de alto rango dinámico.
Si tenéis Netflix y un televisor compatible con HDR10+ y el códec de video AV1, solo tenéis que seguir los pasos que en AVPasión escribió mi compañero Javier para poder confirmar que vuestro TV reproduce via app el contenido con los metadatos dinámicos.
Pero lo más interesante de este asunto, suele estar en la letra pequeña. Y en AVPasión nos gusta mucho profundizar donde los demás se paran. Por eso os informamos de que ese HDR10+ se basa en el máster Dolby Vision que la productora debe entregar a Netflix.
Sí, el HDR10+ que ofrece Netflix es dependiente de la masterización Dolby Vision. Su metadata procede y se extrae de Dolby Vision. ¿Interesante, no creeis?
Este punto esta confirmado por la propia Netflix en su blog tecnológico donde desvelan alguna información más. Anuncian lo comentado por todos los medios, es decir, que han habilitado HDR10+ para la distribución y por lo tanto que sus subscriptores con dispositivos compatibles lo reproduzcan.
Y a continuación sueltan el pequeño detalle de que solo aceptan de las productoras masters Dolby Vision en la ingesta en sus servidores, donde posteriormente generan la versión HDR10 y la SDR 709. Ahora se añade a la lista de estas versiones o pases o trims el HDR10+.
Netflix argumenta que su proceso de codificación está diseñado con flexibilidad y escalabilidad, lo que permite que todos estos formatos HDR/SDR se deriven de un único producto DolbyVision de forma eficiente y a gran escala.
Dicho en otras palabras, solo se fían de Dolby Vision como estándar robusto y predecible en su comportamiento a la hora de sacar el resto de versiones con una garantía de calidad de video.
Esto es posible porque la extracción de metadatos dinámicos se realice en el paso de re-codificación, ya que es un paso totalmente analítico y no supone ningún proceso creativo. Los responsables visuales (fotografía y dirección) ya tomaron sus decisiones en una sala de color bajo el paraguas HDR de Dolby y en esta fase de distribución no se discute ni se altera ningún aspecto visual.

Simplemente HDR10+ extrae la metadata dinámica del Dolby Vision y la adapta a sus especificaciones. Obviamente la primera víctima es el mapeo de tonos exclusivo de Dolby de tres segmentos, en su versión CM v4 (content mapping). HDR10+ en la versión actual solo tiene un único segmento de adaptación para la luminancia.
EL CODEC AV1
Netflix habilita el HDR10+ utilizando el códec de vídeo AV1, estandarizado por la Alianza para los Medios Abiertos (AOM) en 2018. AOMedia Video 1 (AV1) es un formato de compresión de video abierto y libre de derechos de autor diseñado para las transmisiones de video a través de Internet.
Fue desarrollado como sucesor de VP9 por la Alliance for Open Media, un consorcio fundado en 2015 que incluye empresas de semiconductores, proveedores de video bajo demanda, productores de contenido de video, empresas de desarrollo de software y proveedores de navegadores web.
Anteriormente, Netflix habiltó la codificación AV1 para contenido SDR y analizaron un gran valor para su estructura de streaming por una calidad visual más alta y consistente, menor retardo de reproducción y más streamings simultáneos a la máxima resolución.
AV1-SDR ya es el segundo códec más reproducido en Netflix, después de H.264/AVC, ¡que lleva más de 20 años disponible! Con la incorporación de metadata HDR10+ a AV1, Netflix espera que pronto sea el códec más reproducido en la plataforma.
En el caso del HDR10+, su implementación en AV1 es libre (no necesariamente sinónimo de gratis) y a diferencia del Dolby Vision, se basa en simplemente añadir metadatos dinámicos a la fuente HDR10. Por lo que es muchísimo más fácil de trabajar, implementar y suele estar exento de errores ya que no es un formato nuevo como tal. Por contra, como hemos visto, es menos popular y está menos extendido; al menos hasta el año pasado (2024)
Netflix informa de que en los últimos cinco años (2020-2025), el streaming en HDR ha aumentado más de un 300 % en la plataforma, mientras que la cantidad de dispositivos configurados para HDR que ven Netflix se ha más que duplicado. Desde el lanzamiento del HDR con la primera temporada de la mítica y pionera Marco Polo (en el año 2014), Netflix ahora cuenta con más de 11.000 horas de títulos en HDR, todo un progreso imparable. Aunque ahora el debate sea si el uso del HDR es notorio o solo un SDR mejorado en un amplio porcentaje del contenido.
HDR10 frente al HDR10+

Mientras seguimos dando vueltas al debate anterior, Netflix facilita en su blog un par de frames SDR derivados de un contenido HDR10+ AV1.
Observad cómo se conserva el detalle de la luz del flash en la captura HDR10+ y la sobreexposición en esa misma zona en la versión HDR10 de aquí abajo.

Como se observa en la linterna LED sobre la mesa, los detalles de las altas luces se recortan en el contenido HDR10, pero se recuperan en HDR10+. Además, la zona bajo la linterna está sobreexpuesta en el contenido HDR10, mientras que HDR10+ la renderiza con mayor fidelidad a la fuente.
La razón por la que HDR10+, con sus metadatos dinámicos, destaca en este ejemplo es que las escenas anteriores y posteriores a esta escena con este fotograma tienen estadísticas de luminancia notablemente diferentes. Los metadatos estáticos de HDR10 no pueden explicar el cambio en el contenido. Si bien este es un ejemplo al azar, los metadatos dinámicos de HDR10+ demuestran su valor en cualquier contenido o género. Esta consistencia permite a los consumidores disfrutar de un contenido que preserva mejor la intención creativa.
Fuente: Netflix blog