Actualmente, contamos con un amplio abanico de posibilidades a la hora de comprar un televisor. Podemos elegir todo tipo de tecnologías de pantalla, aunque en la gama alta contamos con tres grandes exponentes: MiniLED, OLED y QD-OLED. Aunque, hay algo que tienen en común todos los televisores. Hablamos de un más que limitado almacenamiento que lastra con el tiempo la experiencia de uso.
Ojo, no hablamos de un problema en la gama entrada, algo que, por otro lado, sería normal porque los fabricantes tienen que recortar en algunos aspectos para abaratar el coste, algo que vemos en el mercado de la telefonía. Pero no, en el caso del almacenamiento parece que las grandes firmas ignoran este elemento, dotando a los mejores televisores de una capacidad interna más que limitada.
Tenemos alguna excepción, ya que Philips sí que se porta como debe ser y añade 16 GB de almacenamiento en muchos de sus modelos, pero la tónica habitual en el sector es apostar por 8 GB. Un problema que necesita una solución, más teniendo en cuenta que el encarecimiento del precio es mínimo.
Da igual que tengas un televisor premium: su almacenamiento es una vergüenza
Si damos un vistazo a las características técnicas de la Samsung S95C, LG OLED G3 y Sony A95L, vemos que los respectivos caballos de batalla para el sector de las Smart TV pecan de lo mismo: cuentan con tan solo 8 GB de memoria interna.
Un almacenamiento muy limitado, más si se tiene en cuenta que no son reales, ya que hay que descontar el espacio del sistema operativo. Y, para más inri, la mayoría de estos televisores cuentan con aplicaciones preinstaladas que limitan todavía más su capacidad.
¿Y esto en qué se traduce? En que una Smart TV de gama alta puede acabar teniendo problemas de rendimiento por falta de espacio. Es cierto que la solución es tan simple como borrar aplicaciones que no uses o limpiar la caché, pero no es una razón para contar con tan poco almacenamiento interno.
Principalmente, porque para muchos usos se puede quedar corto. Sí, es verdad que puedes comprar un almacenamiento externo, ya sea un disco duro un USB, para aumentar su capacidad. Incluso en Google TV y Android TV puedes instalar aplicaciones en estas memorias y ganarle algo de espacio a tu televisor, pero sigue siendo un problema.
Google va a obligar a aumentar la memoria interna a 16 GB en cualquier equipo con Android TV o Google TV
Por suerte, la solución es tan sencilla como ampliar la capacidad de los televisores, por lo menos en la gama alta, para garantizar una mejor experiencia. Y por suerte, todo apunta a que la próxima generación de Smart TV sí que contará con mayor capacidad de almacenamiento.
Todo gracias a Google, que ha obligado a aumentar la capacidad de almacenamiento en futuros equipos con sus sistemas operativos. Tal y como informamos en su momento, a partir de Android TV 13 todos los socios que utilicen esta versión del sistema operativo, o Google TV, deberán ofrecer 16 GB de almacenamiento como mínimo.
Este año los principales fabricantes han podido esquivar esta normativa, pero en 2024 seguramente veremos los primeros modelos de Sony contarán con 16 GB de memoria interna. Lo mejor es que seguramente el resto de marcas, aunque no usen Android TV o Google TV, se sumarán aumentando la capacidad de sus televisores, por lo menos los modelos de las gamas más altas, para que por fin tengamos la experiencia que nos merecemos. Mientras tanto, mejor que tengas un USB o un disco duro externo a mano si necesitas más espacio en tu televisor inteligente.