Desde que Netflix lanzó sus condiciones de uso para evitar que los usuarios compartan cuentas de forma fraudulenta, no han parado de arreciar las quejas (y, también, las bajas). La plataforma, lejos de cambiar su puesta, la mantiene. Eso sí, se acaba de conocer que ha modificado una de las condiciones que más ampollas estaba generando entre los que tiene acceso a la plataforma.
Si las cifras que maneja Netflix respecto a las personas que veían contenido sin pagar nada por ello son ciertas, unos 100 millones de personas, tiene sentido que se desee acabar con ello. Bien es cierto que se debía asumir que algunos ahora pensarán que no les amortiza pagar las cantidades completas de cada tipo de acceso -pero los que decían darse de alta bien pueden compensar el descenso en los ingresos-. Sea como fuere, lo ocurrido es un punto de inflexión para la plataforma y, quien sabe, si el resto irá detrás a la hora de intentar conseguir lo mismo.
El cambio que ha incluido Netflix en las condiciones de uso
La modificación afecta a la condición que indica que una vez al mes se tenía que reproducir algo en la red WiFi que se utiliza en el lugar que se ha convertido como la residencia principal para la plataforma. Muchos se quejaban de que esto era algo que no siempre se podía cumplir, especialmente si se está de viaje o, simplemente, si se olvida. Por suerte, en Netflix han entendido esto y han variado la forma de proceder.
Ahora se parece mucho más a lo que se utilizan en otros servicios en la nube, donde se establecen códigos de pasarela para comprobar que el uso que se da es el adecuado. De esta forma, si se detecta que el acceso a los contenidos de la plataforma online se realiza por mucho tiempo fuera de casa, se toma una medida que posiblemente sea más eficiente para todos: se activa una verificación en el dispositivo afectado que obliga a ingresar un código de cuatro dígitos -que se recibe en el teléfono u otra forma de comunicación-. Para nada es una mala idea, al menos sobre el papel.
Por lo tanto, la exigencia original se queda en nada. Ahora se utiliza un sistema mucho más amigable en Netflix, lo que siempre es positivo en lo referente a la usabilidad. Eso sí, está por ver si la efectividad a la hora evitar las cuentas compartidas es la misma o no. En esto pueden surgir bastantes dudas al respecto, todo hay que decirlo. Pero, lo cierto, es que hablamos de una acción menos exigente de cara al usuario.
No es descartable que existan más modificaciones
Visto lo visto, esto es algo que puede suceder y como en el caso que hemos comentado antes de la misma manera: de la noche a la mañana. Algunas de las condiciones establecidas para evitar que se compartan cuentas no son precisamente muy queridas por parte de los usuarios, por lo que pueden ser cambiadas por la compañía, que es evidente que sigue buscando fórmulas para conseguir sus objetivos -y que afecte lo menos posible a la experiencia de uso que se tiene con la plataforma-.
Habrá que estar atentos en el siguiente movimiento que decida dar Netflix que bien podría ser un nuevo tipo de cuenta gratuito donde la publicidad sea mucho mayor y que permitiría un acceso reducido a los contenidos de la plataforma. Así, podía competir con una opción similar en la que estaría trabajando Warner para apoyar a HBO Max y que tendría por nombre WBTV. La verdad es que las cosas en el segmento de los servicios de vídeo en streaming están realmente complejas.