Ya os explicamos con anterioridad que la tecnología VRR, entre ellas Nvidia G-Sync, era el futuro de los videojuegos y la revolución más grande que había pasado en esta generación. Tras la llegada del puerto HDMI 2.1, el estándar VRR agrupaba los 3 formatos: VRR HDMI, G-Sync y Freesync, siendo los 3 exactamente iguales.
Antes de la llegada de este puerto y en algunos productos premium Nvidia usaba un módulo G-Sync independiente para monitores y conseguir mejoras aún más avanzadas, lo que la marca se refería como G-Sync Ultimate, con importantes avances en el tema del HDR o incluso de mejoras en la latencia. Ahora, la firma ha anunciado el fin de este chip al asociarse con MediaTek y ha presentado sus tres primeros monitores con la nueva tecnología: Nvidia G-Sync Pulsar.
Nvidia presenta los primeros monitores con la nueva tecnología G-Sync Pulsar
La tecnología de frecuencia de actualización variable de Nvidia, G-Sync, se lanzó en 2013 y requería un módulo dedicado y bastante costoso en los monitores, a diferencia del FreeSync de AMD.
En 2019, Nvidia presentó “G-Sync Compatible”, que los televisores de alta gama también admiten hoy en día, pero carece de ciertas funciones más avanzadas de G-Sync.
El siguiente paso es eliminar la necesidad de un módulo independiente y, al mismo tiempo, mantener todas las funciones. Para lograrlo, Nvidia se ha asociado con el diseñador de chips MediaTek para integrar G-Sync directamente en los escaladores MediaTek que ya alimentan la mayoría de los monitores para juegos.
Este movimiento podría permitir que los monitores con G-Sync sean más asequibles, y además garantizará que los usuarios no tengan que sacrificar ninguna de las características avanzadas que han definido a G-Sync desde su lanzamiento.De hecho, Nvidia ha revelado que esta colaboración con MediaTek es la base de su nueva tecnología de próxima generación: G-Sync Pulsar.
G-Sync Pulsar: la próxima evolución en monitores gaming
G-Sync Pulsar es una tecnología que combina la tasa de refresco variable (VRR) con técnicas de estroboscopia avanzadas, ofreciendo una claridad de movimiento efectiva cuatro veces superior a la de tecnologías anteriores. Esto significa que los jugadores podrán disfrutar de una experiencia gaming más fluida, con menos desenfoque de movimiento, lo que es esencial para los títulos más rápidos y competitivos.
Los primeros monitores que integrarán esta nueva tecnología están programados para lanzarse a finales de este año, y entre ellos se encuentran el AOC Agon Pro AG276QSG2, el Acer Predator XB273U F5 y el Asus ROG Swift 360Hz PG27AQNR.
Todos estos monitores cuentan con una tasa de refresco de 360Hz, resolución de 1440p y soporte para HDR, aunque en este último aspecto hay cierta controversia, ya que parecen utilizar paneles IPS LCD que no ofrecen el contraste necesario para una verdadera calidad HDR.
¿Suficiente para competir con los monitores OLED?
Una de las grandes preguntas que surgen con la introducción de G-Sync Pulsar es si esta nueva tecnología podrá competir con los monitores OLED, que han tomado la delantera en 2024 con tasas de refresco de 360Hz y 480Hz, combinadas con la rápida respuesta de píxeles que caracteriza a los paneles OLED. Nvidia ha mostrado un vídeo a velocidad reducida para demostrar las ventajas de G-Sync Pulsar, destacando cómo esta tecnología mejora la claridad del movimiento incluso en comparación con los OLED más avanzados.
Con G-Sync Pulsar, Nvidia espera cerrar la brecha con los monitores OLED, y ofrecer una opción atractiva para los jugadores que prefieren los paneles LCD por sus características específicas, como la resolución más alta y la mayor durabilidad en comparación con los OLED.
En definitiva, con la eliminación del módulo G-Sync y la introducción de la tecnología Pulsar, Nvidia está claramente enfocada en dar su mejor versión en el mercado de monitores gaming, ofreciendo soluciones que combinan rendimiento de élite con precios más accesibles. Será interesante ver cómo esta nueva tecnología se posiciona frente a la creciente popularidad de los monitores OLED en los próximos meses.