Hace un par de días os contamos qué es bicablear un altavoz y para qué sirve. Es una modificación relativamente sencilla que nos permitirá dar un pasito más en nuestra búsqueda del sonido perfecto. Aunque como dijimos en ese artículo, no debéis esperar un salto enorme en cuanto a calidad de sonido. Hoy os queremos hablar de otra mejora que podemos hacer de una forma relativamente sencilla si tenemos los equipos adecuados y que sí puede tener un mayor impacto. Hablamos de biamplificar los altavoces, algo que se suele hacer, mayoritariamente, con los dos altavoces principales.
El proceso de biamplificar un altavoz es súper sencillo, solo nos llevará unos minutos. Siempre y cuando tengamos los dispositivos adecuados claro. ¿Qué dispositivos son estos? Como es lógico, lo primero de todo es contar con unos altavoces que tengan dos pares de bornes de conexión, lo cual significa que admiten tanto biamplificación como bicableado. Lo segundo es contar con un receptor AV o un amplificador que permite realizar biamplificación. Actualmente es bastante común, ya que casi todos los receptores AV de gama media-alta tienen esta función.
¿Cómo puedo biamplificar un altavoz?
La biamplificación consiste en conectar dos conjuntos de salidas de amplificador en paralelo con dos conjuntos de bornes de conexión en un altavoz. Para ello, el altavoz requiere dos bornes de conexión, como hemos comentado, y también necesitaremos dos conjuntos de cables de altavoz. Es decir, para que se entienda bien, tendremos «dos cables negros y dos cables rojos».
¡OJO! Es fundamental que quitemos las placas o cables que hacen de puente entre los dos juegos de bornes del altavoz. Si no lo hacemos podríamos provocar un cortocircuito en ambos conjuntos de salidas del amplificador y causar un problema muy grave tanto en los altavoces como en el amplificador o receptor AV.
Dicho esto, la instalación de una biamplificación es muy simple. Tendremos que llevar un par de cables de altavoz al receptor AV o amplificador en su conexión habitual de los altavoces. Y también un segundo par de cables de altavoz que conectaremos en la, generalmente, conocida como Zona 2 del amplificador o receptor AV.
Una vez que hayamos realizado el cableado, deberemos verificar el receptor o procesador AV para ver si necesitamos realizar algunos ajustes, algo bastante habitual. En el menú de configuración de los altavoces veremos una sección de biamplificación que nos indicará qué conjuntos de salidas debemos utilizar y también cómo configurar el sistema para biamplificar el altavoz en cuestión.
¿Cuáles son los beneficios de biamplificar los altavoces?
La biamplificación consiste en que al tener dos canales del amplificación se alimentan las frecuencias altas y bajas por separado, lo que crea una mejor separación y una mayor salida dinámica. De esta manera, la señal de cada amplificador puede pasar por su propia fuente de alimentación para maximizar la potencia del altavoz.
Básicamente estamos duplicando la potencia de salida, lo que nos dará más espacio libre y una mayor capacidad de salida del sistema para una dinámica mejorada, así como una mejor separación entre graves, medios y agudos. El resultado es que el sonido que sale del altavoz es más alto, más claro y más detallado. Muchas personas se refieren a esto como un sonido más «revelador». También puede proporcionar un impacto un poco más dinámico.
¿Vale la pena biamplificar los altavoces?
Es una pregunta difícil de contestar de forma rotunda. Si tienes un equipo que lo admita, seguramente tendrá cierto nivel, así que una forma rentable de obtener un poco más de rendimiento del sistema es biamplificar. Se notará especialmente si tienes unos altavoces «tragones». ¿Tendrás un cambio radical en el sonido? Pues si os somos sinceros, hemos oído todo tipo de opiniones. Desde luego se nota más que el bicableado.
¿Qué inconvenientes o problemas ofrece la biamplificación? No es un proceso que tenga muchas desventajas, pero alguna podemos encontrar claro. La más obvia es que necesitamos invertir en un juego adicional de cables de altavoz y que tendrás que pasar esos cables hasta los altavoces, lo cual, dependiendo de nuestra instalación, puede ser un problema.
Otra posible «desventaja» es que vamos a utilizar un segundo juego de conexiones para altavoz del receptor AV. Pero esto lo ponemos entre comillas porque entendemos que, si te estás planteando el biamplificar, es porque no necesitas esos canales del receptor AV y los tienes sin uso.
Así que, teniendo en cuenta lo costoso que es actualmente actualizar cualquier componente, la biamplificación es una de las formas más económicas y fáciles de intentar lograr que nuestro sistema de cine en casa o de música suba de nivel.
Fuente | SVS