La carga inalámbrica es algo que se ha convertido cada vez más habitual entre los smartphone y que resulta bastante sencilla de entender: permite rellenar la batería de un dispositivo sin cables. Pero hay algo en algunos modelos con iOS o Android que se denomina carga inalámbrica inversa y que puede ser que no sepas exactamente lo que es. Te lo explicamos para que sepas todos los beneficios que ofrece.
Esta característica se ha incorporado a muchos teléfonos premium y recibe distintos nombres dependiendo del fabricante (compartir batería, compartir energía e, incluso, Wireless PowerShare). Pero, en realidad, es básicamente lo mismo en los smartphones. Y, lo cierto, es que como vas a comprobar es una opción que resulta de lo más interesante disponer de ella debido a que puede sacarte de más de un apuro.
Cómo funciona la carga inalámbrica inversa
La carga inalámbrica es la capacidad de cargar un dispositivo utilizando inducción electromagnética a través de dos bobinas metálicas. En el caso de los smartphones, una se encuentra en el cargador y la otra en la parte posterior del teléfono y de esta forma se realiza el trabajo de forma sencilla y eficiente
La carga inalámbrica inversa, que va un paso más allá, permite que tu smartphone envíe energía de la misma forma en que la recibe. De esta forma, puedes cargar otro dispositivo compatible -como por ejemplo unos auriculares-. Esto se hace colocando el segundo dispositivo en la parte posterior de tu smartphone, por lo que no hay complicación alguna a la hora de utilizar esta tecnología, Es decir: ambos dispositivos deben tener una bobina metálica para completar el proceso.
Esto es muy importante: no se puede utilizar la carga inalámbrica inversa para recargar un dispositivo que necesite estar conectado a la corriente para cargarse de forma exclusiva (y para nada es recomendable dar uso a las dos opciones de rellenado en paralelo por motivos de seguridad si dispones de un equipo compatible).
Cómo usar esta tecnología en un smartphone
Es muy probable que necesites habilitar manualmente la carga inalámbrica inversa antes de colocar otro teléfono en la parte posterior del tuyo, ya que por defecto esta opción suele venir deshabilitada en los terminales.
La forma de habilitar esta función varía según el dispositivo, ya que los distintos fabricantes utilizan nombres diferentes para esta funcionalidad. En la mayoría de los casos, puedes encontrar la función en Ajustes > Batería. Algunos ejemplos son los siguientes:
- En un Google Pixel, ve a Ajustes > Batería > Compartir batería y activa el interruptor.
- En el Motorola Edge esta función se encuentra bajo el nombre «Power Sharing». Se activa en Ajustes > Batería > Power Sharing (en los smartphone Galaxy esto es muy parecido, pero la denominación es Wireless PowerShare).
- En un iPhone 15, busca un interruptor para habilitar la carga inalámbrica inversa en Ajustes > Batería > Carga inalámbrica.
Independientemente del teléfono que uses, la función trabaja de manera similar: coloca tu teléfono boca abajo y otro teléfono o accesorio compatible (boca arriba) encima. Lo ideal es que las partes traseras se toquen en el punto óptimo que se necesita para que la carga inalámbrica funcione en una plataforma de carga inalámbrica Qi.
La carga inalámbrica inversa generalmente no funcionará si la batería del teléfono baja de un cierto nivel, generalmente la cifra es del 15% o menos), ya que la estabilidad del proceso no es la adecuada y los tiempos se estiman excesivos para dar uso a esta tecnología. Te dejamos un ejemplo en vídeo de cómo es un proceso de este tipo:
La velocidad de estos procesos
En la mayoría de los casos, la carga inalámbrica no envía energía tan rápido como lo hace una conexión directa por cable, y la inversa no es una excepción. Además, lo habitual es encontrar potencias menores en los procesos con el objetivo de no correr riesgo alguno a la hora de completar procesos (especialmente por la potencial subida de temperatura que puede ocurrir al enviar energía en vez de recibirla por parte del smartphone).
Las velocidades de carga inalámbrica inversa generalmente están limitadas a 5W. Esto significa que los procesos son lentos y que se necesitan horas para completar un rellenado de batería mediante esta tecnología. Hay que tener en cuenta que esta opción está pensada como un salvavidas -no hay que olvidar, además, que se descarga la batería del propio smartphone-, no como el proceso habitual para recargar, por ejemplo, unos auriculares (ya que las bases wireless específicas son mucho más rápido, por poner un ejemplo).