La velocidad de datos móviles -tanto iOS como Android– es algo importante para los usuarios, especialmente porque puede variar dependiendo de la ubicación en la que te encuentres en un momento dado. Sin embargo, esto no significa que tu velocidad de internet esté siempre sujeta a estas condiciones. Tu proveedor de servicios puede reducir deliberadamente la velocidad de tu conexión si se cumplen ciertas opciones, los que se conoce habitualmente como Throttling.
Cuando muchas personas mencionan Throttling (que afecta a toda la conexión), en realidad se refieren a la «gestión de tráfico«. Esta práctica consiste en reducir la velocidad de ciertos tipos de servicios de internet. Por ejemplo, la navegación web puede mantenerse a plena velocidad, mientras que la descarga de torrents o la transmisión de vídeos puede ser ralentizada por separado.
¿Qué es el Throttling y los motivos por los que ocurre?
El Throttling, o limitación de datos, ocurre cuando tu proveedor de servicios de internet reduce intencionalmente la velocidad de tu conexión por debajo de la contratada. En otras palabras, no se trata de algo inherente a la tecnología o la infraestructura disponible, sino de una decisión o política establecida por el proveedor.
Esto no implica necesariamente que tu proveedor esté actuando de manera arbitraria o malintencionada. Existen múltiples razones válidas para aplicar Throttling -tanto en redes cableadas como inalámbricas-. Principalmente, al aplicar esto lo que se busca es mantener una experiencia óptima para todos los usuarios. Si algunos usuarios acaparan el ancho de banda, la calidad del servicio se degrada para el resto. En estos casos, reducir la velocidad de conexión de ciertos usuarios para equilibrar el uso del ancho de banda es una medida razonable (aunque los afectados no lo suelen ver así, como es lógico).
Además, si utilizas un servicio con un límite de datos máximo de consumo al mes, es posible que experimentes una reducción de velocidad una vez alcanzado el límite fijado, hasta el inicio del siguiente período de facturación. Algunos proveedores también optan por vender sus servicios en diferentes niveles de velocidad, donde se obtiene mayor velocidad a cambio de un coste adicional, incluso si no existen límites de datos específicos (pero ya no es lo habitual, por ejemplo, en Europa).
Cómo Evitar el Throttling en tu Conexión de Datos Móviles
Te mostramos algunos consejos que pueden evitar que te afecte este problema, aunque si las limitaciones son directas al usuario, las cosas no son precisamente sencillas. Son los siguientes:
Intenta ir a un área menos congestionada
Si estás experimentando Throttling porque te encuentras en una zona con muchos usuarios compartiendo la misma celda de red (por ejemplo, un pueblo de la sierra en verano), una solución temporal podría ser ir puntualmente a un área menos congestionada. El problema de verse afectado por esto es que puede provocar una reducción de la velocidad para garantizar que todos los usuarios tengan una porción justa del ancho de banda disponible.
Por lo tanto, la única solución real a corto plazo es moverse a un lugar diferente a una distancia de, por lo menos, un par de kilómetros. Alternativamente, podrías esperar a que el lugar se despeje o utilizar tu conexión para tareas que demandan mucho ancho de banda durante las horas de menor tráfico (de madrugada).
Controlar el gasto de datos
Si estás utilizando un servicio con un límite de datos, es recomendable que hagas un esfuerzo por mantenerse dentro de tu cantidad para evitar el Throttling. Aunque no siempre está claro cuál es el tamaño de este límite, generalmente se encuentra en el acuerdo del servicio o en la publicidad en la letra pequeña.
Puedes usar el monitor de uso de datos integrado en tu teléfono para tener una idea de cuántos datos has consumido, o en algunos casos, consultar tu uso directamente con tu proveedor de servicios. Además, es de lo más recomendable utilizar redes WiFi tanto como sea posible para preservar tus datos móviles. Existen diversas formas de reducir tu consumo de datos móviles, algunas de las más comunes incluyen:
- Descargar contenido multimedia de streaming antes de desconectarte de una red WiFi.
- Ajustar la calidad de transmisión a un nivel inferior cuando estés utilizando datos móviles.
- Actualizar aplicaciones o realizar cargas en la nube solo cuando estés conectado a tu red doméstica.
- Los navegadores móviles modernos a menudo tienen modos de ahorro de datos, que pueden acelerar la navegación y reducir el uso de datos, aunque con una pequeña reducción en la calidad de las imágenes en los sitios web.
Usar una VPN para evitar el Throttling
Este último consejo aplica principalmente a la gestión de tráfico, ese tipo especial de limitación que solo se aplica a ciertos tipos de tráfico web. A menos que tu proveedor de servicios de internet reduzca la velocidad del tráfico de VPN de manera general, el uso de una herramienta de este tipo es una solución más que positiva. Por lo tanto, no es mala idea llevar una app instalada siempre en el terminal de manera preventiva y darle uso si se detecta una bajada de velocidad en la conexión.
El Throttling puede ser frustrante, pero los desafíos del ancho de banda móvil en ciertas regiones lo hacen comprensible y necesario para garantizar un nivel de servicio utilizable para todos. Mientras conozcas lo que realmente te prometió tu proveedor de servicios de internet, podrás controlar de forma general cuándo tendrás las mejores velocidades posibles, o simplemente las mejores velocidades disponibles en ese momento.