Es algo de lo que todos hablamos pero nadie sabe explicar muy bien. ¿Qué es la curva EOTF? es uno de los aspectos más importantes de la llegada del HDR y mucha gente no le da la importancia adecuada, o prefiere alterar los valores de la misma para dar una imagen más impactante (a la par que lavada, por cierto) y muchas veces es fruto del desconocimiento, ya que si queremos ser lo más respetuosos posibles con la intención del director, lo suyo es no tocarlo.
En este artículo explicativo, veremos que esta curva es idéntica en todos los formatos del HDR, es decir, los formatos como Dolby Vision o HDR10+, por lo que la explicación se aplica también a éstos aunque su sistema de metadatos sea diferente -dinámicos-. EOTF es un acrónimo que significa «función de transferencia electroóptica» y se usa ampliamente en contenido masterizado en UHD bajo las reglas de la UHD Alliance.
La curva EOTF y su extraordinaria importancia en el mundo del HDR
La función de transferencia Perceptual Quantization (PQ) fue diseñada específicamente para maximizar la eficiencia de codificación de luminancia para la visión humana, de ahí el nombre. Como se puede ver a continuación, permite que una señal cubra desde 0.001 hasta 10.000 nits sin banding perceptibles utilizando solo 12 bits. Esta curva se usa para convertir unas señales eléctricas a lo que nuestros ojos ven naturalmente, ópticamente; de ahí, electro-óptico.
Para entender bien lo que es la curva EOTF, debemos empezar por el principio de todo y comprender que no se parece al formato que teníamos hasta el 2015, es decir, el formato SDR. En aquel (por ejemplo los Blu-rays, la TDT, etc.) aunque existían «recomendaciones» de no pasar de los 120 nits de brillo máximo, era una curva relativa. Es decir, podíamos subir más o menos la luminosidad del panel sin afectar a la imagen (salvo que brillaba más), algo que no ocurre en el mundo del HDR.
El formato HDR10 y sus hermanos Dolby Vision, HLG y HDR10+, todos se rigen por una «curva» absoluta llamada PQ EOTF, representada de color amarillo en las fotografías que veréis más abajo. El cómo «sigue» esa curva el televisor, está representado por la línea de color gris. La idea es que la gris se superponga con la amarilla, ya que si la gris queda por encima de la amarilla estaríamos viendo demasiado brillo y si queda por debajo, demasiado oscuro.
Por lo tanto, no podemos subir o bajar la luminosidad del televisor sin afectar a la imagen, ya que éste necesita siempre de tener el máximo de reservas posibles para asignar el brillo en función de la curva. Si lo bajamos, no podrá dar todo el brillo posible a los objetos que así lo requieren (elementos muy pequeños). Y si subimos o bajamos la gamma, nivel de negro o cualquier otro parámetro que altere la luz, se lavará la imagen, algo que ocurre con el ejemplo de la TV de la foto de arriba y que podéis ver en la siguiente (sería la de la derecha):
La curva gris de la fotografía anterior, como veis, está por encima de la amarilla (a su izquierda), es decir demasiado brillante y eso en el mundo real se traslada a lo que ocurre en la fotografía de arriba: que en el ejemplo de la derecha -que es la que tiene la curva gris por encima d ela amarilla-, la imagen se ve quemada. Por lo tanto, siempre que veáis en un análisis esta gráfica, deberíamos ver siempre únicamente la curva amarilla, ya que la gris se encontraría debajo de la misma.
La luminancia y su relación con la curva EOTF
Otra gráfica muy importante es la de luminancia. Ésta está totalmente relacionada con la anterior, ya que si en la EOTF encontramos desvíos, en esta también y viceversa. Es una curva que nos indica en el eje de las X el balance de blancos (que vimos en el primer punto de esta guía), mientras que el de las Y nos indica la luminosidad. De esta forma podemos leer muy cómodamente cuanto brillo nos dará, por ejemplo, un gris 60% (unos 220 nits):
A diferencia de lo que ocurre en SDR, esta gamma es absoluta. Es decir, lo único que variará será el pico máximo de brillo que de el televisor, es decir, el 100 en el eje de las X (desde ahí hasta el 70, que como veis en la gráfica es plana), ya que todos lo demás valores serán siempre los mismos, brille lo que brille el televisor. Si no, significa que ese televisor no está haciendo un seguimiento en HDR adecuado, algo que se suele corregir con una calibración de la misma. Podéis leer mucho más sobre este tipo de curvas HDR pulsando aquí.
En conclusión: el resumen para todos sería que en el mundo del HDR todo viene ya regulado. No podemos tocar ni el brillo, ni la luminosidad, ni la gamma, ni detalle en sombra, nivel de negros, contraste o cualquier otro parámetro que manipule los negros, grises o blancos, ya que con cualquier cambio realizado, adiós a la precisión de la curva EOTF.