El overshoot es uno de los problemas más molestos que afectan a muchos televisores OLED en la actualidad. Se manifiesta como un artefacto visual en escenas con movimiento, especialmente en transiciones rápidas entre colores oscuros y claros. En concreto, el overshoot ocurre cuando el panel responde demasiado rápido al cambio de un píxel, lo que provoca una especie de «halo» o brillo alrededor de los objetos en movimiento. Este fenómeno afecta tanto a los contenidos de alta velocidad, como videojuegos o deportes, como a las películas con escenas de alto contraste.
El overshoot es más común en televisores W-OLED, que utilizan una capa de píxeles blancos para mejorar el brillo. Sin embargo, este diseño introduce ciertos compromisos en la representación del movimiento, lo que ocasiona el overshoot. Esto no solo afecta la nitidez de la imagen, sino que también rompe la inmersión al hacer que las transiciones entre colores no sean naturales.
Los televisores inmunes: LG OLED G4 y QD-OLED
A pesar de que la mayoría de los televisores OLED sufren este problema, existen excepciones que han logrado mitigar o eliminar el overshoot. Un claro ejemplo es la LG OLED G4, el único televisor W-OLED que no sufre de overshoot. Esto se debe a los avances que ha logrado LG en el control preciso de los píxeles, mejorando su capacidad de manejar las transiciones sin que se generen artefactos visuales.
Otra tecnología que ha logrado eliminar este problema por completo son los QD-OLED. Estos televisores utilizan una combinación de Quantum Dots y paneles OLED, lo que les permite ofrecer una experiencia visual superior en términos de color, brillo y nitidez. Los televisores QD-OLED son completamente inmunes al overshoot, lo que los convierte en una excelente opción para quienes buscan evitar este tipo de distorsiones en la imagen.
¿Cómo afecta el overshoot la calidad de imagen?
El overshoot es más visible en escenas con alto contraste, donde un objeto brillante o en movimiento deja un rastro o un halo. Por ejemplo, en una escena nocturna con un coche con faros encendidos, es probable que los televisores con overshoot muestren un brillo residual alrededor de las luces del coche. Este artefacto puede ser muy molesto, especialmente si se trata de contenido donde el movimiento es rápido y constante.
En términos técnicos, el overshoot ocurre cuando los píxeles OLED reciben una señal para cambiar de estado (de encendido a apagado o de un color a otro) y lo hacen de forma excesiva. Esto resulta en una especie de sobreimpulso, donde los píxeles «sobrereaccionan» antes de ajustarse al nivel correcto de brillo. El resultado es una distorsión visual que, aunque dura solo una fracción de segundo, es perceptible y puede arruinar la experiencia de visualización.
A pesar de los esfuerzos de las marcas para mejorar este aspecto mediante actualizaciones de firmware, el overshoot sigue siendo un problema generalizado en muchos modelos OLED actuales.
Las soluciones: LG OLED G4 y la tecnología QD-OLED
Afortunadamente, no todas las pantallas OLED presentan este problema. Como se ha mencionado, la LG OLED G4 es una excepción en el mundo de los televisores W-OLED. Este televisor ha sido diseñado para controlar de manera más precisa la respuesta de los píxeles, lo que evita el sobreimpulso que genera los halos y destellos característicos del overshoot. Esto la convierte en una opción excepcional para quienes buscan una calidad de imagen impecable.
Por otro lado, los televisores QD-OLED, como los modelos de Samsung y Sony, han demostrado ser una alternativa superior, ya que no solo eliminan el overshoot, sino que también mejoran la representación de colores y detalles en las sombras. El uso de Quantum Dots en combinación con OLED les permite ofrecer una calidad de imagen más precisa, sin los compromisos que suelen afectar a los paneles W-OLED.
La tecnología QD-OLED ha logrado superar uno de los mayores inconvenientes de los OLED tradicionales: la gestión de detalles en escenas oscuras y en movimientos rápidos. Gracias a su capacidad para evitar el overshoot, estos televisores proporcionan una experiencia de visualización más fluida y sin distorsiones. Este avance ha sido un paso significativo para mejorar la calidad de imagen en televisores premium.
¿Por qué el overshoot sigue siendo un problema?
El overshoot es una consecuencia directa de la manera en que los paneles OLED manejan las transiciones de color. Aunque el OLED ofrece negros perfectos y un contraste impresionante, el desafío radica en que los píxeles deben cambiar de estado rápidamente para mostrar imágenes en movimiento. En muchos modelos, este cambio ocurre de manera abrupta, lo que provoca el artefacto visual conocido como overshoot.
Aunque el OLED sigue siendo la tecnología favorita para quienes buscan la mejor calidad de imagen en contenido HDR y escenas oscuras, este tipo de problema puede ser un factor decisivo para algunos usuarios. Las opciones como la LG OLED G4 y los QD-OLED son la solución definitiva para aquellos que no quieren comprometer la calidad de imagen debido a este tipo de defectos.
El overshoot sigue siendo un desafío importante en la mayoría de los televisores OLED del mercado. Este artefacto visual afecta la nitidez de las imágenes en movimiento y puede ser un factor decisivo para los espectadores más exigentes. Sin embargo, la LG OLED G4 y los televisores QD-OLED han demostrado que es posible evitar este problema, ofreciendo una experiencia de visualización sin compromisos.
Si te preocupa el overshoot y buscas la mejor calidad de imagen, los modelos QD-OLED y la LG OLED G4 son, sin duda, las mejores opciones para evitar este tipo de artefactos visuales, proporcionando una experiencia más fluida y natural.