Si una cosa funciona, ¿para qué vamos a cambiarla? Esa ha sido la filosofía de Rega con su Brio, un amplificador que es sin duda de los más queridos en el mundo del hi-fi. Sin embargo, los tiempos cambian y la marca británica ha tomado la decisión de darle una vuelta a su icónico modelo con una séptima generación que, por primera vez, tendrá un DAC. Lo has leído bien, el Brio Mk7 ya no es solo analógico.
La presentación, que ha tuvo lugar en el Bristol Hi-Fi Show la semana pasada, ha sido una sorpresa tremenda. Aunque si que es verdad que mucha gente esperaba una actualización sencilla, Rega se ha atrevido con un paso más grande y ha seguido la línea de modelos superiores como el Elicit Mk5 (2022) y el Elex Mk4 (2023), que ya llevaban DACs integrados. La clave aquí está en que la marca ha mantenido su esencia sin disparar el precio, cosa que hace que este Brio Mk7 sea un modelo muy interesante para los que buscan un equipo con lo mejor de los dos mundos.
Por descontado, su ADN sigue intacto. Este nuevo Brio mantiene 50 vatios por canal, la entrada de phono para cápsulas MM y el diseño compacto de siempre. Pero ahora tiene entradas digitales óptica y coaxial, lo que quiere decir que podrás conectar directamente a tu televisor, reproductor de CD o streamer sin tener que comprar un DAC externo. Un cambio que, sin ninguna duda, lo hace mucho más flexible.
Diseño y conectividad: pequeños cambios, gran mejora
El diseño sigue la línea de la marca, pero con algunos retoques. Sigue siendo un amplificador de medio ancho, aunque es un pelín más profundo para acomodar la nueva sección digital. Rega también le ha dado un rediseño a la circutería interna para minimizar cualquier tipo de interferencia entre la parte digital y la analógica, asegurando que el audio siga siendo lo más puro posible. También hay algunos cambios estéticos para que encaje mejor con los demás amplificadores de la gama.
Si hablamos de conectividad, el Brio Mk7 nos da un equilibrio de 10 entre lo clásico y lo moderno. Cuenta con tres entradas RCA analógicas, la mencionada entrada de phono MM, y ahora suma una entrada óptica y una coaxial para fuentes digitales. Además, se mantiene la salida de auriculares de 3,5 mm, algo que muchos agradecerán para sesiones más íntimas.
Un precio que sube, pero sigue siendo competitivo
El precio será de unos 930 euros, lo que lo coloca en un punto intermedio entre el Rega io y el Elek Mk4. Es más caro que el Brio de la anterior generación, pero si tenemos en cuenta la adición del DAC y la mejora en la circutería, es un incremento bastante razonable.
Si te preguntas si merece la pena esta nueva versión, la verdad es que a falta de pruebas detalladas, todo apunta a que sí. Rega no suele dar pasos en falso, y si ha tomado esta decisión de incluir un DAC en su Brio, es porque realmente ha encontrado la forma de hacerlo sin comprometer su sonido característico. Para quienes buscaban un amplificador que mantuviera la esencia analógica con una pizca de modernidad, este Brio Mk7 parece la opción perfecta.
¿El futuro de Rega pasa por los DACs?
Aquí llega la gran pregunta, y es si este movimiento marcará el futuro de los amplificadores de Rega. Durante años, la marca se ha mantenido fiel a los diseños puramente analógicos, pero la llegada del DAC al Brio nos hace intuir que la tendencia digital es inevitable. Si funciona bien en este modelo, muy probablemente veamos más productos de Rega con una filosofía del estilo.
De todas maneras, lo que está claro es que este Brio Mk7 llega en el momento justo. Seis años después de su predecesor y con un mercado cada vez más enfocado a lo digital, Rega ha encontrado el equilibrio perfecto entre tradición e innovación. Ahora solo nos falta esperar a las primeras pruebas para confirmar si, estamos en realidad ante el nuevo referente en amplificadores estéreo de gama media.