Por fin os podemos traer en exclusiva el análisis y review de la LG OLED G4, uno de los televisores más esperados del año. Y es que no es para menos, ya que como veremos en esta revisión, esta G4 esconde muchos más secretos de lo que parece y logra mejorar de forma notable a la ya excelente LG OLED G3 del año pasado. Y es que como iremos viendo, parece el televisor OLED perfecto, ya que prácticamente no tiene ningún fallo reseñable.
Antes de empezar podéis pasaros por nuestras primeras impresiones donde ya os anticipábamos alguna de las cosas que íbamos a ver en este análisis, incluyendo la mejora del mapeo tonal o el impresionante procesamiento de vídeo del nuevo chipset Alpha 11. Y ya sin más introducción, vamos con el análisis de esa LG OLED G4 que por cierto podéis ver en formato vídeo en nuestro canal de Youtube.
Esta LG G4 se presenta hasta en 4 diagonales disponibles: 55, 65 (el modelo analizado aquí, gracias a la cesión de LG España), 77 pulgadas y 83 pulgadas con precios en varias tiendas del mercado que empiezan en los 2399 euros para el modelo de 55 pulgadas hasta los más de 4500 por el de 83 pulgadas. Podéis encontrar todos los detalles y especificaciones técnicas en nuestro comparador web (en nuestro caso, la variante con peana incluida).
LG OLED G4: Especificaciones técnicas
LG OLED G4 | Características |
---|---|
Panel | OLED META 2.0 (panel de 2024) |
Diagonal | 65 pulgadas |
Resolución | 4K UHD (3.840 x 2.160 puntos) |
Alto rango dinámico | HDR10, HLG y Dolby Vision |
Montaje | Fijo o en pared (soporte propio) |
Medidas | 144,1 x 82,6 x 2,4 cm (sin peana) 1441 x 86,5 x 26,3 cm (con peana) |
Peso | 23,9 Kg (sin peana) 28,4 Kg (con peana) |
Conectividad (Vídeo) | 4 x 2.1 (Completos, HDCP 2.3, 40 Gbps) 2 x USB 1 x Ethernet 1 x CI+ |
Conectividad (Audio) | 1 x Salida Óptica 1 x HDMI eARC |
Sonido | 4 woofers de 10W + 2 SW de 10W (60W) |
Compatibilidad/Estándares | ARC/eARC Sintonizador DVB-T2 WiFi 6 Bluetooth 5.1 Apple AirPlay 2 & HomeKit |
Capacidad de reproducción | MPEG4 HEVC VP9 Perfil 2 |
Sistema Operativo | WebOS 24 |
Control | Mando a distancia (retroiluminado) App |
Diseño, mando y sonido
LG continúa con una gran diferenciación entre la gama C (con peana metálica) y la gama G, que este año se divide en dos variantes: la G46 que incluye peana para montarse en el mueble y la gama G45 que viene con un soporte de pared específico -incluido en el precio-. En cualquier caso, es un televisor ideado y diseñado para colgarse, no para montarse sobre una peana, ya que quedará pegada a la pared gracias a la hendidura que tiene en el chasis.
Una vez colgada, si tenemos la salida de los cables en otro lugar que no sea la parte de abajo de la pared, tendremos un problema: el grosor de los cables «choca» con el propio soporte, haciendo que sea casi imposible que ésta quede totalmente pegada a la pared. Por otro lado, el grosor del propio panel es algo mayor que otros años, dado que alberga un disipador térmico, así como unas perforaciones a lo largo de la parte trasera para que salga mejor el calor. Este modelo cuenta con el mismo grosor en todo el panel:
En cuanto al sonido, es bastante simplón aunque ha mejorado respecto al año pasado al incluir este año 4 pequeños altavoces de 10W y otros 2 más para graves, pero lo cierto es que no tiene ningún tipo de extensión ni pegada así que os recomendamos muy encarecidamente utilizar una barra de sonido o un equipo de alta gama a la altura de la propia Smart TV.
Uno de los pocos aspectos sorprendnetes del televisor, es su filtro antirreflejos. El año pasado la marca estrenó el nuevo filtro Vantablack, pero no sabemos si es por contar con una disposición diferente del televisor en nuestro cuarto de pruebas -este año tenemos un ventanal justo delante de la TV- o es que no es tan efectivo como el año anterior, pero lo cierto es que en estas condiciones el panel refleja bastante y se convierte en un espejo.
Pasando a la conectividad, LG continúa siendo una de las Smart TV más completas del mundo, pues volvemos a tener 4 HDMI 2.1 completos de 48 Gbps (soporte 4K@144 y VRR, G-Sync, Freesync Premium y 4K@120 Hz con Dolby Vision). También compatibles con estándares como ARC y eARC (con el que podremos enviar audios HD desde reproductores externos usando el televisor como «puente» haciendo passtrough a una barra o amplificador que soporte audios HD).
LG añadió el año pasado soporte de nuevo para el códec DTS (y también DTS HD MA y DTS:X) y este año continúa en esta G4, eso si, si utilizamos las apps internas de la TV para reproducir algo (usando, por ejemplo, Plex, Emby, etc.) con pistas de audios HD, el televisor automáticamente hará un downsampling al códec básico DTS a 768 kbps, aunque la marca ha confirmado que está trabajando en un firmware para que no lo haga y saque el audio sin tocar también con las apps internas.
HDMI ARC vs HDMI eARC, ¿para qué sirven y qué diferencias tienen?
Por otra parte, el mando a distancia es el mismo que el del año pasado y funciona igual de bien. Cuenta con accesos directos de Disney+ y Rakuten TV, Netflix, Amazon Prime además de dos botones para los dos asistentes de voz: Google Assistant y Alexa. Eso si, echamos de menos que sea retroiluminado.
Por otra parte el micrófono sigue estando integrado en el propio mando. Tanto Alexa como Google Assistant conviven en él, pudiendo elegir el usuario cual de los dos asistentes de voz prefiere usar. Además de tener en la parte superior un botón dedicado al micrófono en si, pudiendo buscar contenido con el asistente incorporado de AI de LG.
WebOS 24: más inteligente que nunca, ahora con chatbot incluído
En el 2021 LG ya viró su sistema hacia un sistema más multitasking, buscando ofrecer una experiencia más completa. Ya en 2022, con webOS 22 el sistema se volvió mucho más rápido que el que encontrábamos en la versión de 2021 y en 2023 se convertía en una bala. Este año seguimos con una experiencia similar, aunque ligeramente más lenta a la hora de responder a la interfaz.
Antaño, si éramos suscriptores de alguna plataforma de streaming, veíamos contenido «recomendado» por el televisor en el menú principal. Pero si no lo éramos…también lo recomendaba. Y no se podía eliminar de ninguna forma. Este año, por fin, podemos deshacernos tanto del banner gigante del menú principal (aunque se quedará con un fondo estático) como de todas las recomendaciones de streaming, quedando solo una pantalla con las apps y nada más.
En cuanto a hardware, LG continúa apostando por un SoC (System On Chip, es decir, el procesador y gráfica del televisor) de fabricación propia basada en cuatro núcleos ARM Cortex A73 (chip O24, una mejora del 022N del año pasado) y 2GB de memoria RAM además de 16GB de memoria interna. LG le ha dado el nombre de Alpha 11, mejorando enormemente la calidad del procesamiento.
Moverse por el sistema aunque es fácil y como decíamos, sigue ofreciendo una experiencia fluida. Al pulsar el botón principal no nos saca las apps si no que nos lleva al Home, lo cierto es que la fluidez es sorprendente, aunque el año pasado era algo más rápido -suponemos que mejorará con futuras actualizaciones-. Podemos entrar y salir de cualquier app en un instante y, al volver a ellas, la reproducción generalmente continuará, potenciando así la multi-tarea.
Por otra parte, este año LG ha mantenido los menús de imagen iguales que en la versión de 2023: categorizarlas dentro de «secciones» (Brillo, Color y Claridad) y a la vez el menú rápido, que saldrá automáticamente al pulsar el botón de ajustes del mando y desde donde podremos modificar aspectos como el brillo, nivel de negro o el color sin entrar en el menú avanzado. La gran novedad este año es la llegada de un chatbot para ayudarnos con las dudas principales del sistema.
En cuanto a su capacidad de instalación de apps, pese a ser un sistema cerrado, es muy buena. No tendremos ningún problema con la instalación de ninguna app, es más las que lo soportan, activarán el soporte HDR/Dolby Vision (si el servicio lo soporta, caso de Disney+) y Dolby Atmos (vía ARC a un amplificador o barra, hablaremos de ello más adelante) y continúa ofreciendo soporte HDR a apps como Youtube. Y por supuesto no echaremos en falta ninguna app, ya que LG cuenta con todas las aplicaciones bajo demanda más importantes del mercado.
Además, el acceso a reproducción de archivos por USB o por red (NAS/DAS) sigue mejorando y cada vez es más estable -aunque limitados a los 100 Mbits de la tarjeta de red integrada (aunque por suerte, solucionable con este adaptador de USB a red gigabit), algo que se repite en todos los fabricantes aunque este año vuelve el soporte DTS (tanto passtrough como decodificación a LPCM) y DTS-HD MA y DTS:X (downmix a DTS si usamos las apps internas).
Cable Matters Adaptador USB Ethernet 1000 Mbps
Calidad de imagen SDR: perfecta a todos los niveles
Empezamos ya con lo más importante de un televisor: su calidad de imagen. Como reza el titular de este apartado, hemos encontrado que en SDR la calidad de imagen es brutal. En parte gracias al salto enorme en procesamiento y escalado (que veremos luego), pero también debido a que nuestra unidad viene perfecta de fábrica. No sabemos si es debido a que es una unidad para prensa, pero viene calibrada de casa. Probablemente las unidades compradas en tienda no vengan tan perfectas.
En el mejor modo de imagen –FILMMAKER– encontramos un balance de blancos ABSOLUTAMENTE clavado a referencia con un AE medio inferior a 1 (por debajo de AE 3 el error es invisible al ojo) así como una medición de saturaciones de color con un error medio de 1.2. La unidad más perfecta que hemos visto de fábrica. Aún así, la calibración mejorará ciertos aspectos de detalle en sombra y otros colores terciarios si contratáis una calibración profesional con sonda.
Este acierto absoluto en cuanto a precisión del balance, gamma (viene clavada en una gamma 2.35, usada en la industria del cine) así como una saturación de color perfecta, hace que los colores de las caras de los personajes y escenarios en general del contenido SDR sean una delicia. Todo se ve como debería, sin estridencias ni colores artificiales, ni más ni menos detalle en sombra, ni más ni menos intensidad de blanco…todo, a referencia.
Por otro lado. En cuanto a uniformidad, ésta es exquisita, tanto al 5% como al 10% de gris. Y un blanco perfecto, sin rastro de tinte alguno. De nuevo, aquí entra en juego la lotería del panel, ya que depende mucho de cada una de las unidades de la LG OLED G4: os puede tocar un panel perfecto u otro que no lo sea, así que ya dependerá de vuestro nivel de tolerancia con este defecto. En la nuestra, perfecta totalmente.
Antes de dejar paso a la sección HDR, comentaros que el detalle en sombra también es perfecto. Ya lo era en la LG OLED G3, pero en esta unidad de la G4 va más allá y no no hay ni rastro de aplastamiento de negro ni en SDR ni en HDR (ni en Dolby Vision, que funciona de lujo), siempre y cuando utilicemos el televisor durante unas horas, para que haga su ciclo de compensación.
Calidad de imagen HDR: ¡BESTIAL!
Pasamos ya al mundo HDR, donde nuestra LG OLED G4 nos entrega unos impresionantes 1400 nits al 10% de ventana y 230 nits a pantalla completa, siendo valores muy similares a los que encontramos en la LG OLED G3, por lo que en este campo no hay mejora…pero aún así, la G4 parece más brillante que la G3, luego veremos por qué.
En cuanto a ABL (Limitador de Brillo Automático) este año continuamos exactamente igual que en la LG OLED G3 y el televisor solo nos ofrece unos 230 nits a pantalla completa, el mismo valor que vimos el año anterior y lejos de los más de 330 que ofrecen los televisores QD-OLED más punteros. Por ello, escenas donde predomine mucho blanco en pantalla se verán algo más apagados y con menos brillo:
La gran novedad de este año es que por fin podemos aconsejar activar el mapeo de tonos dinámico (solo en FILMMAKER). Esta tecnología permite comprimir los detalles más brillantes de una escena para que podamos verlo adaptado al brillo máximo que tiene nuestro televisor (1400 nits), sin perder brillo ni quemar los detalles brillantes ni alterar el resto de la escena. Funciona fenomenalmente bien.
Como os decíamos, el hecho de unir la tecnología OLED junto al HDR hace que la imagen sea absolutamente espectacular y más este año con los casi 1400 nits de brillo en este modo. La tecnología OLED es conocida por todos por su capacidad de encender o apagar los píxeles a nivel indiviual para que, cuando haya una escena oscura o con mucho negro, sea capaz de apagarse por completo, entregando un negro puro.
El negro es el parámetro más importante de la imagen, ya que se usa para medir el contraste: el punto más brillante entre el más oscuro, por tanto…si el negro es 0, cualquier valor que dividamos entre éste nos dará infinito: contraste infinito. Y si, el HDR más que de nits y brillo, tiene más relación con el contraste.
Hasta la fecha, el problema de las OLED eran dos: por un lado que escaseaban en brillo quedándose entorno a 750 nits la mayoría de modelos y cerca de 1000 los más punteros; como decíamos antes ese problema está completamente solucionado. El segundo era el color: al emitir más brillo, los elementos brillantes lógicamente emiten más luz…pero debido al subpíxel blanco terminaban lavando el color. Esto no ocurre en la G4, no al menos en el modo Filmmaker, gracias al uso de la tecnología Meta Multi Booster.
Por otra parte, la G4 si desactivamos el mapeo dinámico, aplicará un mapeo estricto, reteniendo todo el detalle posible hasta más allá de los 8000 nits, nunca mostrándonos clipping ni de el más mínimo detalle. El resultado, a nuestro juicio, es que en películas con masterizadas a muchos nits (4 y 10 mil nits), tiende en algunas escenas a oscurecer demasiado la misma para mostrarnos ese detalle, algo que no ocurre con los mapeadores de tonos de otras marcas.
Aún así y por suerte y con lo bien que funciona el mapeo de tonos dinámico, si lo activamos erradicamos del todo este último problema. Eso si, solo funciona bien en el modo Filmmaker donde viene realmente bien implementado. No es aconsejable usarlo en el resto de modos -ni usar esos modos tampoco-.
Por otra parte, la LG OLED G4 es compatible con otros dos formatos HDR: HLG (usado en retransmisiones de TV) y Dolby Vision (incluyendo la nueva funcionalidad Dolby Vision Precission Detail), aunque se resiste a incorporar el cuarto formato: el HDR10+. LG cuenta con una estrecha relación con Dolby y han conseguido lo que parecía imposible: la implementación de Dolby Vision en su modo de imagen FILMMAKER es impecable; idéntica al HDR pero con la ventaja de los metadatos incorporados en el propio contenido.
Alpha 11: la revolución de la electrónica es real
Otra de las mejoras evidentes en esta LG OLED G4 recae sobre la electrónica. Su salto generacional es muy evidente, aplicando una especie de campo de profundidad a la imagen sin alterarla en exceso -y no desactivable-, algo similar al funcionamiento del chip XR de Sony. Y funciona fenomenalmente bien.
El salto más grande se ha dado en el escalado de imagen, donde todo se ve más nítido todo pero a la vez sin caer en la artificialidad, sin ese punto de difuminado que a veces se acusaba a la firma. Y en contenido con poca resolución es donde saca toda su artillería, viéndose mucho mejor que otros años gracias a la potencia extra de la que dispone este nuevo procesador.
Otra gran ventaja en los modelos de LG desde el 2019 es el Smooth Gradation (Gradación suave), una funcionalidad que aplica un filtro de De-contorno. Esta interesante tecnología analiza los píxeles adyacentes en colores uniformes, si detecta que no son exactamente iguales, aplica una máscara de gradiente progresivo, viendo así un color en un lado que va poco a poco y de forma suave y progresiva, convirtiéndose en la otra tonalidad.
Este filtro ya apareció en el modelo LG OLED C9, siendo unos de los grandes atractivos del fabricante coreano. Realmente se nota, especialmente en contenido comprimido. Eso si, no es recomendable activarlo en Dolby Vision, donde se ve que existe algún tipo de incompatibilidad o problema y puede eliminar detalles en los planos en penumbra.
En el tema del movimiento, esta LG OLED G5 repite tecnología: el famoso Trumotion. Aunque ha ido mejorando con los años, sigue generando algún que otro artefacto, pero la línea de mejora es clara y el nuevo procesador hace que, si no nos pasamos con los valores, sea una auténtica delicia.
Por otro lado, al igual que el año pasado, podemos gestionar la suavidad a nuestro gusto (nosotros somos partidarios de aumentar lo mínimo posible, quizá con ponerlo en Usuario 2-0 sea suficiente eliminar esa brusquedad del movimiento 24p) sin aparecer efecto telenovela por ningún lado. La opción de Movimiento Cinemático es aún mejor, manteniendo el «look» cinematográfico, aunque puede generar un poco de efecto telenovela para los más puristas.
Nos queda otro aspecto vital donde la LG OLED G4 ha mejorado enormemente a otras generaciones: se ha acabado con el problema del overshoot. Este problema derivado de la propia tecnología del panel -WOLED-, hacía que viéramos unos contornos extraños en objetos y caras, así como unos parpadeos en escenas oscuras debido a que el subpíxel blanco se encendía al pasar de negro (apagado) a encendido. Se ha solucionado completamente por hardware, por lo que ya no será más un problema.
Gaming: HDMI 2.1 con capacidad de 144 Hz
Para acabar, aunque no somos muy de juegos, queríamos dedicarle un apartado al Gaming. Si alguien busca la mejor TV del año para jugar, sin duda la LG OLED G4 de LG se lleva el premio sin ninguna duda. Esta generación de OLED mejoran el comportamiento de la G3 del año pasado, con un input lag de 9.8 ms en 60 Hz que baja hasta unos increíbles 5.4 ms si activamos los 120 Hz en la consola…y 4.7 ms en 144 Hz.
La LG OLED G4 continúa siendo uno de los pocos televisores del mercado en ofrecer la capacidad de jugar en 4K 120 Hz y Dolby Vision (por supuesto continúa con soporte completo para 4K a 120 Hz HDR, Croma 4:4:4, G-Sync, Freesync y VRR), aunque en esta versión de firmware no funciona bien y brilla todo más de lo que debería. Además este año se mantiene el excelente Game Bar, el panel dedicado a los jugadores, donde podremos ver los fps del juego, activar o no el VRR/G-Sync/Freesync, etc., haciéndolo más accesible y rápido.
Otras dos mejoras adicionales son la llegada del soporte de 144 Hz de tasa de refresco y quizá lo que es más importante: la tecnología Meta Multi Booster funciona perfectamente en el modo Juego, lo cual hará que el impacto de los juegos en HDR10 –si tenemos bien configurado el HGIG y la consola– sea todo un espectáculo audiovisual.
Conclusiones
Y si has llegado hasta aquí, ¡enhorabuena por la lectura tan densa y larga! hemos intentado tocar todos los parámetros importantes de esta espectacular LG G4. Nos encontramos ante uno de los mejores televisores del año y probablemente de todos los tiempos.
¿Mejoras? bastantes. Básicamente podríamos resumirlo todo como que este modelo es una G3 con todos sus problemas 100% solucionados. Ni tintes, ni problemas de uniformidad -en nuestro análisis al menos-, con la llegada de los 144 Hz nativos para los puertos HDMI 2.1, un mapeo tonal que funciona perfecto, ausencia total de macrobloques que se iluminan y overshoot, un brillo cegador de 1400 nits y un sistema de compensación de color (Multi Meta Booster) que funciona mejor y también en Modo Juego. ¿Qué más se le puede pedir?
Posibles puntos débiles solo tendríamos 3: el primero de ellos es que el panel refleja demasiado en entornos muy iluminados, aunque es algo normal en paneles glossy. Por otro lado, la implementación del Dolby Vision Juego no es correcta, sobreiluminando toda la escena demasiado. Quizá el tercer punto negativo podría ser que el ABL sigue siendo más restrictivo que en la competencia.
En definitiva, nos encontramos ante el televisor más completo del 2024 sin duda alguna y si no es el mejor del año, poco le faltará (lo veremos en el certamen de premios de AVPasión 2024). Un televisor que, esencialmente, no tiene puntos débiles salvo las limitaciones de su propia tecnología. Un televisor que aúna lo mejor de los mundos del cine y de los videojuegos en una sola pieza tecnológica totalmente impresionante. 100% recomendable.