Por fin tenemos listo nuestro análisis pormenorizado de la nueva Panasonic MZ2000, un televisor OLED con panel MLA que quiere competir con las nuevas apuestas del resto de fabricantes para 2023. ¿Será suficiente el aumento de brillo que aportan los nuevos paneles con microlentes? lo vamos a ir desmenuzando en este análisis.
Antes de comenzar, queríamos agradecerle a Panasonic España la cesión de este producto para su análisis. Este modelo se encuentra disponible en 55, 65 y 77 pulgadas con la peculiaridad de que en la diagonal de 77 pulgadas no cuenta con panel MLA, solo las diagonales más pequeñas de 55 y 65 pulgadas cuentan con esta tecnología.
El complejo sistema de altavoces Dolby Atmos y su panel edición profesional hace que, actualmente su precio oficial sea elevado. A fecha de hoy los precios oficiales son de 2999, 3999€ (en 55 y 65 pulgada) y 4999 euros en 77. Además, en nuestro país, es difícil encontrar stock fuera de los distribuidores oficiales, así que no será fácil encontrar unos precios mejores que el oficial.
Panasonic MZ2000: especificaciones técnicas
Panasonic MZ2000 | Características |
---|---|
Panel | OLED MLA (Panel de 2023) |
Diagonal | 65 pulgadas |
Resolución | 4K UHD (3840 x 2160 puntos) |
Alto rango dinámico | Dolby Vision, HDR10, HLG y HDR10+ |
Montaje | Fijo o en pared (VESA 400 x 200) |
Medidas | 1448 x 910 x 350 mm (con el pie) |
Peso | 30.5 Kg (con pie) |
Conectividad (Vídeo) |
2 x HDMI 2.1 (40/48 Gbps) 2x HDMI 2.0 3 x USB |
Conectividad (Audio) | 1 x Salida Óptica 1 x HDMI eARC |
Sonido | 160 W (5.2.2) |
Compatibilidad/Estándares | ARC/eARC Sintonizador DVB-T2 + DVB-S2 WiFi (AC) Bluetooth 8 |
Capacidad de reproducción | MPEG4 HEVC VP9 Perfil 2 |
Sistema Operativo | My Home Screen 8.0 |
Control | Mando a distancia App |
Panasonic MZ2000: Diseño
Panasonic continúa con un diseño muy continuista en su gama 2000, desde que apareciera allá por el 2019 con la espléndida GZ2000. Sin embargo este año (heredado de los modelos de la gama LZ del año pasado), el fabricante japonés ha intentado asociar el minimalismo de sus líneas con una peana de corte circular, que -estéticamente aparte- permite girar el panel en la peana giratoria unos 30-35ª por cada lado. Como decimos, puede resultar útil, pero estéticamente era mejor elección la peana rectangular de iteraciones anteriores.
En cuanto a la pantalla en si, la Panasonic MZ2000 cuenta con uno grosor del marco igual que los del resto de fabricantes (1.1 mm), la barra de sonido -realmente bien integrada- en la parte inferior haciendo parecer la TV un poco más grande de lo que realmente es. La sorpresa viene por detrás: el panel adquiere un grosor de más del doble en su parte superior respecto a otros fabricantes, ya que tiene que albergar el sistema de altavoces upifiring Dolby Atmos y también la «plancha» que actúa de disipación entre el panel y el chasis.
Siguiendo con el diseño, en la parte inferior encontraremos la barra de sonido firmada por Technics, compuesta por tres altavoces/woofers que actuarán como un sistema 3.0 real (canal izquierdo, central y derecho) que pueden verse si uno se acerca a la barra y mira atentamente.
Volviendo a la parte trasera, se pueden apreciar hasta 3 rejillas de ventilación para expulsar el calor que genera este modelo (no son ventiladores) para que el televisor aguante la temperatura de trabajo, cosa que se repite también en la parte media y en la inferior. Sin este diseño, probablemente Panasonic no hubiera podido crear un modelo OLED que llegue a ofrecer tanta luminosidad y un pico de brillo de casi 1600 nits.
Otro punto a tener en cuenta es el excelente sistema de sonido del televisor, con un increíble sistema 5.2.2 de 160W integrado tanto en la barra de sonido frontal, como en los diferentes altavoces repartidos por todo el chasis. Este año continúa con los altavoces laterales para mejorar la inmersión de los audios con posicionamiento de objetos como Dolby Atmos.
Para acabar, la firma japonesa ha mejorado -aun más- el disipador térmico y su composición, consiguiendo una mejor eficiencia y transmisión de calor por lo que en este modelo es todavía más complicado ver retenciones o incluso quemados a largo plazo. Se trata de uno de los televisores más seguros del mundo a este respecto.
Conectividad y estándares soportados
En este caso no hemos encontrado ninguna diferencia respecto al año pasado, ya que la Panasonic MZ2000 cuenta con 2 puertos HDMI 2.1 (48 Gbps) completos con soporte 4K a 120 Hz, VRR, G-Sync y Freesync) y 2 HDMI 2.0.
Uno de los puertos HDMI es el que soporta eARC-, también encontramos la la salida de auriculares/subwoofer, una toma USB 3.0, la entrada de satélite (DVB-S2, por lo que podremos sintonizar y ver canales 4K HLG FTA) y de antena (TDT/DVB-T2) y el puerto de red (10/100), todos ellos están en la parte inferior, cosa ideal ya que al colgarla no nos molestarán los cabezales de los propios cables.
En el lateral encontramos los puertos restantes (un puerto HDMI 2.1, dos puertos USB 2.0, el RCA compuesto y el estéreo así como la entrada óptica). Los nuevos puertos HDMI 2.1, por supuesto, siguen siendo compatibles con el estándar de la UHD Alliance, esto es, resolución 4K, soporte mínimo para HDR10 (aunque también soporta HLG y Dolby Vision y HDR10+, es decir que no tendremos ningún problema con ningún formato HDR), espacio de color BT.2020 y 10 bits de profundidad de color.
My Home Screen 8.0 y mando a distancia
En este 2023 Panasonic ha vuelto a utilizar el mismo mando a distancia que en su modelo del año pasado, la JZ2000. El mando pesa mucho y está enteramente hecho de plástico además de no estar retroiluminado. ¿Mejoras respecto al año pasado? ninguna, es exactamente el mismo mando a distancia.
Aún así, el mando a distancia cumple perfectamente su cometido, es cómodo, tiene botones para casi cualquier función que nos imaginemos además de que el rango del IR es bestial, confundiéndose sobre si realmente es un IR o funciona mediante Bluetooth, ya que podemos estar apuntando al otro lado del salón que la TV funcionará perfectamente.
Panasonic sigue teniendo el micrófono en el propio mando, dando soporte así a los populares asistentes Google Assistant ni Alexa. Pasando al tema de la domótica y la integración con la TV, tampoco Panasonic ofrece apenas ningún estándar para poder integrarla en frontends como Home Assistant y similares. Es una TV diseñada por y para fanáticos de la calidad de imagen y juegos quedando la apertura de protocolos y de Sistema Operativo, en un claro segundo plano.
Por otra parte, Panasonic continúa apostando por su propia versión de Smart TV: My Home Screen, ahora en su versión 8.0. Recordemos que este extraño sistema proviene de un fork de Firefox OS que Panasonic ha continuado desarrollando por su parte. Como es costumbre en la mayoría de fabricantes, esta versión solo está disponible para modelos de 2023, no siendo actualizables ninguna otra gama de años anteriores.
En cuanto al sistema operativo en si, la verdad es que aunque sea muy cerrado y tengamos pocas apps, funciona todo muy bien: es muy rápido, es muy estable y reacciona todo al momento, pudiendo entrar y salir de las apps sin cuelgues ni lag. Además de las apps típicas de contenido bajo demanda (Netflix, Amazon Prime y Youtube), El año pasado apostó por Atres Player y RTVE, aunque a la vez encontramos varios sistemas en las diferentes Smart TV de la firma japonesa.
Por otra parte, My Home Screen sigue siendo bastante limitado ya que no hay apenas posibilidad de instalar más apps: la gran ausente sigue siendo HBO MAX así como otras grandes como Movistar+, etc. Si queréis usar la TV como reproductor de películas, podéis ir olvidándoos ya que no soporta el codec DTS, con lo cual una inmensa cantidad de películas y series directamente no os la reproducirá o lo hará sin sonido.
Tenemos un botón Home donde accederemos al «carrusel» principal de apps, desde las podremos ordenar, lanzar, configurar, ocultar, ponerles un PIN, etc., fácil y sencillo. Subiendo o bajando iremos cambiando entre diferentes «filas« que muestran contenido ya listo para entrar. También tenemos un botón del mando que podemos asociar a cualquier app del sistema, siendo muy útil ya que hay gente que no consumirá Amazon Prime pero si, por ejemplo, DAZN. Pues ningún problema, se asocia la app al botón y listo.
Otra gran idea y ejemplo de flexibilidad de My Home Screen es el botón Picture: un botón que nos permite cambiar rápidamente entre distintos modos de imagen. Y lo mejor es que es 100% personalizable, pudiendo dejar por ejemplo solo los modos Normal, Cine y Juego y así conmutar entre ellos usando el botón del mando, sin tener que entrar en el menú de ajustes de imagen ni nada por el estilo.
Calidad de imagen: más de lo mismo pero con más brillo
Si, os adelantamos que es la OLED más brillante de todo 2023...pero no por ello la mejor, aunque ya os hablaremos de ello en el apartado del HDR. De momento lo que si os podemos decir es que, sin ser para nada un mal televisor, es prácticamente un calco de la LZ2000 pero más brillante.
En términos de escalado y procesado, Panasonic mantiene el nivel del año pasado con su filtro de lo más interesante llamado Remasterizar resolución. Su funcionamiento es, esencialmente, muy similar al Recreación Realista de Sony. Perfila la imagen sin acentuar el ruido de la nitidez -especialmente en contenido de baja calidad- y sin parecer artificial. Y lo consigue con creces, aunque en algunos planos puede dar la sensación de demasiado procesado, incluso con el valor puesto en mínimo.
Panasonic sigue teniendo un gran talón de aquiles en el procesamiento del banding, ya que no cuenta con filtro de Smooth Gradation, que hace que esas diferentes «bandas» en colores uniformes desaparezcan sin perder prácticamente detalle. El resto de marcas, incluso sin este filtro, muestran un banding mucho menos acentuado que en el modelo nipón, especialmente en fuentes comprimidas donde es alarmante.
Sin embargo si usamos fuentes de alta calidad, como contenido HDR10 y Dolby Vision, es donde la TV muestra absolutamente todo su potencial. Las imágenes en HDR son realmente impactantes, especialmente en Dolby Vision, donde el fabricante japonés es sin duda el que mejor ha sabido implementar esta tecnología: sencillamente se ve igual de brillante que el HDR pero con las ventajas del mapeo dinámico que ofrece la solución de Dolby.
En cuanto a brillo, como bien hemos dicho antes , es el televisor OLED con más nits: casi 1500 al 10% en el modo FILMMAKER. Y además no tenemos de qué preocuparnos con el excelente disipador térmico implementado por la firma nipona. Sin embargo, aunque ofrezca un descomunal nivel de nits, lo hace a costa de lavar el color…y es bastante evidente, como iremos viendo en esta sección.
Eso se traduce en una imagen espectacular en HDR. La dinámica y el contraste son absolutamente bestiales si sumamos una capacidad lumínica de los casi 1500 nits y los negros perfectos de la tecnología OLED hacen que la imagen se salga de la pantalla con fuentes de buena calidad.
Para 4000 nits, el cambio en la respuesta de la curva de Panasonic es un poco agresiva, empezando el roll-off demasiado pronto para preservar todo el detalle posible, sin embargo lo hace a expensas del APL. Esto puede corregirse al gusto del usuario usando las herramientas del Dynamic HDR que actúa sobre los detalles de las altas luces para no quemarlas.
No obstante, como decíamos antes, a más brillo más lavado de color podemos observar si la comparamos con los televisores QD-OLED o bien con modelos OLED MLA con Brightness Booster Max, como la LG OLED G3. Si ponemos una imagen comparativa contra un televisor con esta tecnología o que sea QD-OLED, podemos apreciar rápidamente las diferencias.
En cuanto a balance de blancos y colorimetría, al menos nuestra unidad venía con un claro tinte rojizo en todo el balance, aunque en los puntos más importantes de éste no superaba el AE de 2, que subía a errores de 4-5 en contenido HDR y ya eran visibles, lamentablemente.
En cuanto al color, las saturaciones de éstos vienen realmente precisas, todos por debajo del umbral visible al contrario que ocurría en el balance de blancos. Además, Panasonic es, con diferencia, la marca que mejores controles de calibración profesional ofrece, por lo que tras una calibración profesional con sonda, el televisor se ha quedado como un monitor profesional de masterizado.
Los casi 1500 nits, sin embargo, además de lavar ya claramente el color en muchas escenas en contenido HDR y Dolby Vision, añaden un problema adicional: aparece aún más banding/posterización en escenas con objetos muy brillantes. Aunque este año además también hemos podido apreciarlo en fondos con color uniforme, de forma clara y sin dificultades, algo que arrastra la marca japonesa año tras año.
Por otro lado, la presentación de Dolby Vision es exquisita como ya hemos dicho. En su modo Dolby Vision Oscuro (el más correcto), la imagen es absolutamente perfecta, manteniendo todos los detalles de las altas luces y presentando una imagen muy cinematográfica. Es, simplemente, la mejor implementación que hay de Dolby Vision en un televisor, ya que no tiene contras y todo serían puntos positivos: mismo brillo que en HDR pero con los metadatos dinámicos del sistema de Dolby.
Para acabar, la TV presenta al usuario miles de opciones de configuración al gusto: reductores de ruido, nitidez, tipos de curva EOTF, etc. Aquí hemos notado que todo funciona mucho más fino y mejor que otras marcas: el reductor de ruido al mínimo o en automático quita muy poco ruido y sin afectar a la nitidez, la nitidez podemos subirla pero no será demasiado evidente, etc. y así con todo.
Todo funciona mucho más en detalle que en el resto de marcas. En cuanto al problema del auto-dimming que se da en otras TV al detectar logos fijos, no hemos sido capaces de notarlo en la MZ2000. Ya sea con 1 o con 4 logos en pantalla fijos, la TV no baja nunca la luminosidad, o si lo hace es tan mínimo que no somos capaces de apreciarlo.
Gaming: más y mejor que el año pasado
Hace tiempo que las TV ya no solo se usan solo para ver la TV. Tradicionalmente, Panasonic nunca ha diseñado sus televisores enfocándolos en el sector de gaming, pero lo cierto es que ha sido el propio mercado el que le ha obligado a hacerlo si no quería quedarse fuera del reparto del pastel.
Ya el año pasado Panasonic dotó a toda su gama LZ de 2 puertos HDMI 2.1 (y todo lo que conlleva para los gamers), como la posibilidad adicional de mandar todo el flujo de datos sin comprimir el croma, 4K a 120 Hz, VRR, G-Sync, Freesync, eARC, etc) y lógicamente repite en esta gama MZ2000.
Además, este año se han incorporado grandes avances a este campo: la gamebar (ver foto superior) desde donde acceder rápidamente a cualquier ajuste, además de que ahora es algo más flexible y permite, como novedad, acceder al nuevo modo True Game además de poder calibrarse profesionalmente con sonda y cargar una LUT.
La Panasonic MZ2000 como os decíamos, cuenta con soporte completo para G-Sync, Freesync y VRR estándar, además su input lag se mantiene intacto al año pasado (para fuentes 1080p, 4K y 4K HDR a 60 Hz), en unos más que notables 14.8 ms, una cifra realmente buena y que, probablemente, si no eres jugador profesional te sea más que suficiente. Además esa cifra baja a unos estratosféricos 7.8 ms si usamos el modo 4K a 120 Hz.
Conclusiones: la potencia sin control no sirve de nada
Si llegaste hasta aquí…¡enhorabuena! La review es extensa y detallada, por lo que te doy las gracias por aguantar hasta el final. En cuanto a las conclusiones, nos dejan un sabor agridulce, ya que no dejamos de ver una Panasonic LZ2000 con 1500 nits. Nada más y nada menos.
Como decimos, una LZ2000s con más brillo y nits y menor ABL no es un mal televisor, pero dadas las apuestas de sus rivales, se nos antoja un poco corta. Especialmente si la comparamos con la tecnología QD-OLED o incluso con las propuestas con paneles MLA de LG, que han sabido emular mucho mejor el color puro de las Quantum Dots.
Sus puntos más fuertes serían su altísima calidad (UHD, servicios 4K en streaming) y especialmente en HDR: tanto su variante sin metadatos -HDR10- como sus versiones con metadatos dinámicos: Dolby Vision y HDR10+. Especialmente en Dolby Vision, el buen mapeo de tonos (algo agresivo a nuestro gusto), el aumento de brillo y la reducción de ABL así como la posibilidad añadida este año de calibrar profesionalmente el modo Juego y el nuevo modo True Game.
¿Puntos negativos? la escasa innovación respecto al año pasado, las escenas HDR con mucho brillo pero cuyo color se lava al no haber implementado una tecnología similar al Brightness Booster Max y especialmente el banding tan grave que se aprecia en muchas escenas, fruto en parte por no contar con un filtro de Smooth Gradation que se lleva varios años pidiendo. Además, como algunas otras marcas, no es de recibo tener solo 2 puertos HDMI 2.1 en casi el año 2024.
Como conclusión final, nos encontramos ante un televisor OLED MLA excepcional, pero que se queda por detrás de la competencia este año, algo que sorprende por ser la marca que es y, especialmente, por ser un televisor excepcionalmente caro.