Por fin podemos traeros la review de la nueva Samsung QN95B Neo QLED, la nueva Smart TV de Samsung con tecnología Mini LED con muchas mejoras respecto al modelo del año pasado. Como es costumbre, hemos estado unos 20 días con este nuevo televisor para poder sacarle hasta la última gota de rendimiento, problemas, cosas buenas y cosas malas. Y hasta aquí. ¿Nos acompañas?
El año pasado ya encontramos un muy buen salto con la excelente Samsung QN95A, también con tecnología Mini LED, centrándose especialmente en aspectos como mejora del blooming, más brillo, mejores ángulos de visión, etc. ¿Entonces, qué novedades encontramos en el modelo de este año?
Antes de comenzar con el análisis en si, agradecer desde AVPasión a Samsung España por la cesión del material para su análisis y testeo. Esta Q95NB de Samsung se presenta en hasta 4 diagonales diferentes: 55 (este es el modelo cedido por la marca, 65, 75 y una nueva variante de 85 pulgadas, a unos precios de 2199, 2849, 3659 y 4869 euros respectivamente.
Samsung Q95NB: especificaciones técnicas
Samsung Q95NA | Características |
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Panel | LCD LED (Neo QLED, Panel 2022 MiniLED) |
Diagonal | 55 pulgadas |
Resolución | 4K UHD (3.840 x 2.160 puntos) |
Alto rango dinámico | HDR10, HLG y HDR10+ |
Montaje | Fijo o en pared (VESA 400 x 200) |
Medidas | 1228.0 x 707.3 x 17.4 mm (sin el pie) 1228.0 x 777.3 x 298.4 mm (con el pie) |
Peso | 16,8/21 Kg (sin/con pie) |
Conectividad (Vídeo) | 4 x HDMI 2.1 (40 Gbps) 3 x USB 1 x Ethernet 1 x CI+ |
Conectividad (Audio) | 1 x Salida Óptica 1 x HDMI eARC |
Sonido | 4.2.2 OTS 70W |
Compatibilidad/Estándares | ARC/eARC Sintonizador DVB-T2 + DVB-S2 WiFi (AC) Bluetooth 5.2 One Connect Acoplable |
Capacidad de reproducción | MPEG4 HEVC VP9 Perfil 2 |
Sistema Operativo | Tizen OS 7.0 |
Control | Mando a distancia solar App |
Diseño y sonido
El diseño de esta Samsung Q95NB es de los mejores que hemos visto, especialmente gracias a su pie metálico estéticamente precioso y no demasiado ancho -lo cual favorece su instalación en casi cualquier mueble o escritorio– y dejando un hueco lo suficientemente alto como para poder instalar una buena barra de sonido.
Eso si, con la llegada del sistema FALD a los flagships de Samsung QLED desde el año 2018 en adelante, el panel engordó considerablemente ya que debe albergar todo el sistema de LEDs y zonas independientes que se encienden y apagan (120). Todo eso ocupa espacio. Para compensar, Samsung alberga toda la electrónica en un equipo externo: el famoso One Connect, del cual más adelante os hablaremos.
Por otra parte, el diseño del pie es realmente precioso y sus materiales de construcción en aluminio cepillado, a su altura. Además este año optan por tonos metalizados en lugar de tonos negros, lo que favorece mucho a la elegancia del conjunto.
En cuanto al diseño acústico del televisor, éste consta de un sistema de 4.2.2 de 70W (una mejora desde los 60W del año pasado) y con una tecnología llamada Object Tracking Sound+, con varios altavoces en la parte trasera del chasis, algo que hace que el sonido gane en graves, aunque hemos detectado bastante distorsión en películas y series con mucho grave, como por ejemplo Stranger Things Temporada 4.
El llamado Object Tracking Sound+, que intenta emular un sistema de posicionamiento de canales y objetos, intentando que el televisor emita sonido desde diferentes partes de éste a través de los 4.2.2 canales y los 70W de potencia que promociona la marca en su web. La verdad es que funciona bastante bien, aunque no se «posicionan» los objetos tan bien como pensábamos, pero si suenan los diferentes matices algo más separados.
Para acabar, tenemos la posibilidad de usar ese conjunto de altavoces integrados en el televisor con nuestra barra de sonido de Samsung, para potenciar y mejorar más el sonido mediante el sistema que la propia marca llama Q-Symphony, pudiendo así beneficiarnos de varias ventajas más como por ejemplo una mayor extensión de graves gracias al subwoofer de la barra de sonido.
Por otra parte, este año la QN95B es capaz de decodificar Dolby Atmos (con pérdida), es decir, el perfil basado en DD+ que usan todos los servicios bajo demanda así. También decodifica Dolby Digital y Dolby TrueHD (pero no de DTS, DTS HD MA ni DTS:X) pero siempre y cuando se use un reproductor externo conectado al puerto HDMI eARC de la Q95NB y ésta, a su vez, a una barra de sonido o amplificador compatibles, pero no a través de apps internas por lo que no oiremos nada si reproducimos archivos con otros codecs como el DTS.
Conectividad: 4 puertos HDMI 2.1 para los más jugones
En temas de conectividad, Samsung continúa ofreciendo cuatro puertos HDMI 2.1 contando con un ancho de banda efectivo de 40 Gbps. Con ellos, la Samsung QN95B ofrece soporte a las últimas tecnologías para los más jugones: ALLM (cambio a Modo Juego de forma automática), 4K@120 Hz, croma 444 completo y a 10 bits, con soporte para Freesync Premium, VRR HDMI y también soporte completo para eARC (con el que podremos enviar audios HD desde reproductores externos).
El incorporar una toma de sonido eARC está muy bien pero será especialmente útil para aquellos que tengan una barra de sonido -compatible- con una sola toma HDMI, ya que si tuviera dos (o un amplificador, por ejemplo), podemos conectarlo todo a éste y de ahí a la TV, usando el amplificador para el sonido y la TV para la imagen, no teniendo ningún sentido usar la TV como «puente» entre ambos dispositivos. Es decir: es una funcionalidad que solo podrá aprovechar un tipo de perfil de gente muy concreta.
Como os decíamos al inicio de la review, la QN95B externaliza todos los conectores -incluyendo el de energía- en una caja externa: el famoso One Connect. Toda la electrónica del televisor va integrado en una «caja» aparte, desde los puertos HDMI, , antenas hasta la propia alimentación.
Tan solo necesitamos conectar un diminuto cable -además transparente, o casi- desde éste hasta el televisor y listo. Ya podemos conectar todo lo que queramos al One Connect. Es el sistema perfecto para los usuarios que cuelguen el televisor en la pared, muy superior a cualquier otra solución presentada hasta el momento. Además, también podéis anclarlo en el propio televisor, como es nuestro caso por ejemplo
Nuevo Tizen: un gran paso atrás
Siempre os hemos comentado que el sistema operativo de Samsung, llamado Tizen, era de lo mejor del mercado junto a otras opciones como Google TV por ejemplo. Tanto Samsung como LG, las dos grandes marcas coreanas, siguen apostando por tener el control total sobre su sistema operativo y la cosa iba bien…hasta este año.
El nuevo sistema Tizen es tremendamente lento, lleno de publicidad e intrusismo por todos lados, nada personalizable y además realmente caótico (cuesta encontrar prácticamente cualquier cosa que una persona normal queira hacer). La parte positiva, es que cuenta con soporte para casi cualquier tipo de aplicación bajo demanda.
En cuanto a hardware interno, a diferencia de los dispositivos con Android, no podemos saber exactamente que tipo de SOC (System On Chip, es decir, el procesador y gráfica del televisor) monta. Lo que si sabemos es que en términos de calidad de imagen –el coprocesador encargado del procesamiento- es el Neural Quantum Processor , un potente procesador que puede ir aprendiendo a través de una base de datos de Samsung, modificando así los parámetros más importantes de la imagen.
En cuanto al uso general del sistema, como os comentábamos, es tremendamente decepcionante: cuelgues, apps que te sacan al menú principal, lentitud del sistema -especialmente al encender el televisor-, publicidad por todos sitios (al obligarte a ir al menú principal obligatoriamente) y un caos a la hora de encontrar ciertas opciones. En resumen: es lo peor del televisor.
Llegando al apartado de apps, como os decíamos, Tizen es una plataforma donde no nos va a faltar de nada. En éste vamos a encontrar absolutamente todas: desde Disney+, la nueva app de HBO Max, Vodafone TV, Spotify, M+, Orange TV, Netflix, Amazon Prime y un larguísimo etétera. Además todas ellas cuentan con soporte HDR/HDR10+ (si el servicio lo soporta, caso de Disney+, Netflix o Amazon Prime) y Dolby Atmos (vía ARC a un amplificador o barra, hablaremos de ello más adelante) y continúa ofreciendo soporte HDR a apps como Youtube
Mando a distancia: un saludo al sol
El mando a distancia de Samsung se presenta de nuevo en este 2022 de forma minimalista y cuidando al máximo el diseño…y pensando en el medio ambiente, ya que puede recargarse con la luz del sol. Está fabricado en aluminio cepillado de muy buena calidad y, como decimos, es extremadamente moderno y futurista. Además, cuenta con cuatro botones de acceso directo a apps Bajo demanda: Netflix, Amazon Prime, Disney+ y Samsung TV Plus (una especie de servicio de IPTV gratuito de canales de todo el mundo).
Por otra parte, veréis que al conectar un dispositivo HDMI el televisor se pone a identificarlo y nos permitirá manejarlo…incluso aunque no disponga de CEC, lo cual es una auténtica maravilla. Al igual que ocurre con webOS, los dispositivos se pueden renombrar a mano desde el panel de ajustes para identificarlos más rápidamente.
Antes os hablábamos de Alexa y Google Assistant. El problema es que al no ser un dispositivo con Android TV (de Google) las funciones de control del televisor están muy limitadas y no podremos encenderlas con nuestra voz. Y Bixby, por otra parte, solo funciona para controles sencillos como cambiar de entrada o de canal. Este año se le añade compatibilidad con Alexa también.
Calidad de imagen: perfeccionando los mini LED
Llegamos por fin al punto dulce de la review: la calidad de imagen. ¿Cuántos nits tiene? ¿la imagen en HDR es realmente tan brillante? ¿que tal la colometría?. Vamos por partes. La QLED QN95B, como todos los televisores que no sean OLED, monta un panel LCD y en este caso VA. Los paneles VA son tradicionalmente mejores en términos de contraste.
Además de eso, el panel es FALD -o Full Array Local Dimming-, una tecnología de iluminación de píxeles por zonas. Es decir, cada conjunto de píxeles se enciende y apagara de forma autónoma en función de las necesidades, imitando así al funcionamiento de la tecnología OLED y consiguiendo unos negros perfectos (y contraste) cuando una zona de apaga. ¿El problema? que un televisor 4K cuenta con más de 8 millones 300 mil píxeles y la QN95b, en su versión de 55″, cuenta con 576 zonas , dándonos un ratio de 1 zona para cada 14400 píxeles. ¿Será suficiente?
El sistema FALD además, es caro de fabricar y también de gestionar, necesitando siempre un equilibrio entre nivel de negro y detalle en las sombras, ya que muchísimas imágenes no son oscuras al 100% si no que están en penumbra, por lo que la zona no puede apagarse completamente y tiene que iluminarse -tenuemente-.
Gracias a que los MiniLED, unido a lo que Samsung denomina tecnología Quantum Matrix (una estructura encargada de modular la luz para evitar blooming) hace que consiga casi tener un muy buen detalle en sombra a la vez que mantiene un nivel de negro muy profundo.
Por otra parte, la QN95B cuenta con una capa adicional para mejorar los pobres ángulos de visión de los paneles VA, lo que Samsung denomina Ultra Viewing Angle. El sistema funciona como una guía óptica para los píxeles, dispersando la luz de forma más uniforme radiando hacia los lados, no solo de frente, consiguiendo así no lavar el nivel de negro o los colores hasta pasado bastante ángulo de visualización.
Por otro lado, cuenta sin lugar a dudas con el mejor filtro antirreflejos del mercado sin ninguna duda, un auténtico agujero negro que se traga toda la luz, haciendo que este panel se pueda disfrutar plenamente en una habitación extremadamente iluminada sin que se refleje prácticamente nada en el panel. Una auténtica pasada en este aspecto.
En cuanto al pico de nits en HDR, nuestra QN95B ronda los 2100-2200 nits en ventana al 10% y calibrada profesionalmente con sonda (D65), lo cual es sorprendente alto y la verdad es que hace que se pueda disfrutar del efecto HDR incluso de día. Pero aquí hay un problema realmente preocupante.
Al igual que ha ocurrido en otros modelos de Samsung, como la S95B, la QN95B solo entrega ese brillo en test de ventana al 10% de superficie, en cuanto ponemos un test al 9 o al 11%, el brillo baja a unos más realistas 1400-1500 nits. Algo que muchos medios han tildado de «trampas» queriendo adulterar el brillo real que el televisor es capaz de dar, al detectar patrones sintéticos. Si medimos el 100% de ventana, arroja un sorprendente valor de más de 600 nits, ya que en las LED el ABL es realmente muy poco restrictivo.
Respecto al blooming, pese a no tener aquí ya la fantástica QN95A que analizamos en su día, nos resulta extraño recordar que, si bien la QN95B maneja muy bien el blooming y bastante mejor que la Sony X95K, parece que es más evidente que en el modelo del año anterior. Probablemente sea debido a que Samsung este año ha decidido eliminar del algoritmo ese sistema que hacía que al detectar elementos pequeños y muy brillantes, bajara la luminosidad para evitar blooming (y también menor impacto HDR).
Curiosamente hemos encontrado otro bug con este modelo: el local dimming se vuelve loco y deja de funcionar en una gran selección de escenas, con todo tipo de contenido y formatos. Nos ha ocurrido en The Witcher, Stranger Things, etc., aunque también en formato físico. Sencillamente, el Local Dimming no funciona y el nivel de negro es paupérrimo, aunque por suerte solo nos ha pasado en pocas ocasiones.
El seguimiento de la curva PQ EOTF adolece del mismo problema que os comentábamos antes, pero en este modelo ni si quiera el modo Filmmaker mide correctamente, sobre-brillando más de lo que debería en toda la curva. Así, la curva (gris) del televisor siempre está por encima de la amarilla (referencia) haciendo que todo sea mucho más brillante de lo que debería.
Un problema que presentaba el modelo del año anterior, la QN95A, era que casi todas las unidades tenían DSE (efecto de pantalla sucia) y algo de ghosting. Por suerte este problema ha sido solucionado en su totalidad -al menos en nuestra unidad- en el modelo de este año, ya que nuestra QN95B no tiene ninguno de los dos problemas citados.
Otro aspecto muy impactante en este televisor es su riqueza cromática. Por dos motivos: uno es que al contar con Quantum Dots en lugar de un filtro RGB convencional, se gana pureza y amplitud en la cobertura. Y en segundo lugar que al no tener subpíxeles blancos -como si tienen los televisores OLED-, todo el haz de luz del HDR se muestra en los tres colores primarios RGB (en las OLED hasta 350 nits también, a partir de ahí es solo luz blanca, lavando los colores). No son pocas escenas donde podemos notar esa mejoría.
Hablando de color, al igual que ocurre con otros televisores , el tener tantísimos nits puede ser contraproducente en algunas escenas con alto rango dinámico, ya que en las luces hemos observado posterización y/o un ligero banding. Este último podría corregirse con un filtro de Gradación Suave, pero lamentablemente la QN95B continúa sin contar con un filtro de este tipo, algo que también afectará a material comprimido de mala calidad -streaming esecencialmente-.
Otro tema candente en las comunidades de aficionados y que nosotros también echamos muy en falta es la ausencia un formato de metadatos dinámico con el que tengamos contenido: Dolby Vision. Si, la QN95A cuenta con soporte de HDR10+, pero el contenido disponible en este formato es bastante menor que en Dolby Vision y muy difícil de encontrar reproductores o aplicaciones bajo demanda compatibles con éste. Y aún contando con todo, el formato presentado por Dolby es sencillamente superior en prácticamente todos los aspectos.
Para acabar en este apartado de color, también comentar que Samsung sigue sin hacer funcionar de forma correcta el conmutador entre los espacios de color BT2020 y DCI-P3, originando una serie de problemas si no lo cambiamos a mano, pues veremos algún contenido (poco, por suerte) demasiado poco saturado si seleccionamos el DCI-P3 en contenido BT2020 y viceversa.
No podíamos terminar la review sin hablaros del Ultra Viewing Angle.. Podemos ver la TV de lado perfectamente y el nivel de negro, contraste y colometría apenas se ve afectado, más o menos manteniendo el tipo como si fuera un panel IPS. Aún así, lógicamente, en este punto tampoco puede rivalizar con los casi perfectos ángulos de visión de otras tecnologías como la OLED, pero consideramos que es más que suficiente para acabar con aquello de que «para ver un televisor VA hay que sentarse justo en el centro«, desde luego.
Donde si que peca algo el Ultra Viewing Angle es en escenas muy muy brillantes, en modo HDR y viéndola de lado, ya que ahí el televisor nos entregará toda su capacidad lumínica y al verlo de lado podremos ver algunos defectos de la tecnología FALD, tales como blooming, halos, floración y demás defectos en objetivos brillantes, además de un contraste regular que hace que la imagen pierda mucho contraste. Aún así es mucho menos acusado que en el año anterior, pudiendo disfrutarse desde ángulos más abiertos sin ningún problema.
En resumen: aunque el pico de nits es extremadamente impactante y el nivel de negro realmente bueno, en nuestra opinión, es más impactante incluso en HDR ver un televisor OLED con un nivel de negro perfecto y menos brillo que al revés. Aún así este año se queda muy cerca y es posible que a alguien le guste más el menor ABL y mayor luminosidad del panel QLED que el OLED. Aún así remarcamos que en nuestra opinión, el trabajo del local dimming era superior en el modelo del 2021.
Neural Quantum Processor 4K: mejoras importantes
Si el año pasado ya os comentamos que el procesamiento en Samsung había mejorado bastante, este año han añadido un poco más de nivel a su ya excelente procesador. Lo cierto es que continúa algo por debajo que la competencia de gama alta (especialmente Panasonic y Sony) pero cada vez se acorta más la diferencia.
El escalado es excepcionalmente bueno, este año tanto con fuentes 1080p como fuentes por debajo de esta resolución, especialmente si subimos uno o dos puntos la nitidez. El procesador hace un gran trabajo, sacando detalle y nitidez pero sin parecer artificial. A su vez, la imagen es limpia y sin exceso de ruido y macrobloques pero sin quitar detalle fino de la imagen
Aunque hemos notado una mejora en el tema del banding de color, nuevamente y por sexto año consecutivo, Samsung no cuenta con un filtro Smooth Gradation (Gradación suave), una funcionalidad que si tienen tanto Sony como LG.
Esta interesante tecnología analiza los píxeles adyacentes en colores uniformes, si detecta que no son exactamente iguales, aplica una máscara de gradiente progresivo, viendo así un color en un lado que va poco a poco y de forma suave y progresiva, convirtiéndose en la otra tonalidad. Es espectacular ver como mejor la calidad del contenido comprimido y elimina el banding, algo que además le vendría de perlas a la QN95B también para eliminar el exceso de banding en algunas escenas
En cuanto al interpolador, Motion Plus en este caso que es como lo llama Samsung, si el año pasado le dimos un sobresaliente, este año se queda sin dudar la misma nota, ya que es prácticamente idéntico. Si bien continúa por detrás del MotionFlow de Sony, ya podemos decir que pasa a jugar en Primera.
No hay rastro de los tirones que sí pudimos ver otros años ni tampoco exceso de efecto telenovela ni tampoco artefactos. Se puede utilizar en valores moderados sin perder la esencia ni la cadencia original de cine. Otra pequeña mejora, sin duda, junto al mejor escalado de fuentes por debajo de 1080p del nuevo Neural Quantum Processor.
Por otra parte, Samsung es la única marca que permite introducir un interpolador menos intenso para juegos, algo que ayudará mucho a la suavidad en juegos de 30 fps y no incrementará demasiado el input lag. Y justo con eso vamos a terminar este extenso análisis.
Gaming: la mejor LED del mercado para jugar
Para acabar, aunque no somos muy de juegos, queríamos dedicarle un apartado al Gaming. Este año, en este campo nos encontramos con varias mejoras respecto al año pasado. Para empezar y lo más importante: ya no tendremos ninguna degradación de la imagen al activar el local dimming (hasta ahora los televisores de Samsung desactivaban demasiadas zonas del local dimming para arañar unos segundos en el input lag). Se ve prácticamente igual que el modo película -aunque con algo más de blooming y más brillo, ya que parece que continúa desactivando algunas zonas-.
Por otra parte, también se ha mejorado el input lag, ya que en el modo Juego (incluso podemos activar el Gradación Suave sin apenas subir el input lag) la TV nos entrega unos impresionantes 9.5-10 ms (y rondando los 5-6 ms en modo 4K@120 Hz). Además de ello, como podéis ver en la foto inferior, también se ha añadido un «Panel gaming» que nos informa en todo momento del tipo de VRR que tenemos activado, fps, si tenemos el HDR o no, el aspect ratio, etc. Además podemos activar el Motion Plus en el modo juego, llegamos a unos fantásticos 23 ms y con una suavidad emulada de 60 fps en todos los juegos, un total acierto por parte de Samsung.
Conclusiones
Nos encontramos ante un panel LCD VA mini LED tope de gama QLED de Samsung 2022 en su línea 4K que nos deja un muy buen sabor de boca, aunque es un poco más de lo mismo. En esta QN95B, nos encontramos con un televisor con entre 500-800 zonas de retroiluminación (dependiendo de las pulgadas), con un muy buen control de la luz y muy buen brillo.
Tiene una serie de puntos positivos muy larga: gran brillo, muy buen control del blooming, el mejor filtro antirreflejos del mercado, 4 puertos HDMI 2.1 con soporte para 4K a 120 Hz y VRR, un One Connect que se puede fijar a la peana, cobertura cromática muy rica, gran electrónica (escalado, procesado y movimiento), gran impacto en HDR…
…pero que queda lamentablemente empañado por sus bugs: un sistema operativo lento e intrusivo, local dimming que no funciona en algunas escenas de forma aleatoria, pico de brillo más alto solo en tests sintéticos, un conmutador automático de espacio de color para la UHD que no funciona, no cuenta con ningún filtro de Gradación Suave, un local dimming algo inferior al del modelo de 2021, ausencia de Dolby Vision, etc.
En conclusión…nos encontramos ante un grandísimo televisor LED, probablemente el mejor LED 4K del 2022, aunque nos parece una versión descafeinada del modelo de 2021 y sin grandes cambios que supongan un argumento para cambiar desde dicho modelo. Aún así, como decimos, se trata de un gran televisor LED, por lo que entra directamente en nuestra lista de televisores recomendados de gama alta.