El fabricante coreano es uno de los pesos pesados en el mercado de las Smart TV. Samsung y su tecnología QLED se enfrenta a LG y sus paneles OLED para alzarse con el cetro que los indica como los mejores televisores 4K UHD del mercado. Y, tras nuestro análisis de la Samsung QLED 2018, una de las joyas de la corona de la compañía, queda claro que decidir entre una tecnología u otra, es realmente difícil.
Y es que el trabajo realizado por Samsung para dotar a su nueva línea QLED de 2018 de unos acabados en materiales nobles, calidad de imagen y minimalismo hacen que este televisor roce la perfección. ¿Sus únicos gran peros? su alto precio y difícil instalación si queremos colgarlo en la pared. Y es que esta gama de televisores Samsung no está al alcance de todos los bolsillos, aunque vale la pena la inversión para disfrutar de contenidos multimedia en este televisor de lujo.
Quejas contra la desaparición constante de aplicaciones en las Smart TV
Nosotros hemos probado el Samsung QLED 2018 de 65 pulgadas, exactamente el modelo QE65Q9FNATXXC que ronda los 3.500 euros en la página web del fabricante. Eso sí, como vais a ver en esta review, el resultado conseguido es impecable. Sí, tenemos opciones mucho más económicas, como la Xiaomi Mi TV 4A que no supera los 500 euros, pero la diferencia en términos de calidad es más que evidente.
Análisis de la Samsung QLED 2018: diseño
Samsung está poniendo especial fases para hacer que el diseño de sus televisores sea lo más minimalista posible. Ya en 2017 sorprendieron con un sistema revolucionario que consiste en tener un equipo externo para las conexiones que se conecta a través de un cable semitransparente que da un gran juego para colocar el televisor donde se nos antoje.
Con un grosor de 3.89 cm, el nuevo Smart TV de lujo de Samsung cuenta con algunos detalles que marcan la diferencia. Para empezar el pequeño marco que rodea al televisor, y que sirve para disimular ese grosor provocado por la tecnología Full Array, hace que el televisor luzca como un cuadro. Su tacto es realmente agradable, destilando calidad por cada uno de sus poros y a primera vista queda claro que será el centro de todas las miradas de nuestras visitas.
Si a esto le sumamos el hecho de que cuenta con un modo semitransparente que consigue unos resultados bastante espectaculares, tenemos ante nosotros un televisor que, estéticamente, parece una pequeña obra de arte. Y el que haya un único cable se encargue de dar vida al Samsung QLED 2018 de 65 pulgadas permite instalarlo en cualquier parte. Si puedes.
Y es que aquí tenemos uno de los grandes fallos de este Smart TV: la única forma de instalarlo con seguridad es comprar el soporte oficial de Samsung, que cuesta otros 150 euros. Sí, ya que te has gastado más de 3.000 euros en un televisor, no debería dolerte gastarte 150 euros más en un soporte. Pero si tienes un soporte genérico vas a tener problemas par encontrar los tornillos necesarios, por lo que vas a tener que pasar por caja sí o sí.
Aunque hay que reconocer que el módulo OneConnect, el «cerebro» de este Smart TV que puedes ocultar junto a los cables en cualquier mueble permite que la Samsung QLED 2018 ofrezca un aspecto único. Aquí es donde nos encontramos con 4 salidas HDMI, 3 USB, el puerto ethernet, salída óptica, entrada RF, Ex-Link, WiFi y Bluetooth de bajo consumo.
Una conectividad en general que cumplirá de sobra con las necesidades de cualquier usuario. En líneas generales, el trabajo realizado por Samsung es mayúsculo por lo que no podemos criticar apenas nada en el apartado del diseño, excepto el problema para colgar esta televisión a la pared.
Análisis de la Samsung QLED 2018: características
Uno de los grandes problemas de los paneles QLED es la necesidad de una iluminación trasera que hace que los negros se vean menos puros que en una pantalla OLED que sencillamente apaga los píxeles para ofrecer unos negros muy superiores. En este aspecto sobre gustos los colores, pero el trabajo conseguido para reproducir este color ha sido impecable.
Todo gracias a la tecnología Direct Full Array, que consiste en un sistema de iluminación formado por lámparas que permite controlar mucho mejor los negros para conseguir un resultado realmente bueno.
Como era de esperar, el nivel de brillo es uno de los puntos fuertes de la Samsung QLED 2018. La tecnología HDR10+ junto con Q HDR Elite hace que alcance picos de hasta 2.000 nits. Por suerte el nivel de brillo de la imagen se puede regular a través de diferentes modos preconfigurados, aunque puedes optar por una configuración manual.
Ver contenidos HDR es una experiencia única. Los colores se ven vívidos y nítidos, ofreciendo una calidad de imagen más que correcta. Incluso los contenidos en Full HD se ven a una calidad muy notable. Eso sí, el uso de la TDT es una decepción muy grande: el excesivo tamaño de la pantalla hace que la gran mayoría de contenidos se vean pixelados.
Esto no es culpa de la televisión sino de la fuente que no es buena en la mayoría de canales, pero es un detalle a tener en cuenta. No nos podemos olvidar de la superficie antirreflejos que integra el panel consiguiendo un buen resultado, además de los ángulos de visionado que nos permitirán ver la pantalla sin mayores problemas desde diferentes posiciones.
Por último, en el apartado del audio, su sistema de sonido 4.2CH y 60W de potencia ofrece una calidad de sonido más que decente que te permitirá ver la tele o disfrutar de videojuegos sin necesidad de un equipo externo.
Análisis de la Samsung QLED 2018: Software
Por último vamos a hablar del apartado del software de esta Samsung QLED 2018.Ya hemos visto que esta Smart TV premium cuenta con una calidad de imagen sorprendente que te permitirá disfrutar de cualquier contenido multimedia ofreciendo una experiencia de usuario realmente buena. Y su software, pese a contar con algún pero, cumple con nota.
Para empezar tenemos la función Easy Setup. Esta herramienta de la Samsung QLED de 2018 nos permite configurar la televisión utilizando nuestro teléfono móvil. Incluso podremos ir seleccionando qué aplicaciones instalar, además de poder identificarnos en las aplicaciones directamente que tengamos en nuestro smartphone. Muy útil para Netflix o Spotify por poner algún ejemplo.
Otra de las funciones que más aprovecharemos es SmartThings. Con ella Samsung pretende que nuestro televisor sea el cerebro de nuestro hogar inteligente. La plataforma IoT del fabricante coreano es muy completa, el problema es que es muy complicada de utilizar. De esta manera, si tienes una lavadora Samsung con esta tecnología recibirás diferentes notificaciones cuando acabe el lavado. Eso sí, si no tienes un producto Samsung es realmente difícil conseguir configurar esta herramienta, pero esperamos que en un futuro actualicen el sistema para ponernos las cosas más fáciles.
Y no nos podemos olvidar de Guía Universal, una herramienta que se encarga, mediante inteligencia artificial, de ir recomendando contenidos en función de tus gustos. Por desgracia no era compatible con mi proveedor de ADSL y televisión por cable pero es un detalle a tener en cuenta ya que la idea de que te ofrezca películas, series y documentales nos ha parecido realmente interesante.
Detalle a parte el mando a distancia de la Samsung QLED de 2018. Hablamos de un mando Bluetooth que nos permite utilizar la televisión sin tener que apuntar directamente hacia ella. A esto hay que sumarle una construcción sólida y unos botones realmente cómodos que hacen de este elemento uno de los más conseguidos.
En cuanto al precio y fecha de lanzamiento, decir que ya podemos comprar la Samsung QLED de 2018 a un precio que ronda los 3.000 euros para el modelo de 65 pulgadas. Una cifra muy elevada y que hace que no esté al alcance de todos los bolsillo pero no podemos negar que su calidad de imagen, detalles en el apartado del software e increíble diseño hacen de esta Smart TV de lujo una de las mejores opciones a tener en cuenta.