cEl otro día os presentábamos la nueva OLED de LG, la todoterreno por excelencia: su modelo C1. Tras un pequeño vídeo de primeras impresiones y características, así como un repaso rápido al sistema operativo, nos ponemos manos a la obra y empezamos a entrar ya en terreno interesante…y empezamos nada más y nada menos que con una comparativa en HDR10 y Dolby Vision entre estas dos pedazo de Smart TV.
Pese a que de momento ya es evidente que la LG es superior en aspectos de gaming (al contar ahora mismo ya con soporte completo para VRR, G-Sync, Freesync, HGIG y Dolby Vision a 4K 120 Hz, así como un input lag sensiblemente menor) a falta de la actualización de los nipones para dotar de VRR a sus modelos A80J y A90J, lo cierto es que también nadie duda que el modelo de Sony es superior en cine…¿o no? ¿y por cuanto? ¿se nota el brillo máximo del nuevo panel de Sony?
Empezamos la comparativa analizando contenido HDR masterizado a 1000 y 4000 nits del disco de pruebas Spears&Munsil UHD Benchmark, donde ya empezamos a ver que la A90J despunta en un mayor brillo -tanto en detalles pequeños al 10% como en pantalla completa al 100%-, gracias a un mayor pico de brillo y además un menor ABL. Aún así, sorprende ver como en muchas escenas medias la LG C1 se defiende más que bien, encontrando pocas diferencias con Sony y, esencialmente, responden a la mejor electrónica japonesa.
Continuamos nuestra comparativa con trozos de películas tan diferentes como la de Déjame Salir, que contiene una serie de escenas la mar de interesantes para analizar el detalle en sombra, algo que ambos modelos logran perfectamente y sin diferencias tras haber pasado por unos pequeños ajustes (que veréis en el video y guía de los mejores settings para las LG 2021). Las diferencias aquí son entre invisibles y pírricas, en el mejor de los casos.
Si pasamos a Dolby Vision, aquí si que no hay diferencia alguna a lo largo del clip de prueba utilizado (Meridian), donde ambos televisores muestran una imagen exacta, precisa e igual…salvo la diferencia en la tonalidad de color. El detalle en sombra, nivel de negro y brillo -pico y medio de la escena- son idénticos, lo que evidencia el control de Dolby sobre su material, no actuando aquí el tone-mapping en ningún momento.
En las escenas de Kingsman: Servicio Secreto, Capitán América: Civil War y Transformers 5: el último caballero, todas ellas en HDR10, las diferencias vuelven a verse sin problemas a favor de la A90J con un mayor brillo en todas las escenas y, especialmente, un mejor tone-mapping, donde no hay una bajada de brillo de la escena en la A90J -solo comprime las altas luces-, cosa que no ocurre con el Dynamic Tone Mapping de LG -que tiene a disminuir todo el brillo, no solo el de las altas luces-.
Acabamos la comparativa con varios trozos de Expendiente Warren: obligado por el demonio, un film tremendamente oscuro que nos sirve para analizar de nuevo el detalle en sombra y profundidad de la imagen, encontrando que ambos televisores se muestran prácticamente idénticos. Una muy buena noticia.
Como conclusión, podemos decir que más o menos hemos visto lo que esperábamos: un mayor brillo y mejor tone-mapping en la Sony, aunque también hay que decir que este modelo cuesta el doble que la LG C1, que además presenta otras mejoras como las citadas para el segmento de jugadores. Ya, en función de vuestros usos, optaréis por un modelo o por otro.