El otro día os trajimos la noticia del monstruoso televisor de Konka: 110 pulgadas y 230000 zonas de atenuación en lo que supone el mayor reto al que se ha enfrentado el mundo de las Smart TV en lo que va de década -o al menos, desde la llegada de los televisores OLED-. Y es que implementar 230000 zonas (si, doscientas treinta mil) de atenuación en un televisor con retroiluminación FALD (Full Array Local Dimming) no parece fácil y menos implementar una electrónica capaz de controlar semejante brutalidad de zonas de atenuación.
Bien, es tal la expectativa que ha generado este modelo (que por cierto, en china Konka es una marca conocida y está en el TOP 5 de marcas más vendidas en el país asiático), que se han publicado más datos de su funcionamiento y es totalmente asombroso como puede conseguir un nivel de precisión absoluto, especialmente a la hora de mostrar detalle en sombra donde otro televisor, simplemente, no puede. Vamos a conocerla un poco más a fondo.
El televisor de Konka se sale de las tablas: 20 bits y 10000 chips integrados para controlar sus 23000 zonas de atenuación
Como ya explicamos el otro día, este modelo ofrece varias características totalmente fuera de serie. Evidentemente lo que más llama la atención son sus más de 230000 zonas de retroiluminación, creando una imagen sin precedentes en la industria. Pero otras características son igualmente sorprendentes: 110 pulgadas, resolución 8K y 10000 nits de brillo máximo: ¿será el televisor definitivo?
Una de las claves para explicar tal generación de expectativas no es solo el enorme número de zonas (que también), si no su extraordinario nivel de precisión de detalle en sombra y es que el fabricante ha implementado un nivel de gradación de grises de más de 20 bits, algo impresionante teniendo en cuenta que TCL y Hisense operan a 16 bits, mientras que Sony lo hace a 22. Una escala de grises de mayor cantidad de bits debería generar un mejor detalle de las sombra. En teoría, el ojo humano puede percibir hasta 24 bits de gradación, pero 20 bits o más está lo suficientemente cerca como para que no notes la diferencia.
Con esta implementación, se consigue en esta Konka 110A8 Ultra un nivel de precisión sin precedentes. Como ya hemos explicado, gracias a la gradación a 20 bits implementado en sus 230400 zonas de atenuación, se consigue un control completo y fino desde micro detalles hasta imágenes macro, permitiendo las partes brillantes expresarse a su máximo potencial sin menguar la capacidad de hacer lo mismo en la parte oscura. Y todo ello, a la vez, con un brillo de 10000 nits en HDR y Dolby Vision.
Otro aspecto absolutamente increíble de este modelo es que usa un motor óptico para conseguir tal nivel de precisión a nivel de píxeles y hacer funcionar la retroiluminación Mini LED a través de una enorme cantidad de fuentes de luz QDLED (cada emisor cuenta con una capa de Quantum Dot delante para conseguir una mejora cromática significativa), además de una corrección de la trayectoria óptica de la matriz del propio panel y de los emisores.
Tampoco es casualidad que este televisor tenga exactamente 230400 zonas. Se ha hecho así para que el panel pueda organizar y controlar de manera uniforme matrices de píxeles de 12×12 en un panel 4K o 6×6 píxeles en una pantalla 8K. 6×6 píxeles equivalen a 360p. Los monitores de doble celda controlan 2×2 píxeles o 1080p (2,073 millones de zonas).
Por último, para lograr el control de la luz a nivel de píxel de estas más de 230000 zonas, se han instalado más de 10000 controladores IC (chips integrados) en el panel de retroiluminación. La transmisión de los datos y el algoritmo de direccionamiento automático pueden realizar de forma rápida y precisa el control de la luz sincrónico de una gran cantidad de zonas de retroiluminación. Combinado con todo lo anterior, se traduce en que no veremos retraso en las zonas, parpadeos o problemas con fluctuaciones de negro.