Recientemente, Samsung ha dejado entrever sus planes futuros en el mercado de televisores, confirmando que se centrará en televisores OLED premium de gran tamaño. Esta declaración fue realizada en el informe de ganancias del segundo trimestre de 2024, donde la empresa destacó que:
“En la segunda mitad de 2024, se espera una recuperación adicional de la demanda general del mercado debido a la creciente demanda de televisores QLED, OLED y de mayor tamaño. El negocio de pantallas visuales aprovechará la demanda de la temporada alta implementando programas de ventas centrados en televisores premium y de gran tamaño.”
La decisión de Samsung se produce tras informar un fuerte crecimiento en el mercado de televisores OLED premium durante la primera mitad del año. Aunque no se mencionaron modelos específicos, esto sugiere que la línea actual de televisores OLED de Samsung, incluidos el Samsung S95D y el Samsung S90D, ha tenido un buen rendimiento en ventas.
Un crecimiento fuerte en el mercado de televisores OLED
El Samsung S95D, en particular, ha recibido críticas muy positivas. Las mejoras en la precisión del color, el manejo del movimiento y otros aspectos lo han consolidado como el mejor QD-OLED de Samsung hasta la fecha.
A pesar de que la tecnología Neo QLED (término de Samsung para Mini LED) está en auge y es promocionada por muchas compañías, aún no ha alcanzado la experiencia ofrecida por los televisores OLED, incluso en el extremo superior del mercado.
Por ejemplo, tanto el Sony Bravia 9 como el Samsung QN95D, ambos Mini LEDs insignia, han enfrentado problemas comunes como niveles de negros menos impresionantes y precios cercanos a los OLED, lo que ha perjudicado su atractivo general.
Samsung también destacó una serie de eventos deportivos este verano como un área clave que impulsa el crecimiento. Este año hemos visto grandes carreras de Fórmula 1, la Eurocopa y las Olimpiadas de verano en curso.
¿Qué televisores dejará de lado Samsung?
Curiosamente, Samsung puso menos énfasis en los televisores 8K, a pesar de haberlos listado como una prioridad clave y un área de crecimiento potencial en declaraciones anteriores. El Samsung QN900D, por ejemplo, destacó por sus avanzadas capacidades de escalado, lo que permite mejorar notablemente la calidad de las imágenes de menor resolución. Sin embargo, aunque este modelo es ideal para los primeros adoptantes de la tecnología 8K, la realidad es que todavía no existe suficiente contenido nativo en esa resolución para justificar su compra para la mayoría de los consumidores.
Por esta razón, se sigue recomendando que los usuarios esperen antes de invertir en televisores 8K hasta que haya más disponibilidad de contenido compatible. Esto refleja una estrategia cautelosa por parte de Samsung en cuanto a la promoción de sus modelos 8K en comparación con su enfoque en los televisores OLED de alta gama y gran tamaño.
Una vez más, la compañía no mencionó planes para mejorar sus televisores más pequeños y asequibles, que han tenido un desempeño poco satisfactorio en el mercado en los últimos años. Un ejemplo claro de esto es el Samsung CU800, que, a pesar de ser muy económico y ofrecer especificaciones sólidas en papel, ha presentado serios problemas de retroiluminación. Estos problemas han afectado la calidad de la imagen, haciendo que los colores se vean apagados y las escenas oscuras pierdan detalle.
La apuesta de Samsung por televisores OLED premium y de gran tamaño, junto con un enfoque cauteloso en los televisores 8K y una atención limitada a los modelos más económicos, deja clara una estrategia hacia el segmento de mercado de alta gama. Observando una creciente demanda de pantallas de alta calidad y grandes dimensiones, y eventos deportivos globales impulsando el interés, la empresa parece bien posicionada para capitalizar las tendencias del mercado en la segunda mitad de 2024.
Sin embargo, la falta de atención a los modelos más asequibles podría dejar un hueco en el mercado que competidores podrían aprovechar. Con el objetivo de seguir elevando la calidad y la experiencia de sus clientes, será interesante ver cómo Samsung ajusta su estrategia en los próximos años. Esto determinará si la empresa puede mantenerse a la vanguardia en un mercado de televisores cada vez más competitivo.