M. Night Shyamalan es uno de esos directores de cine que siempre sorprende. Ya sea para bien o para mal. Sus películas tienen un sello muy personal, reconocible en cualquier parte del mundo. Pero aunque sus películas tengan esa huella tan propia que suele enganchar, no todos sus largometrajes han recibido la atención necesaria en el momento en el que han visto la luz. Y este es el caso de ‘Tiempo‘, la obra de M. Night Shyamalan que no tuvo una gran repercursión en el momento de su estreno, pero que ahora, con su llegada a Netflix, parece que está colocandose en una mejor posición.
‘Tiempo‘ ha liderado el top mundial de Netflix durante varios días tras su estreno el pasado 19 de febrero, y ha dejado a más de un espectador perplejo, algo que no nos extraña. Aquí, Shyamalan mezcla una trama de locura con giros radicales y muy particulares. Pero, ¿Cuál es la trama de la película y qué nos cuenta Shyamalan en este largometraje?
‘Tiempo’, el thriller de intriga de Night Shyamalan que triunfa en Netflix
Lo cierto es que la historia es más sencilla de lo que parece, a pesar de que veamos algunos giros inesperados y es que si algo tiene Shyamala es que demuestra en cada trabajo su talento narrativo.
La película cuenta con un elenco destacado, encabezado por Gael García Bernal, la talentosa Vicky Krieps y jóvenes promesas como Thomasin McKenzie y Alex Wolff. ‘Tiempo’, al igual que todas las obras de Shyamalan, es una experiencia que se disfruta mejor sin conocer demasiados detalles de antemano. Sin embargo, una vez revelados todos sus secretos, sigue siendo fascinante revisitarla y apreciar cómo el director ha transformado ese espacio en cine puro a través de una puesta en escena llena de ingenio. Es precisamente ese enfoque lo que hace que sus películas sean tan especiales.
En cuanto a la trama, esta es la sinopsis:
Durante unas vacaciones en un idílico destino tropical, una familia decide pasar el día en una apartada playa, buscando descanso y desconexión. Sin embargo, pronto comienzan a notar que algo extraño sucede a su alrededor. Lo que al principio parecen simples coincidencias se transforma en una serie de anomalías temporales inquietantes. A medida que las horas avanzan, la familia se enfrenta a una realidad desconcertante que cambiará su destino para siempre.
Shyamalan, el experto en crear suspense e incomodidad al mismo tiempo
M. Night Shyamalan se ha consolidado como un maestro del suspense con un toque de incomodidad, logrando construir atmósferas inquietantes con los elementos mínimos. Su estilo visual, caracterizado por panorámicas precisas, primeros planos fragmentados y fondos desenfocados, revela una elegancia cinematográfica que parece haber caído en desuso en el cine actual. En esta película, el director vuelve a demostrar que el detalle importa más que el conjunto, tejiendo una narración donde cada encuadre y movimiento de cámara refuerza la sensación de desasosiego.
Esta historia se presenta como una fábula oscura. Lo que comienza como una escapada idílica pronto se transforma en una pesadilla inexorable, en la que cada decisión, cada mirada y cada pequeño gesto adquieren un peso aterrador. Shyamalan guía al espectador con una precisión quirúrgica, llevando la tensión al límite sin recurrir a artificios innecesarios.
Desde los inocentes juegos infantiles en el hotel paradisíaco hasta las miradas furtivas a través de cristaleras y retrovisores, el director siembra pistas sobre el horror que está por venir. La playa, convertida en una trampa mortal, se erige como un poderoso símbolo que admite múltiples interpretaciones: la fugacidad de la vida, las complejidades del matrimonio o incluso el confinamiento global que marcó a toda una generación. Con esta película, Shyamalan demuestra, una vez más, que su cine es una experiencia sensorial tan hipnótica como perturbadora.