Vale, lo reconocemos: cada año Samsung lanza sus nuevas teles y todos pensamos “¿otra vez lo mismo?”. Pero esta vez la cosa pinta diferente. Lo nuevo que traen los coreanos no va solo de mejor imagen o sonido, sino de meterle una buena dosis de inteligencia artificial a todo. Y eso, amigos, puede cambiar mucho la experiencia delante de la tele.
Samsung Vision AI es el nombre que hay que recordar. No se trata de una función suelta, sino de todo un sistema de inteligencia artificial que afecta a la imagen, el sonido y cómo interactuamos con la tele. Estamos hablando de funciones tan locas como traducir subtítulos en tiempo real o controlar la tele con gestos… ¡mientras llevas puesto el Galaxy Watch! Vamos, que nos acercamos cada vez más a esas pelis de ciencia ficción donde la tele parece tener vida propia.
Ahora bien, antes de emocionarnos más de la cuenta, hay que poner los pies en la tierra. Aún no hemos podido probarlas por nosotros mismos, así que aunque pinta todo genial sobre el papel, no vamos a dar nada por hecho. Pero eso no quita que podamos ir desgranando todo lo que Samsung promete con esta nueva gama Neo QLED, tanto en 8K como en 4K.
Aquí empieza lo bueno: lo que trae la gama Samsung Neo QLED 2025
Empezamos por el tope de gama: Neo QLED 8K, con modelos como el QN990F y el QN900F. Y sí, Samsung sigue apostando fuerte por el 8K, aunque lo cierto es que todavía hay muy poco contenido nativo en esa resolución. Ahí es donde entra en juego el nuevo procesador NQ8 AI Gen3, que promete reescalar contenido en SD, HD o incluso 4K hasta que se vea como si fuera 8K real. ¿Magia? No, inteligencia artificial. Ahora bien, habrá que ver en la práctica hasta qué punto ese reescalado logra resultados que realmente marquen la diferencia frente al 4K nativo bien procesado.
Además, incluyen su ya conocida tecnología Glare-Free, que reduce los reflejos incluso en salones llenos de luz, y un diseño que parece sacado de una galería de arte, con el nuevo Metal Frame que tiene el QN900F.
¿Y qué decir del sonido? Porque aquí no se quedan cortos: Dolby Atmos, altavoces superiores y sonido que sigue el movimiento en pantalla. Sí, eso último significa que si una moto pasa de izquierda a derecha en una peli, tú lo oyes exactamente así. Brutal, aunque hay que decir que con una buena barra de sonido Samsung el salto en calidad sonora es aún más notable, sobre todo en espacios grandes donde el sistema integrado puede quedarse algo corto en graves o en presión sonora.
Y para los jugones, atención, porque tenemos Motion Xcelerator a 240Hz en el QN990F y a 165Hz en el QN900F, lo que se traduce en movimientos súper fluidos, ya estés viendo un partido o dándole al mando en el sofá. Y por si fuera poco, el nuevo Wireless One Connect Box te permite conectar todos tus cacharros… ¡sin cables por medio! Hasta 30 pies de distancia, que viene siendo casi 10 metros. Una locura.
Pero si el 8K aún te queda grande (o tu cartera no da para tanto), la buena noticia es que la gama 4K también viene potente. Los modelos QN90F, QN80F y QN70F integran también Mini LEDs para una imagen más precisa y brillante. El QN90F, que es el flagship 4K, lleva el procesador NQ4 AI Gen3, y según Samsung, todo lo que pongas se verá mejorado automáticamente. Además, también lleva la tecnología Glare-Free y el sistema de sonido se adapta al contenido en tiempo real. Como para no querer una.
Y por cierto, ojo al tamaño: estamos hablando de teles desde las 43 hasta las 115 pulgadas. Sí, has leído bien: 115 pulgadas. Casi como una pared entera. Y no solo eso, Samsung incorpora una tecnología llamada Supersize Picture Enhancer, que tendrá la misión de mejorar la imagen en estos tamaños gigantes para que no pierdas calidad ni te marees con tanto píxel.
Por último, pero no menos importante: Samsung Vision AI trae funciones que parecen sacadas del futuro. El Click to Search te permite, con un clic, saber quién es el actor que aparece en pantalla. Con Live Translate, puedes tener subtítulos en tiempo real en tu idioma aunque la peli esté en chino mandarín. Y con Universal Gestures, puedes controlar la tele moviendo la mano… si llevas un Galaxy Watch, claro.
¿Y cuánto cuestan estas maravillas?
Porque sí, todo esto suena muy bien, pero vamos al lío: ¿cuánto hay que soltar para tener una de estas teles en casa? Pues agárrate, que vienen curvas (y ceros).
Empezamos por los modelos 8K, que son los más top y, como era de esperar, también los más caros:
- QN990F (98 pulgadas): 39.999 dólares
- QN990F (85 pulgadas): 8.499 dólares
- QN990F (75 pulgadas): 6.499 dólares
- QN990F (65 pulgadas): 5.499 dólares
El hermano “menor”, el QN900F, también en 8K, no se queda corto:
- QN900F (85 pulgadas): 5.499 dólares
- QN900F (75 pulgadas): 4.299 dólares
- QN900F (65 pulgadas): 3.299 dólares
Ahora bien, si prefieres algo más terrenal, la gama 4K es bastante más accesible (y para muchos más que suficiente):
QN90F (el flagship 4K):
- Desde 1.399 dólares (43 pulgadas) hasta 14.999 dólares (98 pulgadas). Y sí, también habrá un monstruo de 115 pulgadas, aunque ese aún no está a la venta.
QN80F:
- Desde 1.299 dólares (55 pulgadas) hasta 3.499 dólares (85 pulgadas)
QN70F:
- Los precios exactos están por llegar, pero se espera que estén por debajo de los QN80F.
Lo dicho: hay para todos los gustos… y todos los bolsillos (más o menos). Aunque eso sí, si quieres la experiencia completa con 8K, sonido inmersivo, Vision AI y todos los juguetes… prepárate para rascarte el bolsillo.
Ah, y si te mola tener la tele como elemento decorativo, ahora no necesitas comprarte un Frame. El Samsung Art Store llega también a los modelos Neo QLED para que puedas poner obras de arte en pantalla cuando no estás viendo nada. Más de 3.000 piezas disponibles, desde Van Gogh hasta Basquiat.
Y para terminar, un detallazo: Samsung ha prometido hasta siete años de actualizaciones para su sistema Tizen OS, lo que garantiza que tu tele se mantenga actualizada y con las últimas apps y funciones de IA. Que no es poca cosa en un mundo donde muchas teles quedan obsoletas en un par de años.
¿La conclusión? Pues todavía no tenemos una. Porque, como decíamos antes, hasta que no las tengamos delante y las probemos con nuestros propios ojos y oídos, no podemos sacar conclusiones. Pero si todo esto funciona como promete, estamos ante una de las gamas de televisores más ambiciosas de Samsung en años. Y ya sabes cómo va esto: si Samsung sube el listón, el resto tendrá que ponerse las pilas. ¡Estaremos atentos!
Via: Samsung Newsroom
